Aún recuerdo cuando leí la noticia de que habían envenenado a Athos y Tango, fue hace casi un año, una noticia sumamente triste ya que el envenenamiento es una muerte atroz, además de que es una de esas noticias que te hacen perder aún más la fe en la humanidad, quitar la vida a un ser vivo, con crueldad… a un perro y para hacer este acto aún más bajo, envenenar a perros que encima de todo dedicaron su vida a ayudar humanos, no cabe duda que es uno de los actos más reprobables que puede hacer un humano.
Sinceramente como sucede en todos los casos de maltrato animal nunca esperé que se fuera a hacer justicia, en innumerables ocasiones se han realizado denuncias con evidencia y a lo mucho había llegado a una multa después de meses o años de desgaste de los demandantes.
El pasado 22 de agosto fue declarado culpable el asesino de estos perros siendo sentenciado a 10 años y seis meses de prisión, además, según se informó, el agresor deberá pagar una multa de 115 mil pesos, así como 2.3 millones de pesos por reparación de daño por Athos y 223 mil pesos por Tango.
La pérdida de estos perros es irreparable pero esta sentencia es un parteaguas en condenas por maltrato animal ya es la pena más grande que se ha otorgado por asesinar animales.
México es de los países con mayor índice en maltrato animal y desgraciadamente es así porque si alguien maltrata a un animal no pasa nada, el abandonar también es maltrato y en México solo el 30 por ciento de los animales tienen un hogar, la mayoría llegan a la calle por falta de responsabilidad y negligencia, al ni siquiera estar esterilizados se reproducen en las calles generando un incontable número de animales abandonados y sin hogar.
Estamos muy lejos aún de tener una sociedad consciente en donde los animales no sean vistos como objetos por lo que aún creemos que es posible ponerle precio a una vida, en este caso la comercialización de animales crea un gran problema también ya que muchas veces los criadores no tienen escrúpulos y tienen a los perros en condiciones deplorables en donde están enjaulados, sucios, mal comidos y sólo son utilizados como máquinas reproductoras de perritos.
Espero que en México en un futuro sólo sea posible tener animales rescatados y adoptados como sucede en algunos países ya, que el tener animales no sea algo fácil y accesible, que sólo puedan tenerlos personas que realmente puedan hacerse cargo de ellos, así como que existan sanciones para el abandono y descuido también. Como en algún lugar leí: "El que no sabe cuidar, no debería tener…".
En cuanto a Athos y Tango siento muchísimo su muerte y espero que en este momento se encuentren corriendo libres en algún lugar, gracias por abrir los corazones de tantas personas y por cambiar la historia de los castigos a los maltratadores de animales.