El titular del Área de Crimen Organizado y Drogas de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito afirmó que la emergencia sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19 contribuyó a que las redes sociales fueran el canal para reclutar más víctimas para la trata de personas, delito en el que los más afectados fueron los niños y las niñas.
Ciudad de México, 31 de julio (SinEmbargo).- La pandemia provocada por la COVID-19 contribuyó a que las redes y plataformas digitales sirvieran de anzuelo para reclutar a víctimas de trata de personas, así lo afirmó Mario Cordero, titular del Área de Crimen Organizado y Drogas de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en entrevista con las periodistas Daniela Barragán y Romina Gándara para el programa Café y Noticias que se transmite por el canal de Youtube SinEmbargo Al Aire.
Cordero explicó que la contingencia sanitaria que propició la pandemia por Coronavirus orilló a que muchas personas pasaran más tiempo navegando por internet, lo que las expuso al contacto digital con delincuentes. “En 2019, de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, existieron 679 casos, ¿Qué pasa en 2020?, claro pandemia, y hay 677 casos, es decir, sólo bajo dos, y en 2021, 744 víctimas en total, y lo que va de enero a mayo de 2022 podemos ver un incremento, ya que hay alrededor de 400 casos”, detalló.
“En términos estadísticos parece ser que aumentaron los casos, por qué lo digo así, durante la pandemia, claro las personas pasamos más tiempo en línea, entonces utilizamos más redes sociales, plataformas digitales, y eso hizo que estuviéramos más expuestos a ser enganchadas, cuando me refiero a enganchadas es justamente este acto de abuso, puede ser de enamoramiento o de engaño en donde, sobre todo, afectó a niñas y a niños”, quienes, dijo, no sabían la identidad de las personas que platicaba con ellos, por lo que los casos de trata de personas incrementaron y “todavía no están siendo catalogados como tal”, agregó.
Destacó que la generación de material de abuso sexual infantil se agudizó con dicha emergencia sanitaria, y que los tratantes tuvieron más oportunidades de “ganarse la confianza de niñas y niños”. “Empezaban pidiendo información de cómo te llamas, con quién vives, y eso iba incrementando a ‘Oye, mándame una foto de ti’ y ahora ‘mándame una foto o video de ti pero de esta forma’, este material era después distribuido y vendido en línea, entonces los tratantes empezaron a explotar o a operar desde sus propias casas”, señaló Cordero.
Pese a este incremento en el delito de trata de personas, el titular del Área de Crimen Organizado y Drogas de la Oficina de las UNODC afirmó que las cifras oficiales no reflejan la realidad en el aumento de ese delito, ya que “tenemos que tomar en cuenta que en nuestro país al menos 90 por ciento, más o menos, un poquito más, no son denunciados o reportados, entonces existe todavía una cifra enorme que no alcanzamos a ver y esto tiene que ver, por su puesto, con mejorar los esfuerzos en términos de la sistematización propia de los datos, es decir, contar con datos de calidad”.
Así como “con la dificultad de identificar este delito, es bastante, bastante complejo y se puede confundir, por ejemplo, con secuestro o simplemente explotación sexual o violación, tiene como varias capas y complejidades”, por ello recordó que las modalidades de trata de personas son: “la esclavitud, la condición de ciervo, la prostitución ajena, o cualquier forma de explotación sexual, la explotación laboral, que es distinta de los trabajos o servicios forzados, la mendicidad forzosa, la utilización de personas menores de 18 años en actividades ilícitas, la adopción ilegal de personas menores de 18 años, el matrimonio forzoso o servil, el tráfico de órganos, de tejidos y células de seres vivos, y la experimentación biomédica”.
Además, especificó que existen dos tipos de estrategias utilizadas por los delincuentes para enganchar a sus víctimas, una fue denominada “pesca”, en la que utilizan mensajes o anuncios en redes sociales con los que contactan los internautas, que de tener alguna necesidad caen fácilmente. “Una vez que toman el anzuelo, por así decir, empieza ya esta interacción, y empieza toda una dinámica, justamente de engaño, de abuso, de confianza, y de este abuso de una situación de vulnerabilidad, algo muy importante aquí es que hay que recordar que todas y todos tenemos una necesidad, puede ser económica, afectiva, psicológica, y las y los tratantes se aprovechan de esa necesidad”
“La otra estrategia es la de caza, esta estrategia consiste en un método más activo en donde están generando perfiles falsos, en donde están identificando quién está interactuando en redes sociales, cuáles son sus intereses, sus necesidades, es decir, está mucho más estudiado, hay más análisis detrás para identificar quién podría estar más expuesto”, añadió el experto.
Cordero también se refirió a la modalidad de videojuegos en línea, que está siendo utilizada por los delincuentes para enganchar a sus víctimas, de las que las más afectadas son “sobre todo a niñas y a niños”, ya que aunque se pensaría que “los videojuegos no podrían tener un aspecto nocivo, y no es que lo tengan como tal, sino que como se juegan en este ciberespacio de manera colaborativa pues muchas veces ni siquiera sabes con quién estás jugando”, dijo.
Por lo que al momento de estar interactuando en línea no se sabe si los dos jugadores son de la misma edad, o uno de ellos puede ser un menor y el otro “un señor de 60 años, o sea, no sabemos, esto abre mucho la puerta a que, tomando en cuenta un interés en común y generando esta empatía, se empiece con esta dinámica de engaño y de enganche, estas son las principales dos modalidades que hemos identificado a través de un informe mundial que genera justamente UNODC”, reitero.
El pasado 18 de julio, en entrevista para SinEmbargo, Salvador Guerrero Chiprés, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, comentó que en los últimos años ha habido “un traslado, una mudanza, un desplazamiento de los riesgos de seguridad del mundo material hacia el mundo digital, entre esos muchos riesgos son aquellos que tiene que ver con los daños probables a la identidad de las personas, puede ser a su propiedad, puede ser a su propio estilo de vida, a su forma de percibirse, etcétera”.
Ahondó que “el Consejo Ciudadano recibe alrededor de 24 mil llamadas al mes de todo el país” de la que gran parte se relaciona con delitos cómo: pornografía infantil, fraude y extorsión, incluso secuestro digital, por lo que consideró que “hay un conglomerado de temas alrededor de la ciber seguridad, que deben de ser atendidos”.
Unos días antes, el 12 de julio, se dio a conocer que Angélica, una menor de 12 años de edad, fue contactada por un hombre a través de un juego en línea de la red social Facebook, quien acudió a su domicilio, ubicado en el municipio de Ecatepec, Estado de México, para llevársela
De acuerdo con los primeros reportes, el sujeto supuestamente le habría sacado información personal a la menor de edad, por lo que el domingo pasado acudió al domicilio donde se encontraba y se la llevó en su auto.
Un video, captado por cámaras de seguridad cercanas al inmueble, muestra cómo la menor de 12 años de edad sale de su domicilio, mientras un hombre baja de un vehículo de la marca Chevrolet tipo Beat de color blanco.
En las imágenes se observa cómo el sujeto se acerca a Angélica y después la conduce al automóvil, ella se sube y el vehículo arranca. Todo ocurrió alrededor de las 15:00 horas sobre una calle de la colonia Prizo 1.
Angélica Hernández, madre de la menor, informó que presuntamente los captores contactaron a la menor a través de un juego en línea denominado Garena Free Fire, en el cual le enviaron mensajes para persuadirla a que saliera de su domicilio y poder llevársela.
- Con Información de A Fondo