Te nombré en el silencio, que trae Ambulante de forma gratuita a través de Cinépolis Klic, es un acercamiento a la sororidad que existe entre las mujeres que conforman el colectivo Las Rastreadoras de El Fuerte de Sinaloa, sobre todo en esos días en que la ausencia pesa más, en que de pronto la mirada se nubla y parece que las esperanzas se hacen pocas.
Ciudad de México, 16 de agosto (SinEmbargo).– En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas estrena el documental Te nombré en el silencio, filme dirigido por José María Espinosa de los Monteros que muestra el trabajo realizado por el colectivo Las Rastreadoras de El Fuerte de Sinaloa.
El filme, que está disponible de forma gratuita a través de la plataforma de Cinépolis Klic, se cerca a Mirna, fundadora de Las Rastreadoras de El Fuerte que inició el grupo para dar con el paradero de su hijo. Hoy, El Fuerte es todo un equipo que sale, con sus propios medios, a buscar a sus familiares ante la ausencia de las autoridades y pese a las amenazas de grupos del crimen organizado.
El director, junto a su hermano Juan Pablo Espinosa de los Monteros, llevaban tiempo documentando de forma periodística casos de violencia en Sinaloa de donde son oriundos. Sin embargo, cuando conocieron a Mirna se dieron cuenta de todos los contrastes que acompañan las historias de las rastreadoras, y más que sólo mostrar cifras, decidieron dar un lado más humano y cercano a la gente.
«Nos pareció un caso tan extraordinario, tan magnífico, tan bello, tan esperanzador lo de las rastreadoras que le dedicamos cinco años a documentarlas», cuanta Juan Pablo Espinosa, productor del filme, en entrevista con SinEmbargo.
Por supuesto, había que mencionar que desde el inicio de la guerra contra el narco del expresidente Felipe Calderón se han registrado en México más de 80 mil desapariciones, pero acercarse a estas mujeres que conforman el colectivo, conocer sus historias y escuchar sus testimonios, era la prioridad.
«No se muestra un solo lado de ellas sino muchos matices que es lo que a esta película le da mucha energía. Es una cinta muy dinámica porque vas conociendo varias partes de su vida, no solamente el hecho de que van a buscar todos los miércoles y sábados al monte, al desierto, a sus familiares, sino también su vida cotidiana, cómo se relacionan entre ellas», recalca el productor.
Te nombré en el silencio muestra la lucha día a día de estas mujeres que salen de sus casas en la búsqueda de sus familiares ante condiciones adversas y teniendo casi todo en su contra, pero usando todas sus fuerzas para hallar algún indicio que dé con el paradero sus hijos, de sus hijas, sus esposos, sus hermanos.
El filme acompaña a las rastreadoras de El Fuerte en sus búsquedas en el desierto de Sinaloa bajo el Sol inclemente, pero también las sigue hasta la intimidad de sus casas en donde la veladoras nunca se apagan en forma de esperanza para dar con sus hijos de los que no pudieron despedirse.
«Las fechas de desaparición de sus hijos para ellas son algo que las marca. Vas viendo las particularidades que hay en el grupo y todo el amor que hay, un amor desbordado que está ahí flotando en la película por sus hijos y por sus hijas. Ese amor es el que las une y el que también les da la fuerza para salir a buscar».
El documental es también un acercamiento a la sororidad que existe entre ellas, sobre todo en esos días en que la ausencia pesa más, en que de pronto la mirada se nubla y parece que las esperanzas se hacen pocas.
«Es lo más esperanzador de contar esta historia, la fuerza que se dan entre ellas, y documentar esa relación. En verdad para nosotros fue un privilegio el haber podido documentar estos momentos tan íntimos».
Te nombré en el silencio forma parte de la campaña «Rastros y luces: historias contra la desaparición» que emprendió el festival de documentales Ambulante.
«Estamos muy agradecidos con Ambulante. […] Estamos muy emocionados por ver la reacción de la audiencia y por rescatar esa conversación sobre desaparición forzada, el tema de la crisis forense que hay en nuestro país, y también la indiferencia que tenemos como sociedad. No solamente exigirle a las autoridades, que estamos en todo el derecho de hacerlo, sino también como sociedad, hemos sido muy indiferentes ante esta emergencia».
Juan Pablo Espinosa espera que Te nombré en el silencio sea un impulso para que la desaparición forzada se tome como una emergencia nacional.
«Como señala Mirna en entrevistas y las platicas que ofrece, que esto ‘debería ser una emergencia nacional’. La cantidad de desaparecidos, la cantidad de fosas, la cantidad de colectivos y de grupos que nacen a partir de esto es un tema muy impresionante. Creo que no hay la suficiente discusión pública para que podamos avanzar a soluciones, concretar o encontrar un consensos para que esto cambie.Esta película es una herramienta también de memoria que se debe de traducir en otras cosas».
El documental, que se ha logrado gracias a esfuerzos en colectivo y recolección de financiamiento por internet, estará disponible de forma gratuita hasta de 31 de agosto.
