"Por 45 años el Congreso -con mayorías demócratas o republicanas- ha mantenido que no se debe forzar a los contribuyentes, contrariando su conciencia, a que paguen por los abortos", recordó el grupo de obispos.
Washington, 5 de marzo (EFE).- Los obispos católicos de Estados Unidos creen que el plan de estímulo del Gobierno del Presidente Joe Biden que tramita el Congreso para enfrentar la crisis por la pandemia "es un paso importante en la dirección correcta", pero pidieron este viernes que se excluyan fondos para practicar abortos.
"Nuestra nación necesita sanar, unirse y ayuda mutua", indicó en una carta el arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, quien preside la Conferencia de Obispos Católicos.
"El Plan de Socorro es un paso importante en la dirección correcta", añadió. "Este plan debería dar la asistencia muy necesaria para las familias y empresas golpeadas por la pandemia de coronavirus".
"Sin embargo nos preocupa profundamente que esta legislación, tal como está escrita, pueda crear nuevas divisiones al abandonar un compromiso bipartidista de larga data que respeta la conciencia de millones de estadounidenses", sostuvo Gómez.
El obispo recordó que "por 45 años el Congreso -con mayorías demócratas o republicanas- ha mantenido que no se debe forzar a los contribuyentes, contrariando su conciencia, a que paguen por los abortos".
Gómez se refiere a una iniciativa promovida por el representante republicano Henry Hyde, que entró en vigor en 1980 y que prohíbe el uso de fondos federales para el pago de abortos, con la excepción de situaciones en que esté en peligro la vida de la madre o cuando el embarazo resulte de incesto o violación.
La nueva ronda de estímulos económicos aprobada la semana pasada por la Cámara de Representantes no contiene protecciones al tono de la Enmienda Hyde y, de ser promulgada en ley permitiría que los proveedores de abortos, incluida la organización Planned Parenhood, reciban ayuda del gobierno federal.
En marzo de 2020 el Congreso aprobó y el entonces Presidente Donald Trump (2017-2021) promulgó un programa de alivio para encarar la pandemia de la COVID-19 que contenía préstamos para empresas pequeñas perjudicadas por la pandemia.
Entonces los legisladores republicanos se aseguraron de que los préstamos fueran a empresas con menos de 500 empleados, lo cual de hecho dejó fuera a Planned Parenthood, que tiene unos 16 mil empleados en todo el país.
De todos modos, varias afiliadas de Planned Parenthood solicitaron y recibieron préstamos por unos 80 millones de dólares, y a pesar de las averiguaciones de los legisladores republicanos, la Administración de Pequeñas Empresas no ha informado cómo fue que esas filiales recibieron préstamos.
El "abandono del compromiso" instituido en la Enmienda Hyde, "en tiempos de emergencia nacional solo sirve para dividir a la ciudadanía en el momento mismo en que deberíamos estar unidos", escribió Gómez.