El duo malagueño Les Castizos admitió, en un video difundido en redes sociales, que su actitud en un escenario fue un acto pésimo; esto luego de que se difundieran imágenes en las que se muestra un evento social que incumple las medidas sanitarias para la prevención de la COVID-19.
Por Raúl Sánchez
Madrid, España, 3 de agosto (ElDiario.es).- "A veces uno no piensa lo que hace en un momento de diversión y comete un error imperdonable. No hay excusas, sólo queda arrepentirse y pedir perdón de forma sincera". El dúo malagueño de DJ Les Castizos ha difundido un video en redes sociales para disculparse públicamente tras la ola de indignación que han provocado las imágenes de su actuación en una discoteca de Torremolinos (Málaga), difundida en redes este fin de semana.
En el polémico video, que está investigando la policía autonómica de la Junta de Andalucía en coordinación con la policía local de Torremolinos, aparece uno de los componentes de Les Castizos escupiendo alcohol al público desde un escenario, luego bebe de la botella y la comparte con algunos clientes que bailan a su alrededor, sin mascarillas y sin respetar la distancia de seguridad. El Gobierno andaluz ha observado en el video "comportamientos que incumplen toda medida de protección y seguridad ante el coronavirus".
Aquí está uno de los DJ de Les Castizos del vídeo viral que subimos ayer escupiendo bebidas en una fiesta en el paseo Marítimo de #Torremolinos pic.twitter.com/V44Lj5OXFg
— TrifachitoAndaluz (@AndaluciaSinVOX) August 2, 2020
El DJ que aparece en estas controvertidas imágenes es quien ahora protagoniza el video de disculpas en nombre de su grupo. "Ha sido un acto pésimo, el cual no se debe hacer, que daña al sector del ocio nocturno y a mis compañeros DJ, por eso estoy doblemente arrepentido. Pero no hay error sin consecuencias. Acataré la sanción que me impongan y quiero aportar mi granito de arena a la lucha contra la COVID-19, ayudando a alguna asociación en alguna labor para parar la pandemia, no es un canto al sol, pronto veréis dónde estoy ayudando. Mi más sincero lo siento", dice. Fali Sotomayor, miembro de Les Castizos, quien ya había emitido un comunicado anterior admitiendo que se sentían "avergonzados y arrepentidos".
Después de aclarar que las imágenes no son recientes sino cuando las medidas de seguridad "no eran las actuales", exime a la discoteca de Torremolinos donde se produjeron los hechos, Kokun Ocean Club, "que no es responsable en absoluto de nuestros actos, respetando a rajatabla todas las medidas impuestas por los organismos competentes.
Discoteca: Kokun (Torremolinos, Málaga)
Artistas: Les CastizosGente sin mascarillas, sin ningún tipo de distancia de seguridad, uno de los dos artistas escupiendo alcohol a la gente y dándoles de beber de la misma botella. #AsíNo #QueSeSepa
Vídeo: alelitooo pic.twitter.com/Xai5U0HYCv
— ES.DECIR (@esdecirdiario) August 1, 2020
"Su local, caracterizado por su buen hacer, es un referente a nivel nacional desde hace muchos años y no queremos que esa imagen se vea deteriorada lo más mínimo", indica el comunicado al que ha tenido acceso Europa Press. Así, Sotomayor pide disculpas públicamente por los hechos acontecidos y asegura que el video es un "momento puntual de un show en el que desgraciadamente se actúa de manera irresponsable".
Las imágenes del video no se tomaron esta semana, según ha explicado el DJ que aparece en él, pero los hechos sí se produjeron recientemente, y con las normas de seguridad contra la COVID-19 en vigor. El Gobierno andaluz aprobó hace un mes medidas para restringir el ocio nocturno, como prohibir el baile (cerrar la zona habilitada para este uso en las discotecas), limitar el aforo al 40 por ciento y obligar el uso de la mascarilla en el interior excepto cuando se está consumiendo. En el video se incumplen todas estas normas.
Esta misma semana, la Junta volvió a endurecer aún más estas medidas, obligando a las discotecas a hacer registro de clientes y hacer reservas de asistencia para garantizar la limitación del aforo. El incumplimiento de estas medidas comporta sanciones económicas tanto para aquellos que aparecen en el video como para el dueño de la discoteca, que se arriesga a ver cerrado su local.