La agencia calificadora estadounidense Moody's consideró que la renuncia de Carlos Urzúa "pone en evidencia disputas de fondo dentro de la administración en torno al proceso de toma de decisiones en materia de política económica". Aunque también celebró la llegada de Arturo Herrera en la Secretaría de Hacienda.
Ciudad de México, 9 de julio (EconomíaHoy).–El nombramiento de Arturo Herrera como Secretario de Hacienda tras la sorpresiva renuncia de Carlos Urzúa es bien vista por la agencia calificadora estadounidense Moody's.
La llegada de Herrera "mitiga las preocupaciones inmediatas que pudieran haber surgido, limitando su impacto en los mercados financieros", dijo el analista soberano de Moody's, Jaime Reusche.
La calificadora cambió el pasado 5 de junio la perspectiva crediticia de México, que se mantiene con nota A3, argumentando que las políticas económicas del actual gobierno son poco predecibles y que la economía ha crecido poco, acompañada del lastre que significa Pemex para las finanzas públicas.
Sobre la renuncia de Urzúa al timón de las finanzas públicas del país, Reusche comentó que "pone en evidencia disputas de fondo dentro de la administración en torno al proceso de toma de decisiones en materia de política económica".
En su carta de renuncia, Urzúa dijo que existían discrepancias en materia económica que se deben a que "en esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento", y añadió que sus convicciones no encontraron eco durante su gestión.
Además, el ahora exsecretario remató diciendo que le parecía "inaceptable" la imposición de funcionarios "que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública" cuestión que fue motivada por "personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés".
El economista puntualiza que no está claro que los factores señalados como motivo de renuncia vayan a desaparecer en el corto o mediano plazo, por lo que "Moody's espera que prevalezca la incertidumbre entre los inversionistas en torno a la gestión económica del gobierno.
Lo anterior va en línea con lo señalado por la agencia calificadora al haber tomado la decisión de asignar una perspectiva negativa a la calificación de México".