Justine Dupuy, coordinadora del programa Rendición de Cuentas y Combate a la Corrupción en @FundarMexico
“Corral miente”, “Corral, mal Gobernador y peor golfista”, “Corral tiene cabaña en área protegida”…. En las últimas semanas, las notas muy críticas que el periódico El Universal ha difundido en contra del Gobernador de Chihuahua no pasaron desapercibidas. El 11 de abril la plataforma almargen.mx listó 13 portadas en 20 días “para golpear sin sustento al Gobernador de Chihuahua”.[1]
Este duelo entre el Gobernador y el periódico no se puede entender por completo si no se lee a través del prisma de los gastos en publicidad oficial que realizan los gobiernos en México. Las prácticas en torno a la publicidad oficial en el país ponen en riesgo el ejercicio profesional del periodismo, merman la libertad de expresión y desfiguran el debate público. En razón de estas prácticas, algunos temas son acallados en la esfera pública u otros ampliados con base a criterios poco periodísticos.
Fundar ha documentado que, cada año, el gobierno federal y las entidades federativas gastan en promedio 15 mil millones de pesos para comprar espacios en los medios de comunicación y difundir anuncios institucionales. A nivel federal, en los tres primeros años del gobierno de Peña Nieto, se gastaron 25.5 mil millones de pesos en Publicidad Oficial.
Y El Universal no escapa a esta tradición. A nivel federal, en lo que va de este sexenio, es uno de los pocos periódicos que siempre se ubica en el top ten de los más de miles de proveedores que reciben contratos de Publicidad oficial según el análisis de los datos del ComSoc[2]. En 2015, el diario ocupa la cuarta posición de 1251 proveedores- después de Televisa, TvAzteca y Excélsior- con un gasto de más de 310 millones de pesos en publicidad oficial. En el estado de Chihuahua, El Universal recibió de 2011 a 2015, más de 23.2 millones en contratos de publicidad oficial. A partir del 2016 y hasta la fecha, el periódico dejó de recibir contratos.
Y ahí está la pregunta: ¿Qué tanto influyen estos contratos en la cobertura mediática de los medios de comunicación? Si bien la compra de espacios publicitarios en los medios de comunicación por parte de los gobiernos es una práctica totalmente legal, la manera en la que se gastan estos recursos continua siendo muy cuestionable.
A pesar de los avances en materia de transparencia del gasto en publicidad oficial, en general, prevalece la opacidad y la discrecionalidad en la asignación de los contratos, los sobre ejercicios recurrentes en los gastos, una rendición de cuentas muy frágil, una débil fiscalización así como una carencia normativa que regule estas prácticas.
Estos elementos crean un terreno favorable para que la publicidad oficial sea utilizada no para fortalecer a los medios de comunicación sino para acallarlos y/o controlar su línea editorial; por lo que se transforma en una herramienta para que los gobiernos manipulen a los medios de comunicación y viceversa.
Javier Corral es el primer Gobernador en instaurar un mecanismo de transparencia y rendición de cuentas sobre sus gastos al aceptar el reto #PublicidadAbierta en el que se comprometió a implementar la plataforma Transparencia en Publicidad Oficial que Fundar y el INAI lanzamos en noviembre del año pasado.[3] En Chihuahua, la transparencia en este rubro resulta ser un cambio de paradigma. Durante el gobierno de César Duarte, Fundar solicitó varias veces el desglose del gasto en publicidad oficial pero nunca pudimos obtener esta información porque ésta se reservó.
Además de comprometerse a transparentar sus propios gastos, el Gobernador Javier Corral, al entrar en funciones, publicó por primera vez el desglose de todos los gastos en publicidad oficial de su predecesor, revelando gastos millonarios a medios de comunicación durante el sexenio de Duarte.[4] Al mismo tiempo, el nuevo Gobernador tomó la decisión de limitarlos y reducirlos. Este año, se presupuestaron 180 millones para publicidad oficial.
Vale la pena volver a mencionar que el cuestionamiento entorno a la publicidad oficial no reside solo en la transparencia y los montos gastados. Si bien acceder a esta información es un paso muy positivo, no es suficiente. El meollo de la problemática se encuentra en la manera en que se asignan estos montos a los medios de comunicación. La transformación de la relación entre medios y gobiernos en México no será completa sin la regulación de la asignación de la publicidad oficial y una reflexión profunda sobre el rol del Estado para apoyar a los medios de comunicación y promover la pluralidad y la libertad de expresión.
[1] “El Universal contra Javier Corral: 20 días de golpeteos tras la suspensión de convenios de publicidad”. Consultar en http://almargen.mx/el-universal-contra-javier-corral-20-dias-de-golpeteo-tras-la-suspension-de-convenios-de-publicidad/
[2] [2] Informe ‘Libertad de expresión en venta’. Consultar en: http://fundar.org.mx/libertad-de-expresion-en-venta/?ID=
[3] Plataforma transparencia en publicidad oficial del gobierno de Chihuahua http://www.amanecechihuahua.gob.mx/transparencia_tpo/tpov1/Sys_Hub?v=Inicio&g=pages
[4] Para acceder a la información de los montos gastados por César Duarte, http://www.amanecechihuahua.gob.mx/spip.php?page=publicidad-2010-2016