La periodista Miroslava Breach habría estado vigilada por al menos tres personas el día en que fue asesinada y uno de ellos habría sería el actor intelectual, de acuerdo con información que la Fiscalía de Chihuahua dio a medios. La Jornada, medio en donde colaboraba la periodista, detalló que uno hizo las veces de halcón, otro fue el conductor del vehículo en el que se escaparon y la tercera persona le habría disparado. Este día, el Gobernador Javier Corral dijo que cuentan con una serie de evidencias obtenidas a través de cateos que permitirían en las próximas horas identificar de manera precisa a los responsables.
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Ciudad de México, 27 de marzo (SinEmbargo).– Al menos tres sujetos vigilaban a la periodista Miroslava Breach el día de su asesinato, uno hizo las veces de halcón, otro fue el conductor del vehículo en el que se escaparon y la tercera persona le habría disparado, de acuerdo con información que la Fiscalía de Chihuahua dio a medios.
La Jornada, diario en el cual la comunicadora era corresponsal, detalló: “Uno de ellos vigilaba desde la esquina de avenida Río Aros y la calle José María Mata. Estaba atento a que ella saliera de su casa. A las 6:54 de la mañana alertó a los otros, quienes viajaban en un Malibú de color gris. Es el momento. Iban a ejecutarla y uno de ellos descendió del vehículo para ultimar a nuestra corresponsal”.
Este día, el Gobernador Javier Corral dijo que cuentan con “una serie de evidencias obtenidas a través de cateos que permitirían en las próximas horas identificar de manera precisa a los responsables del asesinato de la periodista”, según cita El Diario.
Indicó que la manera en la que mataron a Breach fue “por medio de la contratación de un gatillero profesional, ordenada por capos del crimen organizado en el estado”.
Aseguró que las indagatorias del homicidio fortalecen la tesis de que la comunicadora “fue asesinada por publicaciones sobre delincuencia organizada en torno la imposición de candidaturas del PRI en 2016”.
César Peniche, Fiscal General de Chihuahua, confirmó esta mañana que no se descarta la participación de una tercera persona involucrada en el homicidio de Miroslava, pero precisó que sería el autor intelectual.
“Nosotros consideramos que puede haber un auto intelectual, más estos dos que hemos identificado”, explicó en una entrevista con Grupo Fórmula.
Imágenes incluidas en las investigaciones que realizan de forma paralela la Procuraduría General de la República (PGR) y la Fiscalía General de Justicia, permiten reconstruir las acciones de los homicidas de Miroslava Breach.
La Jornada destacó que a las 6:35 de la mañana del pasado jueves una cámara de vigilancia grabó un automóvil Malibú de color gris desplazándose sobre la avenida Río Aros en la ciudad de Chihuahua. “Un hombre con lentes oscuros y camisa de color claro, de manga larga, conducía el vehículo con el vidrio abajo. Su mirada detecta que la cámara de vigilancia lo está grabando”, detalló.
Diez minutos después (6:45), añadió el diario de circulación nacional, el mismo Malibú, pero ya con los vidrios polarizados arriba, pasaba frente a la vivienda de Miroslava Breach. Iba de norte a sur.
A las 6:54 de esa mañana el sujeto alertó a los otros, quienes viajaban en un Malibú de color gris, que era el momento. Iban a ejecutarla y uno de ellos descendió del vehículo para ultimar a la periodista.
De acuerdo con La Jornada, Miroslava recibió amenazas desde hace tiempo. Los mensajes llegaban a su celular y comentó el contenido con un alto funcionario del Gobierno de Chihuahua. No presentó ninguna denuncia formal. Tampoco aceptó ‘‘bajarle’’ a su trabajo y siguió denunciando actos de corrupción de la anterior administración, así como vínculos entre políticos y narcotraficantes de la entidad.
Miroslava puso al descubierto la vinculación que algunos candidatos de los comicios de 2016 tenían con el narcotráfico, entre ellos, la suegra de Carlos Arturo Quintana, El 80, integrante de La Línea, el brazo armado del cártel de Juárez.
Durante el Gobierno de César Duarte la periodista reveló que el mandatario local, sus familiares y algunos de sus colaboradores realizaron desvíos de recursos públicos y el dinero fue depositado en el Banco Unión Progreso, propiedad del ahora ex mandatario.
El caso fue denunciado por la organización Unión Ciudadana ante la PGR y el ex Secretario de Hacienda de esta entidad, Jaime Herrera Corral, solicitó protección de la justicia federal, pero el caso sigue abierto y también se investiga a César Duarte.
