San Cristóbal de Las Casas, Chis., 31 Oct. (Notimex).- El obispo Felipe Arizmendi rechazó que las reformas al artículo 24 constitucional, aprobadas por el Congreso de la Unión, “destrocen el laicismo” en el Estado mexicano, como lo han afirmado algunos asesores de partidos políticos.
“Invito a analizar sin atavismos históricos y sin temores los términos de la nueva ley, que no viola ni destroza la laicidad del Estado, pues éste no se compromete a imponer una religión para todos, y se mantiene su sana separación con la Iglesia”, subrayó en su artículo de media semana.
También rechazó que la reforma pretenda introducir la educación religiosa en las escuelas públicas, “aunque es un derecho de los padres, si ellos lo decidieran, como consta en legislaciones de países más democráticos, como los de Europa, en particular de Alemania. Ni siquiera se menciona esa posibilidad”.
Aclaró que tampoco beneficia únicamente a la Iglesia católica, sino a todas las actitudes confesionales, pues cada quien es libre de tener o no una religión y en este sentido todas las confesiones religiosas se verían beneficiadas positivamente con las reformas.
Agregó que el texto de la iniciativa aprobada “no cambia la prohibición existente para que las asociaciones religiosas puedan adquirir canales de televisión o estaciones de radio, aunque con esto se coarta la profesión pública de la fe”.
El jerarca católico llamó a los legisladores estatales a que analicen bien los textos y ver que no se pretende establecer imposiciones, “en otras palabras, no intenta imponer nuestra religión a todos los ciudadanos, y mucho menos al Estado. Su sana laicidad es una garantía de libertad para todos”.
