México, 31 Oct. (Notimex).- Ante el avance de la utilización del teléfono celular como un medio de bancarización, es indispensable desarrollar una normatividad que dé seguridad y garantice la transparencia en beneficio de los bancos, telefónicas y clientes, consideró Colade.
Durante el XXXI Congreso Latinoamericano de Derecho Bancario (Colade), se refirió que hoy en día la importancia de la utilización de la telefonía móvil o celular es evidente, una realidad que permitirá la bancarización de la población, mediante instrumentos que están al alcance en los amplios sectores de la sociedad.
En este campo, el desarrollo jurídico se está iniciando y los retos se basan en una adecuada y suficiente normativa que busque la seguridad y transparencia de las actividades de las partes involucradas, se comentó de acuerdo con la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban) en dicho foro.
En un comunicado, la Felaban informó que derivado de ello durante dicho Congreso se analizó la relevancia de la contratación electrónica en la región y en el mundo bancario.
Asimismo, señala, se estudiaron los conceptos de firma digital, de los elementos que influyen sobre la validez de la contratación por medio de documentos electrónicos, a la vez que la doctrina jurídica sobre el tema en la Comunidad Europea, en Estados Unidos, en la región y a nivel de las Naciones Unidas.
También se tocó el tema de las redes sociales, como Facebook, Twitter, y los medios como Nube Digital, toda vez que están avanzando de manera significativa en el campo bancario, lo que ha implicando la participación decisiva de las instituciones.
De ahí, subraya, que cobra importancia la asesoría jurídica para dar las bases claras a una interrelación entre las entidades y los proveedores, al igual que con la clientela y las autoridades.
Se trataron también los Delitos Informáticos, con énfasis en los ataques cibernéticos y la conducta de concientización que se requiere para superar con éxito la ocurrencia de los hechos ilícitos.
La Felaban agrupa, a través de sus respectivas asociaciones en 19 países del continente, a más de 500 bancos y entidades financieras de América Latina, como Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
