Las intervenciones artísticas son participativas, involucrando y vinculando a la comunidad, para que las propuestas sean a partir de necesidades comunitarias reales.
Ciudad de México, 30 de agosto (SinEmbargo).- Con “Cultura Viva Comunitaria” de la Alcaldía Gustavo A. Madero, 300 artistas maderenses son becarios dedicados a impartir talleres formativos en las diferentes disciplinas artísticas en las 29 casas de cultura con las que cuenta la Alcaldía, mismas que han sido recuperadas y rehabilitadas para el servicio a la comunidad.
Gustavo A. Madero es la primera Alcaldía en formar sus propios elencos artísticos con el objetivo de crear las condiciones propicias para que la comunidad tenga acceso al ejercicio de sus derechos a la cultura y la recreación. Estos elencos están conformados por una Big Band, una Orquesta Filarmónica (OFGAM), Ballet Folclórico, Ensamble Latino, y recientemente un proyecto de música infantil que lleva por nombre ¨Los Maderitos¨, con el cual, a través de la música se contará la historia de la Alcaldía, reforzando la identidad y el arraigo en la población infantil.
Con los elencos citados se realizan conciertos gratuitos en todas la colonias de la demarcación, principalmente en plazas públicas, quioscos, parques y mercados, para el gozo de todos los habitantes que han disfrutado de más de 500 conciertos gratuitos, en los que tienen acceso a música de calidad de manera gratuita.
Una de las mayores apuestas se ve reflejada en el Centro Cultural Futurama, que se ha convertido en el referente más importante de la zona norte de la Ciudad de México, mismo que ha recuperado la identidad cinematográfica de la colonia Lindavista, teniendo entre su oferta el Festival Internacional de Cine de la Alcaldía Gustavo A. Madero que en su edición 2020 tuvo como padrino al actor Adal Ramones.
El Futurama cuenta con su propia Escuela de Cine gratuita, una librería del Fondo de Cultura Económica, Proyecciones de cine de entrada libre, más de 30 talleres gratuitos y es sede de la Big Band, OFGAM, Ballet Folclórico y Ensamble Latino.
Las intervenciones artísticas son participativas, involucrando y vinculando a la comunidad, para que las propuestas sean a partir de necesidades comunitarias reales.
Un ejemplo de esto han sido los murales realizados en la colonia Lindavista “Por una infancia sin desnutrición” del artista Rich Arnauda, quien junto con 200 personas residentes de diferentes colonias, crearon un mural con la técnica Trencadis, y el mural Tonantzin-Coacuitlicue: Lo conocido, lo desconocido y lo que no se puede conocer, del Artista Paco Cruz, recientemente realizado en el Centro Cultural Futurama por alumnas del taller de artes plásticas que se llevó a cabo de manera virtual durante el semáforo rojo de la pandemia.
