¿Conoces a las luciérnagas?

30/04/2013 - 12:02 am
Imagen tomada de la red.
Imagen tomada de la red.

Recientemente participé en un tianguis de ciencia en la Universidad Michoacana. El motivo del evento era la celebración del agua por lo que en esta ocasión ayudada por los estudiantes de mi laboratorio decidimos poner un stand sobre insectos relacionados con la salud de los ríos y de los ecosistemas acuáticos. Los personajes fueron las luciérnagas y las libélulas.

Estos dos grupos de insectos dependen en su fase larvaria de agua limpia, por lo que son buenos indicadores de las condiciones de los ecosistemas acuáticos: si están presentes quiere decir que tenemos agua limpia en las cercanías. La explicación sobre estos bichos comenzaba con la pregunta ¿Conoces a las luciérnagas?, ante la cuál casi todos los participantes contestaban afirmativamente. Pero cuando continuábamos con la indagación para involucrar al visitante con nuestra presentación, verificábamos que la mayoría de los niños nunca habían conocido una luciérnaga en la vida real, solamente en las caricaturas… ¡Qué tristeza! Entonces les mostramos fotos de las luciérnagas y libélulas en todos sus estadios, les platicamos a detalle del ciclo de vida de estos y la importancia de cuidar los ríos, haciendo hincapié en que conservar los ríos y cuerpos de agua naturales no solamente es importante para tener agua limpia para tomar, sino para que estos bichos puedan seguir existiendo. Cuando el visitante era un adulto, sin excepción hablaba de cómo al reflexionar sobre estos insectos, caía en cuenta de que hacía mucho tiempo que no veía luciérnagas y se impactaba de que sus hijos no las conocieran.

Aunado a que la contaminación en los ríos afecta la sobrevivencia de las luciérnagas, el uso excesivo de insecticidas en campos agrícolas y jardines destinados a combatir las plagas pero que acaban con todos los insectos por igual, y la urbanización, están diezmando las poblaciones de éstas en todo el mundo. La cantidad e intensidad de focos que implican los desarrollos urbanos impactan a las luciérnagas puesto que para comunicarse y encontrar pareja necesitan prender su “foco” y ser vistas. Es como gritar que buscas pareja en medio de un concierto de rock, probablemente nadie te haga caso y te quedes sin pareja, y en el caso de las luciérnagas esto implica quedarse sin descendencia puesto que por mas que prenden su foco de alerta no hay respuesta de compañía.

El foco de las luciérnagas es una de las grandes maravillas del mundo natural. Para prender su abdomen utilizan la biolumniscencia, esto es la capacidad de producir luz que tienen algunos seres vivos por medio de reacciones químicas. Para ello, el abdomen de las luciérnagas contiene altas concentraciones de la molécula luciferina que con ayuda de la enzima luciferasa al contacto con el oxígeno emite luz, de tal manera que las luciérnagas pueden prender su foco a voluntad inyectando oxígeno a su abdomen. La biolumniscencia de las luciérnagas puede ser en varios tonos, depende de la especie, hay algunas verdes, azules o incluso rojizas y también tienen diferentes patrones de producción de luz dependiendo de la especie, tienen códigos de reconocimiento tipo clave morse.

Las luciérnagas son escarabajos de la familia Lampyridae, al igual que todos los escarabajos tienen un par de alas rígidas (denominadas élitros) y otro par de alas flexibles con el que vuelan que cuando están en reposo está plegado debajo de los élitros. A pesar de vivir por todo el mundo, tienen preferencias por las zonas tropicales, se conocen alrededor de dos mil especies a nivel mundial. Durante las distintas fases de su ciclo de vida, las luciérnagas son bioluminiscentes. No hay muchos estudios detallados al respecto, pero se conocen huevos luminiscentes, larvas luminiscentes, pupas luminiscentes y los adultos que vemos volando que también son luminiscentes. Las luciérnagas son depredadoras, se alimentan de otros insectos y de caracoles, por lo que también ayudan a controlar plagas.

El fenómeno de disminución de las luciérnagas es mundial, dado que todo el planeta está sufriendo las mismas presiones antropogénicas, las luciérnagas se van quedando sin casa y gracias a  la iluminación citadina, las que sobreviven sufren por no encontrar pareja. En algunos lugares de Asia como Corea y Japón en donde las luciérnagas han sido culturalmente importantes, se están tomando acciones significativas para mejorar el hábitat de estos escarabajos e incluso se ha constituido el Día de la Luciérnaga en el mes de junio para concientizar sobre la importancia de la conservación de los hábitats acuáticos.

Ya lo había propuesto en otro artículo, pero después de mi experiencia del fin de semana pasado, considero aún mas importante que en México hagamos algo semejante para que los niños no conozcan a estos bellos insectos únicamente en las caricaturas televisivas sino que tengan la experiencia de conocerlos con sus propios ojos. Había escuchado de algunas experiencias locales, y buscando en Internet encontré algunos indicios de que en Tlaxcala están promoviendo acciones para recuperar a las luciérnagas, en Nanacamilpa anuncian el “Santuario de las luciérnagas”, ojalá sea una experiencia exitosa y que siguiéramos su ejemplo en todo el país.

Con la transformación de la naturaleza y la urbanización nos estamos quedando sin vida, sin embargo existen alternativas diferentes, podemos aspirar a ciudades más sustentables en donde convivamos con la biodiversidad. Si tomamos acciones sencillas dejando sitios verdes con agua limpia donde los animales y plantas puedan cumplir sus ciclos vitales las maravillas naturales como las luciérnagas podrían coexistir con los humanos.

Ek del Val de Gortari
Soy bióloga egresada de la UNAM y después realicé un doctorado en ecología en el Imperial College del Reino Unido. Actualmente trabajo en el Centro de Investigaciones en Ecosistemas de la UNAM en Morelia y coordino la Licenciatura en Ciencias Ambientales de la ENES-Morelia también de la UNAM. Dedico mis días a tratar de entender cómo funcionan las interacciones entre las plantas y los herbívoros que se las comen. Me gusta trabajar en las selva y también estoy interesada en entender como se modifican las interacciones entre especies cuando hay alteraciones en los ecosistemas, por lo que estoy trabajando en campos agrícolas y en ambientes restaurados. Considero que la visión que la ciencia aporta a la vida cotidiana es muy importante, por eso me gusta escribir textos de divulgación científica y procurar que un mayor número de gente conozca las maravillas que hemos aprendido y descubierto. En particular escribo sobre bichos porque son seres considerados abominables en el inconciente colectivo, que cuando nos detenemos un poco a observar y entender mejor, se vuelven maravillosos.
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