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9 cosas que aprendimos del sueño durante 2014

29/12/2014 - 12:00 am

Ciudad de México, 29 de diciembre (SinEmbargo/HuffPost).- A pesar de que dormir es esencial para la sobreviviencia, sorpresivamente los investigadores saben pocas cosas seguras sobre ello. Aún quedan muchas preguntas por resolver como por qué dormimos, cuántos horas de sueño necesitamos y qué son realmente los sueños, pero este año se dieron varios descubrimientos que aproximan más a  la comprensión sobre esta función natural.

Aquí están algunos de los mayores avances del sueño realizados en el 2014, y el porqué son tan importantes.

El cerebro toma decisiones mientras dormimos

Puede que tú ya te hayas desconectado, pero el cerebro no. mientras dormimos, nuestros cerebros aún están activos, no sólo procesando la información y eliminando el desorden, si no hasta tomando decisiones.

Un equipo de investigadores de Francia y el Reino Unido monitoreó el cerebro de un pequeño grupo de adultos mientras hacían un ejercicio de clasificación de palabras y encontraron los mismos patrones de actividad cerebral mientras dormían. “Lejos de caer en el limbo cuando dormimos, partes de nuestro cerebro pueden procesar rutinariamente lo que está pasando a nuestro alrededor, y aplicar un esquema relevante de respuesta”, dijo el investigador y autor del estudio Sid Kouider.

“Esto explica algunas experiencias diarias tales como la sensibilidad a escuchar nuestro nombre mientras estamos dormidos o a un específico sonido de alarma, comparado con otros sonidos más fuertes pero menos relevantes”.

Escatimar en el sueño se relaciona con la disminución del cerebro

El cerebro se va haciendo más pequeño conforme envejecemos, pero dormir muy poco puede hacer que esa reducción natural ocurra más rápido, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Oxford.

“Muchos factores se han vinculado previamente con la velocidad en la que se reduce el volumen del cerebro a través del paso del tiempo, incluida la actividad física, presión arterial, y niveles de colesterol. Nuestro estudio indica que el sueño es factor importante también”, dijo la investigadora principal, Claire Sexton, al Huff.

El estudio encontró una disminución más rápida en el tamaño de las áreas frontal, parietal y temporal del cerebro en las personas que reportaron mala calidad en su sueño. Estas partes del cerebro juegan roles importantes en la toma de decisiones, combinar palabras en pensamientos completos y el aprendizaje.

El cerebro de los insomnes son diferentes de los buenos durmientes

Foto: Shutterstock
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Mientras que los investigadores aún no están del todo seguros de lo que estas diferencias significan, descubrieron mayor actividad, mejor adaptibilidad al cambio, y mayor “excitación” neuronal en el centro de movimiento del cerebro de las personas con insomnio, que en quienes no reportaron algún problema para dormir.

Los expertos dijeron que esperan que la identificación de esas diferencias sirva para eventualmente hacer mejores diagnósticos y tratamiento del insomnio.

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Dormir muy poco puede causar -y acelerar la- demencia

Ya es sabido que llevar un sueño adecuado promueve el mejoramiento de la memoria y el aprendizaje, pero una serie de estudios realizados este año muestran que dormir poco o mal, puede contribuir a un mayor riesgo de demencia, o acelerar los síntomas de la enfermedad.

En todos los casos, los investigadores enfatizaron que lo mejor que se puede hacer es asegurar noches de descanso para los ancianos al practicar buenos hábitos para dormir.

La privación del sueño hace recordar cosas que no pasaron

En un estudio de la Universidad de California, científicos encontraron que después de una noche de sueño “restringido”, los participantes estaban más propensos a decir que recordaban algo que no había pasado, un fenómeno llamado generalmente creación de memorias falsas.

No es del todo problemático tener un resbalo, “pero hay contextos (ser testigo en la corte, médicos tomando decisiones) en donde los errores pueden traer consecuencias serias, por lo que necesitamos estar conscientes de los factores que hacen a la memoria menos confiable y vulnerable a la distorsión”, dijo Steve Frenda, líder de la investigación.

Mientras que es imposible estimar el número de condenas erróneas que puedan estar directamente causadas por la falta de sueño, es muy posible que algo pase ahí, pero, dice Frenda, dejar ir a dormir a su casa a un testigo antes de decalrar trae otros problemas. “Entre más tiempo pase, los recuerdos se desvanecen y se vuelven más vulnerables a la distorsión. Así, mientras intentas atacar un factor de riesgo, puedes estar introduciendo otros”,

El apoyo de la familia es la clave para tratar la apnea del sueño

Una familia solidaria parece jugar un rol en si una persona se adhiere al tratamiento de la apnea obstructiva del sueño, con presión positiva continua o CPAP, generalmente considerada el estándar de oro para el tratamiento del desorden de sueño, que causa que se deje de respirar mientras se está durmiendo, a veces hasta cientos de veces en una noche.

Las personas que están casadas o viven en pareja, así como las personas que calificaron su calidad de relación familiar más alta, encontraron también mayor adhesión al tratamiento CPAP.

Compartir la cama con una mascota afecta el sueño

Una investigación presentada en SLEEP 2014, la reunión anual de la Asociación de Sociedades Profesionales del Sueño, encontró que el 30 por ciento de los dueños de alguna mascota que comparten la cama con su amigo de cuatro patas, despiertan por lo menos una vez en la noche, por culpa de sus animales.

Fuera de los abrazos que se les pueda dar, una mascota también provee de muchos maullidos, ladridos y movimientos de cola que contribuyen a interrupciones en el sueño.

Científicos descubrieron cambios físicos en los cerebros de personas con síndrome de fatiga crónica

La condición está muy malentendida y con frecuencia descartado como psicológica, pero investigaciones de este año le dieron mayor credibilidad a este síndrome.

Un pequeño estudio comparó los cerebros de 15 personas con síndrome de fatiga crónica (SFC) con los de 14 sujetos sano, y encontró que los cerebros de quienes reportaron SFC tenían menos materia blanca y diferencia en las fibras nerviosas de un particular tracto de esta materia.

“En teoría, una señal de un cerebro mejor conectado”, reportó Pacific Standard, lo cual era más fuerte en la gente que tenía síntomas más severos. La investigación podría proveer mejores diagnósticos de este síndrome.

Los búhos nocturnos podrían estar menos motivados para ejercitarse que los madrugadores

Los madrugadores verdaderamente pueden saltar fuera de la cama y llegar a la pista para correr: Un pequeño estudio de este año encontró que las aves nocturnas tienen más complicado adherirse a una rutina de ejercicio.

En la investigación, las personas que reportaron dormir más tarde también dijo estar más tiempo sentado, así como también percibieron mayores obstáculos para hacer ejercicio regularmente.

“Encontramos que aun en individuos activos y sanos, el tiempo que dormían y la preferencia circadiana se relacionaron a los patrones de actividad y actitudes hacia la actividad física”, dijo Kelly Glazer Baron, autora principal del estudio.

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