Después de que grupos ultraconservadores católicos y obispos franceses condenaron la ceremonia de apertura, la portavoz de París 2024, Anne Descamps, afirmó: “Está claro que nunca hubo intención de faltarle el respeto a ningún grupo religioso”.
Ciudad de México, 29 de julio (SinEmbargo).- Los organizadores de los Juegos Olímpicos de París afirmaron el domingo estar “realmente arrepentidos” por cualquier ofensa que pudieran causar con la ceremonia de apertura del viernes, pero desmintieron la supuesta burla al cuadro de Leonardo da Vinci “La última cena”. Además, negaron “cualquier intención de mostrar falta de respeto a cualquier grupo religioso“.
En realidad, la polémica escena de la ceremonia, señalada por grupos conservadores como ofensiva, mostró una representación de una festividad dedicada a los dioses del Olimpo, en el que un grupo de integrantes de la comunidad LGBTI+ y drag queens de la escena local de París, como “Nicky Doll”, “Paloma” o “Piche”, o de la escena ballroom, como la bailarina Keiona Revlón, se congregaron en torno a una mesa, lo que provocó la comparación con la obra de Da Vinci y la confusión de los espectadores.
“La idea era hacer una gran fiesta pagana vinculada a los dioses del Olimpo” aclaró al canal BFM Thomas Jolly, el director de teatro encargado de la coreografía el desfile del viernes.
Los grupos ultraconservadores católicos y obispos franceses, sin embargo, condenaron la ceremonia de apertura. La portavoz de París 2024, Anne Descamps, también declaró: “Está claro que nunca hubo intención de faltarle el respeto a ningún grupo religioso”. Descamps dijo que París 2024 había encargado una encuesta que mostró que los franceses tenían una opinión abrumadoramente positiva sobre la ceremonia de apertura.
The interpretation of the Greek God Dionysus makes us aware of the absurdity of violence between human beings. #Paris2024 #OpeningCeremony pic.twitter.com/FBlQNNUmvV
— The Olympic Games (@Olympics) July 26, 2024
Otra parte de la ceremonia de apertura, con música de la DJ francesa Barbara Butch, también mostró a varias modelos, entre ellas la mujer trans Raya Martigny, desfilar con trajes diseñados por talentos emergentes para representar a París como la capital de la alta costura, lo que de igual manera generó críticas de sectores de derecha.
El desfile incluso provocó declaraciones oficiales de Rusia, país excluido de participar en los Juegos Olímpicos. La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maria Zajárova, expresó que la participación de personas de la diversidad sexual fue una “burla de una historia sagrada para los cristianos” con “apóstoles representados por travestis”, criticó.
A finales de 2023, una sentencia de la Suprema Corte de Justicia de Rusia calificó de “extremista” al “movimiento público internacional LGBT” y en la práctica prohibió toda actividad pública relacionada con el colectivo LGBTI+, una decisión condenada a nivel internacional por organizaciones de derechos humanos.
De acuerdo a la organización Outsports, 191 los atletas que participan en los Juegos Olímpicos de París con públicamente parte de la Comunidad LGBTI+. “Los Juegos de París de 2024 marcan un aumento significativo en la representación LGBTI+, lo que pone de relieve el progreso hacia la inclusión y la aceptación en el mundo del deporte”, declaró Outsports.
