Hugo López-Gatell, Subsecretario de Salud mexicano, dijo ante miembros del Senado que la efectividad de las pruebas rápidas es bajísima.
Ciudad de México, 27 de mayo (SinEmbargo).– Hugo López-Gatell, Subsecretario de Salud mexicano, respondió esta tarde a senadores que le reclamaron por el modelo de vigilancia epidemiológica, y en particular, por el bajo número de pruebas aplicadas para la COVID-19 en el país. ¿Cuántas pruebas debe un país aplicar?, les preguntó.
En comparecencia pública, el rostro de México para la pandemia pidió que le dijeran cuál organismo recomienda hacer las pruebas de manera masiva. Dijo que Wuhan aplicó un millón de pruebas recientemente y que sólo halló un caso, con el gasto que ello significa. Ese ejemplo usó para alertar lo que consideró “una deficiencia”. También dijo que las pruebas rápidas son simplemente ineficientes.
“Las pruebas rápidas… No me retractado de lo que dije. Las pruebas rápidas son dispositivos de uso. Son tiras reactivas que se usan en el sitio de atención. Utilizan muestras de sangre, en el caso de la COVID-19. Existe un vacío de evidencia científica del momento en que comienzan a juntarse anticuerpos en la sangre humana contra la COVID-19”, dijo el funcionario. “La efectividad de las pruebas rápidas en bajísimo. Pruebas serológicas sí son importantes”, agregó.
Sobre la aplicación de pruebas, el Subsecretario pidió a las y los legisladores explicar las fuentes en las que se basan sus peticiones para aplicar más. Citó documentación de la OCDE en la que, aseguró, la Secretaría de Salud no identificó “que exhibiera una recomendación específica sobre la distribución de pruebas que un país debería hacer”.
“Si alguien lo encontró por favor ayúdenos a encontrarlo, que oriente el número de pruebas y la proporción de pruebas que se deben hacer, por ejemplo, por cada millón de habitantes”, añadió.
López-Gatell dijo que ningún país del mundo sabe exactamente cuántos casos de la COVID-19 se han registrado en sus poblaciones. México no tiene la identificación completa tampoco, enfatizó, pero eso no significa que hay negligencia por parte de las autoridades, dijo.
El funcionario dijo que aplicar pruebas masivas sería desperdiciar tiempos, recursos y tiempo, por lo cual no es prioridad para el Gobierno de México llevarlo a cabo.
Sobre la aplicación de la hidroxicloroquina, medicamento que mandatarios como Donald Trump han promovido, dijo que el Gobierno mexicano considera que resultaría inconveniente promover su uso sin contar con estudios formales de investigación clínica que deberían cumplir los más altos estándares.
López-Gatell recordó a los integrantes del Senado de la República que en México se descuidó el sistema de salud durante varios sexenios.
Más de 300 hospitales abandonados. Hace algunos días evoqué la imagen de Narro Robles, muy partícipe en la política partidista. Entiendo que ya no tan activo en la política. Me hizo pensar en la línea de eventos para que un país, con la importancia que tiene… ¿No les parece tan impresionante todos los hospitales que fueron abandonados?, dijo.