Como le comentaba la semana pasada el planteamiento del problema radica en que considero que debemos contemplar la hipótesis de que los partidos políticos están dejando de ser referentes aglutinadores de preferencias electorales.
Pero antes sin duda alguna debo hacer una pequeña pausa en Honor de D. Adolfo Suárez el que se dice fue el padre de la Democracia del pueblo español con el que tanto tenemos en común, incluso hoy en día más que nunca se escucha en las noticias la posibilidad de que muchas personas cuyos apellidos se encuentren en el decreto expedido por el Congreso de ese país podrán acceder a la nacionalidad española, ya veremos si le interesa a muchos ser Español en un momento de lo más complicado para el pueblo ibérico, inmersos en crisis económica, política e institucional.
Hoy en México se intenta imitar el Estado de Bienestar Europeo, nuestros legisladores debaten el Seguro de Desempleo, el Acceso Universal a los servicios de salud, Pensiones para los adultos mayores, pero las cantidades que pretenden estipular son risibles verdaderamente, México no es Europa, vamos no existe similitud al menos en los políticos que permite pensar que todos los políticos son iguales.
Pues ya quisiera poder verlo con mis propios ojos que en México se vea una despedida multitudinaria, un reconocimiento nacional por parte de un pueblo, el agradecimiento de las generaciones jóvenes de un país a un político que con sueños e ideales logró instaurar un sistema democrático y que le reconocen todos los partidos políticos sin distinción ser el Padre de la Democracia Española. ¿Me pregunto a cuántos Presidentes de la República llorarán y lamentarán su muerte nuestras nuevas generaciones?, la pregunta es ¿Nuestra clase política, qué está haciendo por nosotros? En fin Descanse en Paz, D. Adolfo Suárez, quizá parte de su legado y frases usuales deberían ser adoptadas por muchas más personas. “acuerdo”, “esfuerzo común” y “concordia”.
Retomando el tema que me ocupa, México se aproxima cada vez más a un modelo mínimo de democracia en la que el ciudadano más que decidir qué partido, proyecto, ideología o candidato debe estar en el poder, decide quién debía dejar de gobernar por una especie de accountability generada por la sensación ciudadana de falta de eficiencia en la toma de decisiones con respecto a la seguridad que generan a su vez indicios de ingobernabilidad.
Estoy convencido o al menos eso creo que hoy en día los ciudadanos están votando lejos de los modelos tradicionales del análisis del comportamiento electoral, ya que existen una serie de múltiples factores que inciden en el comportamiento y que es la causa fundamental que motiva el análisis que le vengo compartiendo a usted estimado lector.
Estos factores intervienen en las consideraciones que toman en cuenta los electores respecto a quién y por qué votarían a un candidato, partido o coalición, sin duda estamos presenciando en éste siglo una ruptura de las formas tradicionales de análisis del comportamiento electoral, el caso mexicano resulta de notorio interés por los conflictos y presencia de grupos armados, que generan una sensación de temor y desanimo en el electorado, México en los últimos cuatro procesos federales ha experimentado diversas sensaciones respecto a la democracia, hemos transitado desde un gobierno tradicional de más de siete décadas a una decena en donde la crisis de seguridad encontró un potencializador y que ha repercutido en las instituciones democráticas y en el ánimo del electorado, es precisamente ésta característica, la que nos motiva a investigar el ¿por qué y cómo? hemos llegado al punto en el que actualmente nos encontramos, con la intención de encontrar posibles causas, analizar los hechos e intentar ir en búsqueda de nuevos derroteros que permitan fortalecer la democracia y la confianza en las instituciones en México.
Con antelación específicamente en México y en América Latina en general se han desarrollado estudios que ponderan el carácter explicativo de factores como el ingreso, características psicosociales y la evaluación retrospectiva, expresados en el análisis de los vínculos programáticos vistos como asuntos de carácter meramente clientelares y personalistas que se establecen entre partidos y electores.
En este sentido considero que existe una laguna por tanto, pretendí utilizar como medio explicativo el planteamiento de un modelo de gobernabilidad concatenado con la sensación ciudadana de Inseguridad como criterio que asumen los electores en el momento de definir sus preferencias a la luz del modelo de la influencia de la violencia política en el comportamiento electoral. Por lo tanto el hecho de que algunos candidatos sean percibidos con mejores o peores condiciones para asegurar la gobernabilidad política y la capacidad de afrontar a los grupos armados, narcotraficantes o dotar al país de cierto grado de seguridad considero influyen positivamente en la selección de un candidato.
En este sentido los resultados que arrojó está investigación que ahora le comento partieron de la base de una encuesta realizada mediante redes sociales y correos electrónicos utilizando google docs. Se analizaron los resultados electorales de 5 procesos federales en cuanto a las elecciones presidenciales. La finalidad fue primordialmente dar una aproximación explicativa a la preferencia e intención electoral del votante relacionada con la violencia política que se vive actualmente en México y encontrar qué relación puede tener está en áreas geográficas, entendiendo éstas como distritos electorales vinculados con la presencia del narcotráfico o con altas tasas de inseguridad , pretendemos ver si se logró crear una especie de clientelismo a favor de algún candidato y sobre todo si llegó a influir al menos en esta última elección presidencial la Consideración de Gobernabilidad. Vamos en pocas palabras el “vivir en paz, la seguridad para ti y tú familia, no más muertes, etc.”. Esas promesas de campaña que al día de hoy sólo quedaron en promesas, acciones imitadas desde la comunicación política hoy más que nunca cuando se quiere imitar todo lo que se hace en Europa, pero de lo que no estamos conscientes es que los ojos de Europa están puestos en América, al menos en el plano académico.
Recordando una vez más a D. Adolfo Suárez decía “Puedo prometer y prometo” en el año del 77 cuando aún el que escribe no había sido concebido y al paso de 36 años he podido escuchar frases similares a estás en mi país algo como “Compromisos cumplidos, te prometo y sabes que te voy a cumplir”, meras casualidades de la vida, para Suárez la política la autodefinía como “La política constituye para mí un oficio, una profesión, una vocación y un deporte”. ¿Qué significará para nuestros gobernantes? Y ya no se diga para los ciudadanos que lo definimos como el “arte de comer mierda sin hacer gestos”.
Suárez decía cuando superaba una moción de censura del PSOE “Comprendo que hay que cambiar la forma de gobernar: por ejemplo, yo personalmente dejaré de adoptar una permanente posición de silencio, aunque algunas veces sea necesario callar, porque un presidente tiene que ser un buen fajador”. Sin embargo en nuestro país se adopta una posición de silencio en los temas incomodos para el gobierno y poco a poco van callando las voces críticas y ciudadanas como el caso de Quintana Roo.
La gran diferencia radica en que Suárez siendo amigo íntimo del Rey de España, siendo Presidente de España, dimitía ante las presiones y se veía en la imperiosa necesidad de hipotecar su casa para brindarle atención médica contra el cáncer a su esposa, eso era Honestidad, de esos políticos ya no hay. Y en Nuestro país nos están hipotecando a los ciudadanos para dotarse de lujos y vidas fastuosas, los políticos y sus futuras generaciones que viven como Reyes sin existir la Corona en México.
La próxima semana le presento el resultado de la aproximación teórica y las consideraciones sobre gobernabilidad…
P.D. Gracias a Julia, Mariano y amigos fraternos que vivieron la transición del Franquismo a la Democracia española por compartirme amenamente sus experiencias y vivencias desde la mirada ibérica.
