El Partido Socialista (PSOE), segunda fuerza parlamentaria tras el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy, se abrió a explorar la propuesta de Compromís, una formación regional valenciana.
Por Sara Barderas
Madrid, 26 abr (dpa) – La izquierda española puso hoy en marcha un intento in extremis de formar Gobierno en España -donde desde las elecciones de diciembre no se ha logrado constituir un Ejecutivo- y evitar que el país tenga que repetir elecciones en junio. Las posibilidades de llegar al pacto, sin embargo, son escasas.
El Partido Socialista (PSOE), segunda fuerza parlamentaria tras el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy, se abrió a explorar la propuesta de Compromís, una formación regional valenciana.
Esta pequeña fuerza parlamentaria de izquierdas propuso un pacto en torno a 30 medidas de Gobierno el día final de la última ronda de consultas del rey Felipe VI con los partidos en busca de un posible candidato a la investidura como jefe del Ejecutivo.
Los socialistas aceptaron 27 de ellas y ofrecieron que su líder, Pedro Sánchez, se presente a una moción de confianza parlamentaria dentro de dos años si es investido presidente del Gobierno.
Pero también defendieron la entrada en el pacto del partido liberal Ciudadanos, con el que tienen un acuerdo desde febrero, y propusieron que el hipotético Ejecutivo esté formado por ministros independientes cercanos a esa formación y a Podemos.
Ni Ciudadanos ni Podemos, que llevan cuatro meses vetándose mutuamente, están de acuerdo. El rechazo expresado hoy por sus líderes tras ser recibidos por el rey en el Palacio de la Zarzuela da pocas esperanzas a que a lo largo del día y de mañana pueda alcanzarse un consenso mediante negociaciones.
“Estamos abocados lamentablemente a unas nuevas elecciones”, manifestó Albert Rivera. “La propuesta no parece algo para valorar ni el último día de plazo”, añadió el presidente de Ciudadanos.
“El PSOE ha dicho ‘no’ a la propuesta de Compromís”, dijo por su parte el líder de Podemos, Pablo Iglesias. “Tiene unas horas para rectificar”, añadió el político izquierdista.
Para que pudiera celebrarse a tiempo una sesión de investidura con dos votaciones con las 48 horas de diferencia que marca la ley si son necesarias -el 30 de abril para intentar una investidura por mayoría absoluta y el 2 de mayo para tratar de alcanzar una mayoría simple de más síes que noes- el rey tendría que proponer mañana miércoles como tarde a Pedro Sánchez como candidato a jefe del Ejecutivo.
También queda la posibilidad de que lo haga el 1 de mayo, pero entonces habría que ir directamente un día después a una votación que solo podría salvarse por mayoría absoluta.
Son escasas pues las posibilidades de evitar que los españoles tengan que volver a las urnas el 26 de junio en una repetición de comicios sin precedentes en casi 40 años de democracia.
Si el 2 de mayo no hay jefe del Ejecutivo investido, el rey disolverá el Parlamento al día siguiente y convocará nuevos comicios seis meses después de los del 20 de diciembre.
El PSOE cuenta con 90 de los 350 representantes en el Congreso de los Diputados. La amplia coalición de Gobierno de izquierdas propuesta por Compromís, con seis partidos, sumaría un total de 161, una cantidad insuficiente por sí misma.
La opción, pues, necesitaría del apoyo de Ciudadanos -activo o en forma de abstención- o del voto de fuerzas nacionalistas e independentistas, un asunto delicado para Pedro Sánchez porque se comprometió, obligado por importantes barones regionales de su formación, a no buscar el respaldo secesionista para poder gobernar.
El apoyo del PP de Rajoy se descarta completamente. El líder conservador solo está dispuesto a una gran coalición de Gobierno con los socialistas y Ciudadadanos presidida por él.
Tras las reuniones que mantuvieron en la mañana de hoy con el rey el líder de Ciudadanos y el de Podemos, el monarca esperaba esta tarde a Pedro Sánchez y a Rajoy, que lleva ya cuatro meses ejerciendo el cargo de jefe del Ejecutivo en funciones.
