“Las palabras se olvidan pronto; los ejemplos se quedan marcados en el alma”.
Típico de los infames, cuando sienten que tienen ventaja atacan con todo. Y lo más grave es que sus perversidades las celebran a escondidas y se consideran verdaderos genios.
Negociar con los maestros para que se movieran a la Plaza de Santo Domingo y después en la madrugada, a hurtadillas, presionarlos. Ante la inminente agresión física, para subirlos a los autobuses de regreso a su tierra, es una maniobra de pillos, de líderes charros de burócratas inmorales.
Demuestra además una escasa capacidad para encontrar la negociación en el momento oportuno.
Presiona, presiona, presiona que el poder te protege, sanciona que ellos se han debilitado, es el momento de golpear… ataca. Esa es la lógica de los impulsores de la reforma de la SEP.
Tal vez puedan lograr su objetivo y finalmente imponer su ley violando los principios básicos del derecho al aplicarla retroactivamente.
Puede triunfar con los meses, demostrar que la política es feroz, que en el mundo del poder no hay negociación, solo sumisión, y escarmiento.
Van a evaluar a los maestros y a despedir ilegalmente a los rebeldes. Y no le importa si son varios miles, pues hay quien los sustituya.
Todo porque ellos los que tienen el monopolio de la violencia decidieron que los profesores deben evaluarse, como ellos quieren.
Este es un país en donde las decisiones de las instituciones que afectan a miles de mexicanos, las toman sin consultar a los que se verán afectados por las mismas, basta con el apoyo de los grandes empresarios importantes, que no llegan a cien.
Si, El hombre es un político duro y de gesto suave.
Pero ¿Y la educación?
¿Qué aprenden los niños que viven el conflicto?
¿Cuáles son las palabras que les comparten los maestros? , ¿Qué escuchan en la Televisión, en la calle ?
Más importante aún, ¿cuál es el ejemplo que están observando?.
Repitamos la frase inicial por su importancia “Las palabras se olvidan pronto, los ejemplos se quedan marcados en el alma”
Y quiero explicar esto con mi experiencia personal.
A pesar de tener 70 años de edad, tengo memoria de mis años en primaria, y entonces vivimos una situación similar, que fue distorsionada y manipulada por los medios masivos de comunicación de aquellos días, fueron los años 1954 a 1960, y sucedieron los grandes movimientos magisterial y ferrocarrilero. Eran movimientos por mejores condiciones de vida y por la independencia sindical. El Estado se comportó de manera similar: represión ante las exigencias de los trabajadores, desprestigio para ellos y justificación a cualquier acto represivo del Estado.
Todo aquello marcó mi alma. Me dijo en qué nación vivía: Un estado intolerante, que no tenía razones, que tenía sólo la fuerza, que en México el Gobierno son ellos y los gobernados nosotros, que ellos eran mentirosos,violaban la Ley, encarcelaban a quien exigía sus derechos, que finalmente vivía en un país donde debíamos someternos al poderoso.
Contra ese estado,me rebelé y sigo rebelde.
Y trasladando mi experiencia, a la niñez de hoy, ¿en qué país viven los niños de primaria?
En un país, donde la educación es la voz del gobierno, no la voz de la ciencia, donde el fuerte,el poderoso, usa toda su fuerza, Incluso cambia la constitución, y las leyes laborales,y envía al Ejército, a los policías, usa helicópteros infraestructura, todo, todo, para someter a personas pacíficas, sin armas que tienen una opinión diferente al gobierno.
Sin embargo y al mismo tiempo es un gobierno que no puede terminar con los delincuentes, es un gobierno que permite que los narcotraficantes, hagan negocios, asesinen, se escapen de las cárceles, es un gobierno donde no se sabe exactamente donde termina la policía y donde empieza la delincuencia.
Conclusión la mejor manera de vivir en México es ignorando la Ley, usar la fuerza, nunca negociar, someter al más débil, respetar al delincuente, al corrupto, al político mendaz, y aplaudir a quien llega a un acuerdo y luego falta a su palabra, ataca de noche, engaña, miente.
Los niños de hoy aprenden que las palabras se las lleva el viento, que si quieren sobrevivir deben someterse al más fuerte y doblegarse al poderoso.
Y el más fuerte en su mundo es el compañero más alto,más desarrollado, hijo de un amigo del director, el compañero violento. Los niños de hoy están aprendiendo que el bullying empieza en la primaria y termina en la tumba.
Algunos se rebelaran contra ese estado otros se someterán a él y construirán su futuro con temor a la autoridad, a los jefes a los delincuentes. Saben que viven en un país sin leyes. Donde solo sirve la fuerza y las relaciones con los poderosos. En fin que como dijo José Alfredo, “la vida no vale nada”
Bendita Educación, bendito país.
