Esperanza le contó lo sucedido a su esposo, Ramón de la Rosa, quien le arrebato al niño y llamó al número de emergencias 911. Al no recibir respuesta por parte de las autoridades, tomaron la decisión de acudir por sus propios medios a las instalaciones del Hospital del Niño, para que los médicos atendieran al pequeño.
Por Ulises Martínez
Saltillo/Ciudad de México, 24 de abril (Vanguardia/SinEmbargo).- Por la crisis nerviosa que sufre, Esmeralda Castillo no soportó el llanto de su bebé, de poco más de un año de nacido, que al escucharlo llorar salió con él en brazos al patio de su casa con la idea de tranquilizarlo… no lo logró y le dio un tremendo golpe en la cabeza que lo tiene al borde de la muerte.
Según fuentes cercanas al caso, el domingo alrededor de las 12:00 del mediodía ocurrió la tragedia en la calle Caballerizas, manzana 3 lote 4 de la colonia San Patricio Popular.
Esperanza le contó lo sucedido a su esposo, Ramón de la Rosa, quien le arrebato al niño y llamó al número de emergencias 911.
Al no recibir respuesta por parte de las autoridades, tomaron la decisión de acudir por sus propios medios a las instalaciones del Hospital del Niño, para que los médicos atendieran al pequeño.
El hecho fue comunicado a la Procuraduría para los Niños, Niñas y la Familia.
Según el diagnóstico, el niño presenta un traumatismo de cráneo en la parte frontal, lesión que le ocasionó la madre para que dejara de llorar.