“Para fomentar el crecimiento económico en el mediano y largo plazo, resultará clave reactivar la inversión privada e impulsar proyectos rentables de inversión pública que produzcan externalidades positivas sobre toda la actividad económica”, apuntó BBVA México.
México, 22 de agosto (EFE).- México puede reactivar su economía mediante la reducción de la tasa del Impuesto Sobre la Renta (ISR) dirigida a los contribuyentes de menores ingresos, indicó este jueves el grupo financiero BBVA México.
“Nuestra propuesta podría ser más rápida y efectiva para apoyar la actividad económica que cualquier otra por el lado del gasto público, salvo una basada en el desarrollo de infraestructura”, apuntaron expertos del área de Estudios Económicos de BBVA México en un informe.
Precisaron que para evitar que este estímulo fiscal resulte en una reducción permanente de los ingresos tributarios derivados del ISR, para los siguientes años se debe impulsar una política de combate a la informalidad -en el segundo trimestre a una tasa del 56.3 por ciento del total de la población ocupada- y así lograr un incremento significativo en la base de contribuyentes.
“No obstante, para fomentar el crecimiento económico en el mediano y largo plazo, resultará clave reactivar la inversión privada e impulsar proyectos rentables de inversión pública que produzcan externalidades positivas sobre toda la actividad económica”, apuntó BBVA México.
En este análisis distribuido a medios, los expertos consideraron que el plan de reactivación económica anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México hace algunas semanas “tendrá un impacto positivo marginal” sobre el crecimiento económico de 2019.
Esto debido principalmente a que 66 por ciento de los recursos de dicho plan están dirigidos “al otorgamiento de préstamos y garantías de la banca de desarrollo”.
Señalaron que si bien la intención del plan “es fomentar la actividad productiva de micronegocios, pequeñas y medianas empresas”, el monto crediticio otorgado dependerá de la demanda de crédito de dichas empresas y, en última instancia, de la demanda de los bienes y servicios que estas producen.
Los expertos recordaron que el crecimiento de la economía mexicana está “atravesando por un periodo de desaceleración” que se ha reflejado en estancamiento de la actividad productiva desde el cuarto trimestre del año pasado”.
El producto interno bruto (PIB) de México se contrajo 0.2 por ciento en el primer trimestre de 2019 frente al periodo octubre-diciembre del año anterior, mientras en el segundo creció un magro 0.1 por ciento respecto al anterior, de acuerdo con reportes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“La economía mexicana está presentando una fuerte desaceleración en el crecimiento de la demanda agregada”, señaló el texto.
El BBVA estima que la economía mexicana crecerá un 0.7 por ciento para 2019.
Además, los analistas del banco agregaron que “el ritmo de generación de empleos formales ha estado disminuyendo significativamente” al pasar de una tasa de crecimiento interanual promedio de 3.5 por ciento en el cuarto trimestre de 2018 a una de 2.4 durante el segundo trimestre de este año, apuntó.
Por todo ello, BBVA México consideró que una “posible alternativa” de reactivación de la economía sería a través de un impulso al consumo privado, el cual aporta aproximadamente 67 por ciento al total del PIB.
Por ello, “una reducción en la tasa del ISR para personas físicas o del Impuesto al Valor Agregado (IVA) tendría un efecto directo e inmediato sobre el consumo privado”.
Aunque esto también “implicaría una menor recaudación tributaria y, por consiguiente, un menor superávit primario”, concluyó el informe.
De acuerdo con datos de Hacienda citados en este artículo, la recaudación tributaria por concepto del IVA e ISR fue 3.9 y 7.1 por ciento del PIB en 2018, respectivamente.