Esta secuencia reafirma la posición de Natasha como miembro indispensable de los Vengadores y de cómo ha marcado a la sociedad de una manera muy diferente, siendo un modelo a seguir y dejando de lado su faceta de espía.
Madrid, 21 de agosto (SinEmbargo).- Viuda Negra continúa siendo uno de los estrenos del verano en cines. La última parada de Natasha Romanoff en el Universo Cinematográfico de Marvel iba a tener un desenlace mucho más emotivo de lo que ha sido finalmente fue y que hubiera sido un tributo al legado que ha dejado la exespía rusa interpretada por Scarlett Johansson en el público.
El final original termina con Natasha encontrándose con Mason (O-T Fagbenle) y este le da una aeronave para que pueda realizar sus objetivos de una manera más eficaz. El final alternativo comienza con la superheroína con un grupo de niños que está jugando en la calle.
Los pequeños imitan a los Vengadores y Natasha llega en su motocicleta para mirar por última vez el lugar que fue su casa en Ohio, donde su «familia» y ella fueron espías para la Madre Rusia.
Entre los niños, hay una niña que está imitando a la Viuda Negra. Esta la reconoce y le hace un gesto con el puño, el cual la superheroína le devuelve. Una secuencia que reafirmaría la posición de Natasha como miembro indispensable de los Vengadores y de cómo ha marcado a la sociedad de una manera muy diferente, siendo un modelo a seguir y dejando de lado su faceta de espía.
Una secuencia que hubiera sido un precioso gesto de despedida para uno de los personajes más queridos por el fandom marvelita y que, al menos, podrá verse entre el contenido adicional de las ediciones domésticas del filme dirigido por Cate Shortland.
