En la municipalidad de El Salto, Jalisco, fueron encontrados 28 cuerpos en una fosa clandestina; el Fiscal General de la entidad expresó que algunas de las víctimas ya habían sido identificadas y que continuarían con los trabajos ante una posible localización de más restos.
Ciudad de México, 20 de julio (Xinhua).- Autoridades han extraído 28 cuerpos de una fosa ilegal en la municipalidad de El Salto, estado de Jalisco (oeste), tras una semana de labores de búsqueda en el sitio, informó este lunes la Fiscalía de la entidad.
El Fiscal General de Jalisco, Gerardo Solís, dijo en conferencia que personal había conseguido la identificación de algunos cuerpos recuperados en la fosa clandestina, que continuaba siendo procesada ante la posible localización de más restos.
"Al día de ayer (domingo) se habían logrado extraer 28 cuerpos, algunos de ellos ya identificados. Seguimos en las labores, en el trabajo cotidiano, hasta terminar de procesarla (...) Se está procesando en este momento", apuntó el Fiscal.
Hasta el pasado viernes, la institución había dado cuenta de 23 cuerpos localizados en la fosa ilegal luego de que agentes y peritos comenzaron los trabajos a partir del pasado 13 de julio.
Los investigadores detectaron la fosa dentro de una finca del barrio El Pedregal, en la municipalidad suburbana de la ciudad de Guadalajara, capital de Jalisco, durante una pesquisa por desaparición de personas, de acuerdo con la Fiscalía.
Jalisco es una de las entidades de México con más reportes de personas desaparecidas en los últimos dos años y donde autoridades recuperan un mayor número de cuerpos en fosas ilegales, según un reciente informe de la Secretaría de Gobernación (Segob) mexicana.
El Fiscal Solís abundó que actualmente mantenían trabajos de búsqueda en tres fosas clandestinas en la entidad, incluida la detectada en El Salto.
Ubicada a alrededor de 30 kilómetros de Guadalajara, El Salto es una municipalidad con presencia de grupos delictivos al igual que otras localidades suburbanas de la capital de Jalisco, según datos del Gobierno mexicano.
La problemática de las desapariciones y de la utilización de fosas ilegales para sepultar cuerpos comenzó a incrementarse en México desde 2006, ante un aumento de las peleas entre cárteles de la droga y una mayor respuesta de autoridades para frenarlos.
