En la Central de Abasto trabajan aproximadamente 90 mil personas en 327 hectáreas que lo convierten en el mercado mayorista más grande del mundo. El restaurante La Federal busca los mejores ingredientes por lo que organizo una experiencia gastronómica que que incluía visitar la central de Abasto y conocer su oferta de productos para llevarlos hasta su sucursal en la calle Río Lerma cocinarlos y presentarlos a la mesa.
Ciudad de México, 21 de junio (SinEmbargo).- La Central de Abasto es el mercado mayorista más grande del mundo, cuenta con más de 300 hectáreas de extensión y más de 15 mil productos provenientes de distintos puntos de la república y de otros países por lo que visitarlo siempre será toda una experiencia. Con esto en mente La Federal organizo una actividad gastronómica que incluía visitar la central junto a sus chefs para conseguir los ingredientes de una rica comida que posteriormente se prepararía; así que te contamos qué tal estuvo.
El mejor horario para comprar en la Central de Abasto para los mayoristas es en la noche porque es cuando llegan los camiones de productos y establecen el precio, sin embargo, para quienes compran al menudeo es bueno llegar en la mañana; un dato interesante es que aproximadamente 500 mil visitantes acuden diariamente para realizar alguna compra.
Recorrimos el sector de Flores y Hortalizas, un espacio lleno de color debido a los elotes, nopales, zanahorias y demás productos frescos que cautivaban a los chefs y a quien recorría sus pasillos.
¿QUÉ PREPARAR?
La Federal es un restaurante bar en el que se puede disfrutar de la cocina tradicional mexicana pero con un toque contemporáneo por lo que sus chefs prepararon deliciosos platillos con ingredientes básicos y sencillos de elaborar. Como primer tiempo sirvieron quelites en salsa verde con un arillo tibio de calabaza, flor de calabaza frita y motas de chicharrón, aunque se veía pequeño
Siguió un platillo de colores y texturas: tostada azul de setas flameadas con mezcal, rábano, flores comestibles y chicharrón de queso. La ensalada estaba preparada con mix de lechugas, aderezo balsamico, perlas de queso de cabra, frijol negro y flores comestibles.
Como postre un sorbete, que a diferencia de la nieve tiene una consistencia más ligera y se elabora artesanalmente, de mango con Pitahaya y un toque de mezcal Amores y un capulín. Además de una bebida con pacharán, un licor de ballas, vodka, un mix de frutos rojos como arándano, fresa y zarzamora, jugo de naranja y flores para decorar.
