“No era una máquina estalinista”, dice biógrafa de Jorge Semprún

21/05/2016 - 12:03 am
Jorge Semprún en Gijón, poco tiempo antes de morir. Foto: efe
Jorge Semprún en Gijón, poco tiempo antes de morir. Foto: efe

Un republicano español, un superviviente del campo nazi de Buchenwald, un agente clandestino, un escritor, un candidato al Oscar, un pensador europeo: todos ellos fueron uno solo y revive en la biografía escrita por Soledad Fox Maura

Por Sara Barderas

Ciudad de México, 21 de mayo (SinEmbargo/dpa)-  Cualquier espectador casual podría haberse llevado la impresión de que el filósofo francés Bernard-Henry Lévy rendía homenaje a varias personas cuando una tarde de julio de 2011 hablaba en una sala del Museo del Prado de Madrid: un republicano español, un superviviente del campo nazi de Buchenwald, un agente clandestino, un escritor, un candidato al Oscar, un pensador europeo.

“Pero estaba, simplemente, describiendo y señalando las múltiples facetas de una sola persona: Jorge Semprún”. Esa es la imagen con la que Soledad Fox Maura arranca la biografía Ida y vuelta. La vida de Jorge Semprún (Editorial Debate) condensa la esencia y la trascendencia de uno de los grandes personajes españoles del siglo XX, de cuya muerte se cumplen cinco años el 7 de junio.

“Semprún es un reflejo de ese siglo, de las consecuencias humanas y políticas de la Guerra Civil española, de la Segunda Guerra Mundial, del papel de la España franquista en la Guerra Fría, del comunismo en esa época, de la Transición a la democracia…”, apunta en entrevista con dpa la catédratica del Williams College de Massachussetts.

“Tanto su vida como su obra son una memoria única del siglo XX”, dice sobre el deportado a Buchenwald, sobre el agente secreto y dirigente comunista Federico Sánchez, sobre el escritor de la memoria, sobre el guionista de cine, sobre el ministro de Cultura de Felipe González.

A él ha dedicado los últimos cinco años. Le propusieron la biografía cuando murió y sin pensarlo apartó todo menos la universidad para ordenar el rompecabezas de la vida de un personaje con el que se emociona durante la entrevista. Lleva más de 20 años estudiando la Guerra Civil, el exilio y la Segunda Guerra Mundial desde la óptica de la literatura, de quienes vivieron esos hechos y escribieron sobre ellos. “Jorge Semprún (1923-2011) lo tiene todo para mí”, apunta.

Además, hay una dimensión anecdótica: eran parientes. Su abuelo se crió prácticamente con la madre del escritor, Susana Maura, hija del cinco veces presidente del Gobierno español Antonio Maura. Estuvieron muy unidos. Pero la Guerra Civil separó a las dos ramas de la familia y, como fue el caso de tantas otras en España, la ruptura atravesó a las generaciones que fueron llegando. Ella, prima de Semprún, no lo conoció hasta 2011 en París. Después se vieron pocas veces más.

De Semprún apenas hay biografías, en parte porque España está aún alejada de la tradición anglosajona de este género histórico, en parte porque la relación de su país con el intelectual es complicada.

“Era un exiliado y España siempre ha tenido una relación difícil con sus exiliados. Fue valiente y tuvo éxito en la literatura, en el cine, en la política. Intimida una figura de tremenda cultura que habla alemán y francés como español”, explica.

MÁS RECONOCIMIENTO EN FRANCIA Y ALEMANIA

A Semprún lo han reconocido más Francia y Alemania que España. Al primero de esos países llegó con 13 años, después de que su padre apostara por el exilio cuando el estallido de la Guerra Civil sorprendió a la familia de vacaciones en el País Vasco. Fue en Francia donde se alistó en la Resistencia. A Alemania llegó deportado tras ser capturado y en ese país su voz como preso 44.904 del campo nazi de Buchenwald, junto a Weimar, fue siempre escuchada y venerada.

La biografía de Fox Maura, escrita originalmente en inglés, se sitúa en la tradición anglosajona, alejada de la hagiografía que ha sido más común en España. Pero es una reivindicación de la importancia de Semprún para su propio país. “De haber sido un escritor anglosajón o francés, ya hubieran existido 20 biografías”, sostiene.

Una portada para una biografía. Foto: Especial
Una portada para una biografía. Foto: Especial

También es un complemento de lo que él cuenta en sus libros, una forma de llenar con datos los vacíos y de matizar la memoria que dejó el deportado de El largo viaje, el preso del campo nazi de La escritura o la vida, el comunista clandestino expulsado luego del PCE de la Autobiografía de Federico Sánchez, el guionista de Z.

Para ello ha buceado en archivos y en correspondencia diplomática. Aporta imágenes y material nuevo. Y se apoya también en más de 50 entrevistas con familiares, amigos y otras personas que conocieron a Semprún y alguna de sus facetas. Un retrato de los pies a la cabeza.

Trata la niñez, una etapa que ha pasado inadvertida como factor de evolución de quien luego fue tantos otros. “En una familia llena de políticos se fragua su vocación”, dice Fox Maura. Fue una infancia difícil, alejada de la imagen de niño bien en el exilio que se podría presuponer por la importancia y el dinero de su familia.

Ida y vuelta. La vida de Jorge Semprún cuenta el drama del exilio de un niño rojo español que no habla francés y debe salir a flote. Presenta la difícil relación con su padre, que al poco de morir su madre se casa con la “fräulein” suiza de sus siete hijos a los que les enseña alemán a la perfección, pero llega con ellos al maltrato.

Buchenwald, el PCE, su expulsión, su paso por el Gobierno de Felipe González. Pero también la pasión por su segunda mujer, Colette, y la relación con su único hijo, Jaime, fruto de su relación con la actriz Loleh Bellon, del que acabó alejándose radicalmente y para siempre.

“He intentado escribir el libro que yo hubiese querido leer”, explica Fox Maura. “Y me ha cambiado la imagen de persona fría que tenía, de agente clandestino con nervios de hierro. He descubierto que era una persona con chispas y mal humor. No era una máquina estalinista”.

¿Quién es Jorge Semprún? (Madrid, 1923-París, 2011) fue testigo de algunos de los peores cataclismos políticos del siglo XX y participó activamente en la lucha contra los totalitarismos. Fue miembro de la Resistencia y estuvo preso en el campo de concentración de Buchenwald. Posteriormente inició una exitosa carrera literaria con títulos como La escritura o la vida, Aquel domingo o El largo viaje.

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