En ésta segunda edición del Manual de la buena lesbiana, la autora se asume como “mujer, lesbiana” y toma lo político como personal. Define “a una buena lesbiana” como buena persona y feliz en toda la extensión de la palabra.
Sobre la política y el catolicismo plantea que la época que se vive, con una política de derecha, es la peor con “políticos de terror” que fueron criados para gobernar en escuelas de religiosas. “Por eso las escuelas de los religiosos es donde van los más ricos… la generación de Enrique Peña Nieto”, por ello extraña que las políticas públicas excluyan a este sector.
También critica la nueva estrategia del catolicismo para alimentar falsas verdades, pues por un lado aseguran que hay apertura a temas diversos, pero por otro apoyan que “las mujeres estén en la cocina y se dediquen a tener hijos y los homosexuales y lesbianas deberían estar en el infierno”.
A pesar de que ya se tienen avances en la búsqueda del respeto a la libertad, dice Ana Francis Mor, las lesbianas y homosexuales deben ir rastreando su seguridad, tienen el temor de ser agredidas todos los días.
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Ana Francis Mor
Tiene una larga trayectoria artística, vinculada a la creación y a las artes escénicas. Egresada del Foro Teatro-Contemporáneo en la carrera de actuación, ha sido becaria del FONCA como intérprete en dos ocasiones (2003-2004 y 2007-2008), beneficiaria en 2010 del Programa de Intercambio de Residencias Artísticas y, actualmente cuenta con la beca de Creadoras Escénicas con trayectoria.
Actriz, cabaretera, activista, dramaturga, directora teatral, su trayectoria habla, sobre todo de su pasión y tesón. Esto la ha llevado también a ganar un espacio más (no con poco esfuerzo): el periodístico. Desde 2007, Ana Francis escribe, cada 15 días la columna “El Manual de la Buena Lesbiana”, en la revista Emeequis.
