Ciudad de México, 20 de septiembre (SinEmbargo).– La Reforma Política del Distrito Federal, que dotará de autonomía a la Ciudad de México, acabará con el “cacicazgo” que han ejercido durante hasta hoy los jefes delegacionales y su antecedente inmediato que eran los delegados, afirmó el Senador Alejandro Encinas Rodríguez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Quien fuera Jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF) entre 2005 y 2006, luego de que Andrés Manuel López Obrador dejara el cargo para buscar la Presidencia de la República, explicó la importancia de esta reforma y los beneficios reales para los capitalinos.

Sobre el punto de acotar el poder de los a actuales jefes delegacionales, Encinas detalló que las delegaciones o demarcaciones del DF se convertirán en alcaldías, con cabildos o cuerpos colegiados de gobierno, derivados de una elección universal, directa y secreta.

Estos cabildos que serán contrapesos para los jefes delegacionales, que se convertirán en alcaldes, lo cual favorecerá una mejor gestión de gobierno, detalló el Senador perredista en entrevista para Sin Embargo.

“En primer lugar, se van a acabar las decisiones de carácter unilateral, ahora [los jefes delegacionales] no tienen ningún contrapeso, lo tendrán en el cabildo, que sería una instancia conformada de manera plural, a la cual tendrán que sujetarse muchas de las decisiones del alcalde [antiguo jefe delegacional]”, afirmó.

Estas alcaldías no serán necesariamente las 16 delegaciones o demarcaciones actuales, tendrá que hacerse una nueva definición del territorio en la Constitución federal, donde delegaciones como Iztapalapa, Álvaro Obregón o Gustavo A. Madero, podrán dividirse en dos o más alcaldías. Este tema aún se encuentra en estudio en comisiones del Senado de la República.

Lo que es seguro es que desde estas alcaldías se fomentarán nuevos mecanismos de participación de los ciudadanos, para dar seguimiento, evaluación y fiscalización de los recursos públicos, así como de la aplicación de los programas que se desarrollarán en estas alcaldías.

“Ya no va a ser asunto de un solo partido, sino que van a ser un órgano colegiado de carácter plural y que tendrá que transparentar –que es uno de los temas que estamos introduciendo en esta discusión– plenamente el ejercicio de los recursos, su destino, cómo se aplican y cómo se van desarrollando los programas”, detalló el Secretario de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado.

LA REFORMA POLÍTICA DEL DF

El pasado 20 de noviembre de 2013, senadores perredistas presentaron una iniciativa de reforma constitucional en materia política del Distrito Federal, por la cual se mantiene la condición de la Ciudad de México como capital de la República y sede de los poderes de la Unión, pero con una regulación más adecuada a su condición de “Ciudad Capital”.

Al mismo tiempo, la iniciativa transforma la naturaleza jurídica de la Ciudad de México para que se le reconozca como una entidad federativa, con todas las facultades constitucionales: autonomía, su propia Constitución, poderes locales facultados para ejercer el gobierno, sin la intervención de los poderes Federales.

En otras palabras, con la reforma se discutirá desde esta semana en el Senado, los habitantes del Distrito Federal gozarán de derechos políticos plenos, al igual que cualquier otro ciudadano en las 31 entidades federativas del país.

Posteriormente, el Senador perredista Mario Delgado Carrillo presentó una iniciativa para complementar y profundizar la primera propuesta. Planteó darle autonomía a la Ciudad de México para que autorice los techos de endeudamiento a través de su propio Poder Legislativo.

En materia de seguridad pública se señala que el mando de la fuerza pública dependerá del Ejecutivo Local, aunque el Presidente de la República podrá remover al secretario de Seguridad Pública cuando se pongan en riesgo del desempeño de los Poderes de la Unión.

Además de especifica la necesidad de integrar un Congreso Constituyente plural, participativo, democrático y legítimo, para elaborar la Constitución de la capital.

BENEFICIOS PARA CAPITALINOS

El primer beneficio que el Senador Alejandro Encinas observó para los capitalinos con la Reforma del DF es que podrán gozar de derechos políticos plenos. Pero fue más allá, explicó que dentro de estos nuevos derechos políticos, van a poder establecerse además nuevos mecanismos de control de los ciudadanos sobre los actos de gobierno.

En otras palabras, los nuevos derechos irán más allá de los recientemente aprobados al estatuto de gobierno [el símil de una Constitución en cualquier entidad],  en cuanto a los mecanismos de participación directa de los ciudadanos: candidatura independiente, iniciativa ciudadana, el plebiscito o referéndum.

“Entonces, yo creo que los elementos de participación ciudadana, democracia directa candidaturas independientes, etcétera, van a consolidarse y esto va a permitir una mayor cercanía de los ciudadanos con el gobierno de la Ciudad y con las Delegaciones”, consideró el Senador Alejandro Encinas.

Al cambiar la naturaleza jurídica de la capital de la República, tendrá autonomía en los aspectos económicos, como es el proceso para la autorización de su techo de endeudamiento, rendición de informes y fiscalización de su ejercicio, ya que dichos recursos forman parte del funcionamiento interno de la Ciudad Capital, como una entidad federativa.

“Y por supuesto esto también lleva una relación distinta con las finanzas nacionales, porque  teniendo el mismo estatus jurídico que las demás entidades accederíamos a fondos que hasta ahora se le han negado a la Ciudad de México, como son los fondos para el desarrollo municipal, y otros para obras de infraestructura”, indicó el Senador Encinas.

Otro de los beneficios, continuó, es que es que siendo la Asamblea Legislativa prácticamente un Congreso local, tendrá la posibilidad de incidir en el respaldo o no de las reformas que se aprueben en el ámbito federal con las reformas constitucionales.

“En todas las reformas constitucionales que se han aprobado no han tomado en cuenta la opinión de los habitantes de la capital de la República”, recordó.

NUEVA RELACIÓN CON SUS VECINOS

Sobre cómo habría mejorado su gestión al frente del Gobierno del Distrito Federal, de contar con las herramientas que se pondrán en marcha, posiblemente a partir del 2018, Encinas respondió que con la reforma habrá nuevas reglas en la relación entre la Ciudad de México, el Gobierno federal y los estados vecinos, con la cual se podrá realizar una ley para administrar la zona metropolitana del Valle de México, lo cual mejoraría los mecanismos de coordinación con el Estado de México, con Hidalgo, con Morelos, en el manejo de la megalópolis.

El hoy legislador perredista por el Estado de México agregó que al establecer claramente en la Ley que la Ciudad de México es la capital de la República y la sede de los poderes federales, permitiría tener una relación con el Gobierno federal definida en términos legales de facultades, competencias y concurrencias.

“Eso ayudaría en la consolidación de un fondo de capitalidad, en donde hubiera recursos adicionales, que es otro de los beneficios para los capitalinos,  por los costos que significa ser la sede de los poderes federales, que no solamente tiene que ver con la atención de las oficinas o la prestación de servicios a las instituciones federales, las cuales no pagan ni siquiera el predial en la Ciudad, porque las instalaciones federales están exentas del pago de este impuesto, y muchas veces ni siquiera pagan el agua que consumen”, sostuvo el ex Jefe de Gobierno.

Recalcó que la Reforma permitirá tener una mejor relación con Gobierno federal y contar con más recursos para realizar las tareas y competencias de la capital.

“Otro de los costos de la capitalidad es, por ejemplo, la atención que se da a todas las sedes y al cuerpo diplomático establecido en la capital del país que corre a cargo del Gobierno del Distrito Federal. Más aún, hasta los fuegos artificiales y los cohetes en la noche del grito los paga la Ciudad de México, por ponerte un ejemplo, extremo”, agregó.

PANISTAS PIDEN IR CON CALMA

Durante la primera reunión de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Distrito Federal y Estudios Legislativos, Primera, del Senado para abordar este tema, se habló de la importancia de acelerar el paso, a fin de aprobar la reforma política antes de que termine el presente periodo legislativo.

Se habló de sacarlo adelante en los últimos días de septiembre o los primeros de octubre.

No obstante la fracción del Partido Acción Nacional (PAN) pidió ir con calma y no acelerar los tiempos, a fin de abrir foros públicos que permitan escuchar a todas las voces interesadas en el tema.

“Yo no coincido con lo expuesto aquí, yo sí creo que no hay una prisa, o sea, no es iniciativa preferente, por favor […]. Yo sólo pondría en la mesa que no nos pongamos una camisa nosotros mismos”, enfatizó la Senadora panista Mariana Gómez del Campo.

La legisladora pidió “ir un poquito más despacio” es decir, no colocar una fecha determinada para aprobar la reforma, a fin de procesar los temas con los diferentes órganos panistas que han estado involucrados en todo el proceso.

“Honestamente todo lo que aquí aprobemos en cuanto a reforma política se refiere al final del día no va a aplicarse para el 2015, va a aplicar para el 2018, creo que es un compromiso de todos y así lo hizo ver el Coordinador de mi Grupo Parlamentario, que sería un compromiso del PAN el ir en la reforma política porque además así lo hemos impulsado desde siempre”, explicó la Senadora.

Al ser cuestionado sobre la postura panista para retrasar la aprobación de la reforma política del Distrito Federal, el Senador Alejandro Encinas fue tajante:

“Pues para ver qué sacan. Hemos discutido esto durante años, y la verdad es que es una parte de su estrategia política, más en momentos en que todavía no termina la Reforma Energética, y está la negociación de los puestos”.

“Es parte de una estrategia que va ligada a esta muy perversa alianza que vincula la política con los negocios, que tiene el PAN junto con el PRI, en donde están rematando los bienes de la nación”, agregó.

A SACARLA ADELANTE

El Senador Encinas refirió que esta discusión inició desde 1824. Recordó que la primera propuesta de reforma para que el Distrito Federal fuera el estado 32, fue presentada por el entonces Diputado Arnoldo Martínez Verdugo, en 1982, bajo el cobijo del Partido Socialista Unificado de México (PSUM) y el PAN.

Por lo que, dijo, ya es tiempo de construir un acuerdo con bases más firme, para sacar adelante este tema.

Recalcó que se debe de acotar el término del 2015; ya que, todo lo que se refiere al cambio del régimen político entraría en vigor hasta el 2018, pues la elección de una Asamblea facultada para erigirse constituyente tiene que celebrarse en el 2015.

“Además de cerrar un ciclo de discusión que inició en 1824, ya tenemos 190 años discutiendo el tema de la autonomía de la Ciudad de México, es que tendría que elegirse en las elecciones del 2015 una asamblea constituyente, o dotarle a la Asamblea Legislativa para erigirse en congreso constituyente, esa es la parte de la premura”, señaló.

De no aprobarse en este periodo ordinario, dijo, se frustraría. “Podríamos aprobarlo el año que entra pero ya sería muy difícil implementar el proceso electoral”.

Indicó que en este tema no observa “mezquindades” entre los diversos sectores de la izquierda, “yo creo que todos vamos en la misma dirección, yo veo que todos vamos de la mano, caminando juntos”, indicó.

Finalmente, informó que la ruta legislativa es primero entregar el proyecto de dictamen, recibir las observaciones que tengan los grupos parlamentarios, a partir de allí iniciar un proceso de discusión interna de las comisiones, así como de audiencias públicas sobre los temas en donde existan diferencias, y aprobar el dictamen a finales de septiembre o a más tardar en el mes de octubre.