The Huffington Post

FRANCISCO, EL PAPA PECADOR

20/09/2013 - 12:00 am
Argentino, jesuita y liberal. Foto: EFE
Argentino, jesuita y liberal. Foto: EFE

Ciudad de México, 20 de septiembre (SinEmbargo/TheHuffingtonPost).– El Papa Francisco, que en su breve ministerio ha generado gran polémica por su posición liberal, le echó más fuego al tema de los gays y lesbianas esta semana, cuando reafirmó que la iglesia católica tiene todo el derecho a expresar sus opiniones, pero no a “interferir en la espiritualidad” de esta comunidad.

Con estas declaraciones, el Sumo Pontífice reaviva el debate que comenzó él mismo hace unos meses, cuando advirtió que no era nadie para juzgar a los homosexuales.

La entrevista fue publicada por la revista de la Orden de los Jesuitas [La Civiltà Cattolica] pero no de manera discreta. La publicación sale en diferentes idiomas y es distribuida en 16 países y ofrece, tal vez, la perspectiva más amplia y profunda de la visión del Papa Francisco en el polémico tema dentro de la iglesia católica.

El Pontífice hizo la declaración en una amplia entrevista exclusiva con el sacerdote jesuita Antonio Spadaro, director de la revista. El diálogo con Spadaro duró seis horas, a lo largo de tres sesiones el 19, 23 y 29 de agosto.

Es decir: el Papa Francisco quería realmente difundir su posición, que literalmente choca con lo que piensa la iglesia católica mexicana, por ejemplo, que es sumamente conservadora y sobre todo en esos temas.

Los comentarios del Papa Francisco, según los expertos, no rompen con la doctrina de la iglesia católica o su política. Sin embargo mueven el péndulo en una postura más flexible, de menos dogmatismo y censura a más compromiso con la feligresía.

De las declaraciones más relevantes del Papa Francisco en la entrevista, es la definición que hizo de él mismo cuando le preguntan:

–¿Quién es Jorge Mario Bergoglio? –le preguntó su entrevistador. Y él contestó:

–Yo soy un pecador. Esa es la definición más exacta. Y no lo digo como una forma figurativa de hablar o como género literario.

Anteriormente, a bordo del avión papal, cuando regresaba de Brasil –su primer viaje como pontífice a América Latina– el Papa Francisco dejó claro que él no juzgaría a los sacerdotes por su orientación sexual.

“Si alguien es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarle?”, dijo Francisco.

En esa ocasión se le preguntó también al pontífice sobre las versiones noticiosas italianas de que un grupo dentro de la Iglesia intentó extorsionar a otros funcionarios eclesiásticos con pruebas de sus actividades homosexuales.

Según lo publicado el año pasado por algunos medios de comunicación italianos, las denuncias contribuyeron a la decisión de Benedicto XVI de dimitir.

Aunque el Papa insistió en que las enseñanzas sociales católicas piden que los homosexuales sean tratados con dignidad y que no sean marginados, agregó que es muy diferente confabularse para usar información privada y tratar de extorsionar, algo que él no excusará.

“Mucho se ha escrito sobre este ‘lobby de cabildeo gay’”, dijo. “Todavía no he encontrado a nadie en el Vaticano que me muestre una tarjeta de presentación ‘gay’. Dicen que existen”, dijo riendo.

“Creo que cuando alguien es así, hay que distinguir entre el hecho de que alguien sea gay y el hecho de que esté en un ‘lobby de cabildeo’ […] El problema no es tener esa orientación [sexual] […] El problema es aprovecharse de esta orientación para presionar”, agregó.

El Papa Francisco es el primer americano y primer jesuita en llegar a ser papa.

La Compañía de Jesús está considerada como la orden religiosa, reservada y exclusiva para hombres, que existe dentro de la iglesia católica en la actualidad. En más de 500 años de existencia ha enfrentado retos y fases y se define, primordialmente, por la vocación misionera y la educación.

Un tipo fuera de lo común. Foto: EFE
Un tipo fuera de lo común. Foto: EFE

MÁS MUJERES EN LA IGLESIA

En la misma entrevista, el Papa también defendió una “presencia femenina más incisiva en la Iglesia”. Abogó por recurrir más al “genio femenino” en la toma de decisiones importantes.

“Es necesario ampliar los espacios para una presencia femenina más incisiva en la Iglesia… La Iglesia no puede ser ella misma sin la mujer y el papel que ésta desempeña. La mujer es imprescindible para la Iglesia. María, una mujer, es más importante que los obispos”, dijo.

Coincidiendo con la publicación del texto, ayer tuiteó un mensaje desde su cuenta @Pontifex_es:

“Mi forma autoritaria y rápida de tomar decisiones me ha llevado a tener problemas serios y a ser acusado de ultra conservador… con el tiempo he aprendido muchas cosas. Creo que consultar es muy importante”.

–¿Y qué es lo que necesita la Iglesia de hoy según Francisco? –preguntó el entrevistador

–Lo que la Iglesia necesita con mayor urgencia hoy es una capacidad de curar heridas y dar calor a los corazones de los fieles, cercanía, proximidad. Veo a la Iglesia como un hospital de campaña tras una batalla. ¡Qué inútil es preguntarle a un herido si tiene altos el colesterol o el azúcar! Hay que curarle las heridas. Ya hablaremos luego del resto. La Iglesia a veces se ha dejado envolver en pequeñas cosas, en pequeños preceptos. Cuando lo más importante es el anuncio primero: ¡Jesucristo te ha salvado!.

“Los ministros del Evangelio –continuó– deben ser personas capaces de caldear el corazón de las personas, de caminar con ellas en la noche, de saber dialogar e incluso descender a su noche y su oscuridad sin perderse. El pueblo de Dios necesita pastores y no funcionarios ‘clérigos de despacho’ […] En lugar de ser solamente una Iglesia que acoge y recibe manteniendo sus puertas abiertas, busquemos más bien ser una Iglesia que encuentra caminos nuevos, capaz de salir de sí misma yendo hacia el que no la frecuenta, hacia el que se marchó de ella, hacia el indiferente”.

“El que abandonó la Iglesia a veces lo hizo por razones que, si se entienden y valoran bien, pueden ser el inicio de un retorno. Pero es necesario tener audacia valor”, añadió.

EL CABILDO GAY

El pasado 30 de julio, durante el regreso de su viaje a Brasil con motivo de la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud, el Papa dijo a los reporteros que suelen acompañarlo en cada gira, que él no era nadie para juzgar a los homosexuales y que nadie debe marginar a nadie.

“Si una persona es gay y busca al Señor con buena voluntad, quién soy yo para juzgarla”, soltó entonces.

La prensa no pudo sino contrastar esa declaración con una de las últimas que soltó su predecesor, el Benedicto XVI, el 21 de junio de 2012, y en plena Jornada Mundial de la Paz: “Las uniones homosexuales son una grave amenazas para la paz y la justicia”, dijo el hoy Papa en retiro.

Un mes y medio antes, el 17 de junio de 2013, el Papa argentino de 76 años también causó revuelo en la prensa mundial, luego de que medios italianos informaran que había admitido la existencia de un “cabildo gay” dentro de la estructura administrativa más importante y secreta del Vaticano, la Curia.

El líder de la Iglesia católica fue citado al decir que “en la Curia hay en verdad algunos santos, pero también hay una corriente de corrupción.”

Durante una audiencia con grupos religiosos de América Latina y el Caribe, el Papa externó su plan para reformar la Curia romana de la Iglesia y aceptó que llevará tiempo. Esto, como respuesta a los rumores que surgieron desde el inicio mismo de su apostolado y que afirman que la Curia era una instancia tan poderosa, corrupta y secreta, que ni el Papa Benedicto XVI había podido desarmarla.

“Se habla acerca de un ‘cabildo gay’ [gay lobby] y es cierto, existe”, aceptó el obispo de Roma, luego de que datos filtrado antes de la renuncia de Benedicto XVI se difundió que en el Vaticano opera una cúpula sacerdotal homosexual que incumple el sexto mandamiento (prohibición del adulterio, pero ligado en la doctrina a la prohibición de la homosexualidad).

Aunque el Vaticano guardó silencio sobre el tema, el propio lo revivió en su conferencia de prensa del 30 de julio.

“Se escribe tanto del lobby gay en la Santa Sede, pero aún no tengo una carpeta con la identidad de quien sería parte. El problema es hacer lobby de cualquier tendencia: lobby político, lobby masónico y también lobby gay”.

El problema para la Iglesia no es la tendencia, ya que los homosexuales “son hermanos”, insistió.

Los gustos del Papa Francisco:

Escritores:

Fiódor Dostoyevski

Friedrich Hölderlin

Gerard Manley Hopkins

Alessandro Manzoni: sobre todo Los novios, que el Papa dijo haber leído tres veces y estar listo para leer una cuarta.

Músicos:

Wolfgang Amadeus Mozar: Et Incarnatus est de la Misa en Do menor

Ludwig van Beethoven

Johann Sebastian Bach: sobre todo La Pasión según San Mateo, concretamente El llanto de Pedro

Richard Wagner: Tetralogía del Anillo y Parsifal

Películas favoritas:

La Strada (1954), de Federico Fellini

Roma città aperta (1945), de Roberto Rossellini

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas