El inusual color rosa del depredador, que fue descubierto oficialmente en 2012, se debe a una rara mutación genética.
Ciudad de México, 20 de agosto (RT).– Un leopardo extremadamente raro ha sido fotografiado de cerca mientras se alimentaba de una jirafa muerta, gracias a una cámara activada por movimiento instalada en un árbol en una reserva de Sudáfrica.
Alan Watson, propietario de la reserva de vida salvaje Thaba Tholo, y su esposa Lynsey, habían visto al esquivo depredador merodeando por la reserva, pero nunca habían podido captarlo, hasta que instalaron una cámara al lado del cadáver de la jirafa, que había muerto durante una tormenta eléctrica.
El llamado leopardo dorado, también conocido como "leopardo fresa", fue descubierto oficialmente en 2012, en otra reserva, cerca de la frontera con Botsuana. Su color inusual se debe a una rara mutación genética llamada eritrismo, que causa una sobreproducción de pigmentos rojos o una subproducción de pigmentos oscuros.
"Hasta donde yo sé, este es el color más raro de leopardo en el mundo", relató Watson, que ha llamado "Goldie" al animal, recoge Daily Mail.