Matthew Perry, de 51 años de edad, tiene un largo historial con las adiciones. El actor de hecho luchó contra su adición el alcohol y al Vicodin durante las grabaciones de Friends.
Ciudad de México, 20 de mayo (SinEmbargo).– La tan esperada reunión de Friends estrenará el próximo 27 de mayo en el catálogo de HBO Max, plataforma que precisamente este miércoles reveló un emotivo tráiler que ha dejado a algunos fans preocupados.
Muchos pusieron su atención en el tráiler al estado de salud de Matthew Perry (Chandler Bing, en la ficción) quien aparece un poco distante al resto de sus compañeros y permanece callado la mayoría del tiempo en el avance.
Aunque sabemos que un tráiler dice poco de lo que se verá realmente en el programa, lo cierto es que Perry ya había dado muestras previas que alertaban a su público sobre su salud.
Como rescata TMZ, en una entrevista que ofreció junto a Matt LeBlanc y David Schwimmer para People hace unos días, parecía no estra bien durante la entrevista para promocional el especial de HBO Max.
Algunos fanáticos señalaron que al hablar se oía como si arrastrara las palabras, su semblante no lucía bien, y parecía distraído mirando a la distancia.
Matthew Perry, de 51 años de edad, tiene un largo historial con las adiciones. El actor de hecho luchó contra su adición el alcohol y al Vicodin durante las grabaciones de la serie 10 temporadas.
El actor habló de sus problemas de salud en una entrevista también con People donde reveló que en sus peores momentos llegó a ingerir entre 20 y 30 píldoras al día acompañas de vodka.
“Estuve en Friends desde los 24 hasta los 34 años. Estaba en la llama candente de la fama”, dijo. “Los seis estábamos en todas partes todo el tiempo. Desde la perspectiva de un extraño, parecería que lo tenía todo. En realidad, fue un momento muy solitario para mí porque sufría de alcoholismo”, explicó a People en abril del 2000.
“Estaba un poco fuera de lugar en ese momento, en algún lugar entre las temporadas tres y seis”, agregó.
El actor ya era dependiente al alcohol cuando sufrió un accidente en moto acuática en 1997. Para mitigar el dolor le recetaron Vicodin y ahí comenzó su adicción al fármaco.
“No era mi intención tener un problema con eso”, dijo en 2002 para la revista. “Pero desde el principio, me gustó cómo me hacía sentir y quería obtener más”.
En 1997 estuvo en rehabilitación pero no se mantuvo sobrio por mucho tiempo, y en el año 2000 fue diagnosticado con pancreatitis por su abuso con el alcohol.
Sus compañeros de reparto trataron todo el tiempo de ayudarlo, pero no fue hasta el 2001 que él mismo decidió tomar las riendas de sus enfermedades.
“No me volví sobrio porque me apeteciera”, le dijo al New York Time . “Me volví sobrio porque estaba preocupado de morir al día siguiente”.