Mérida, 19 Oct. (Notimex).- En los últimos seis años, más de 150 mil mujeres del país en condiciones alta y muy alta marginación, que son indígenas y están muy alejadas de los centros de población, han sido apoyadas para impulsar proyectos productivos.
María de los Ángeles Elvira Quezada, directora del Programa Organización Productiva para Mujeres Indígenas (POPMI) de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, destacó que ahora el reto de la mujer indígena es vencer el miedo a capacitarse y convertirse en promotora y comercializadora de sus productos.
“Hoy día el reto para las mujeres indígenas es perder el miedo a salir de sus comunidades, comenzar a comercializar sus productos, que se valoren y puedan desarrollar todas sus capacidades”, afirmó la funcionaria en el marco de una gira de trabajo por Yucatán.
Insistió en que uno de los principales problemas que enfrentan los proyectos productivos de grupos organizados de mujeres en el país es la comercialización de los productos.
“De ahí la importancia de promover ferias regionales, donde encuentren espacios para vender sus productos y obtengan ingresos para apoyar el gasto familiar”, resaltó.
Afirmó que en los últimos 12 años, el POPMI ha permitido que “las productoras indígenas hayan mejorado sus ingresos, pero también se sienten menos discriminadas dentro y fuera de sus comunidades y han percibido que valen mucho como mujeres”.
A pesar de la distancia, ellas han aprendido a tomar decisiones sobre sus derechos y recibido capacitación y acompañamiento para desarrollar proyectos exitosos.
Hoy, más mujeres indígenas van asumiendo las oportunidades que se les presentan, pero es una realidad que se debe seguir trabajando con ese sector, ayudarlas a hacerle frente a los retos que exige la sociedad moderna, señaló.
Consideró necesario que las instituciones y autoridades impulsen la comercialización y búsqueda de mercados y estrategias para los productos indígenas, lo mismo que la capacitación y seguimiento de los proyectos para evitar el abandono de los mismos.
Aclaró que los procesos de capacitación para la mujer indígena deben implicar necesariamente la conservación de su identidad, “pues de esa forma siguen descubriendo que son valiosas por su género, como indígenas y que forman parte de la riqueza cultural del país”.
Elvira Quesada presenció la inauguración de la Expo Venta “U’Meyaj Ko’olelo’ob” (El trabajo de las mujeres mayas), que alberga a más de 70 productoras artesanas de 35 grupos de diferentes municipios del interior del estado.
Las indígenas yucatecas ofrecen, del 19 al 21 de octubre, artículos artesanales de henequén, pintura textil, hamacas, bordados a mano y máquina, elaboración de bateas, rebozos, piñatas, bolsos sintéticos, así como conservas de horchata, miel melipona, pan, repostería, hortalizas y huevo orgánico.
