El Alto Representante de la Unión Europea ha incidido en que Ucrania tiene que poder usar los sistemas militares “no solo para frenar las flechas, sino para golpear al arquero”; sin embargo, destacó que cada Estado miembro decidirá las condiciones del armamento que suministra a Kiev.
Bruselas, 18 de noviembre (EuropaPress).- El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha confirmado este lunes que la decisión de Estados Unidos para levantar las restricciones al armamento de largo alcance para golpear a Rusia permitirá a Kiev atacar objetivos hasta 300 kilómetros dentro de territorio ruso.
“La administración Biden ha autorizado el uso de las armas que entrega a Ucrania hasta 300 kilómetros dentro de territorio ruso”, ha asegurado el jefe de la diplomacia europea en rueda de prensa después de la reunión de ministros de Exteriores de la UE, en referencia al giro de Biden para que Ucrania dispare los sistemas ATACMS contra territorio ruso.
“Es menos que nada. No me parece una distancia espectacularmente profunda”, ha valorado el político español, quien se ha convertido en el primer dirigente europeo que habla concretamente sobre la decisión de Washington, que hasta ahora había evitado una confirmación oficial.
Eso sí, Borrell no ha querido entrar en las razones de Biden para dar este paso o por qué la decisión llega después de las elecciones y a pocas semanas de la vuelta de Donald Trump al Despacho Oval.
El Alto Representante ha incidido en que Ucrania tiene que poder usar los sistemas militares “no solo para frenar las flechas, sino para golpear al arquero”, pero ha descartado que vaya a haber una decisión unánime de la UE, reiterando que corresponde a cada Estado miembro decidir las condiciones del armamento que suministra a Kiev.
La decisión de Washington traslada el foco a Francia y Alemania, Estados miembros que suministran este tipo de armamento a Ucrania. Por el momento el Ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, ha indicado que el Presidente galo, Emmanuel Macron, ya ha dicho que es una opción “a considerar”, apuntando que “no hay nada nuevo bajo el sol”, respecto al paso de Estados Unidos y que París pueda adoptar esta misma decisión.
De lado de Alemania, el Ejecutivo de Olaf Scholz ha reiterado su negativa a entregar a Ucrania misiles de largo alcance tipo Taurus, aunque existen diferencias evidentes en el seno de la coalición, ya que los Verdes defienden que Ucrania pueda defenderse y la Ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, ha considerado “importante” la decisión de Biden en este momento de la guerra.
Cabe recordar que la decisión del Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de permitir que Ucrania ataque a Rusia fue recibida con ominosas advertencias de Moscú, la condena de China, un atisbo de amenaza desde Kiev y aprobación de algunos aliados occidentales. Sin embargo, el cambio en la política de Biden añadió un factor nuevo e incierto, pero potencialmente crucial, a la guerra en la víspera de que se cumplan mil días de conflicto.
La noticia del cambio de Biden llegó el mismo día en que un misil balístico ruso con municiones de racimo impactó en una zona residencial de Sumy, una ciudad del norte de Ucrania, y mató a 11 personas, incluidos dos niños, además de herir a 84.
Otro ataque con misiles rusos provocó incendios el lunes en dos bloques de apartamentos en Odesa, en el sur de Ucrania. Al menos ocho personas murieron y 18 resultaron heridas, incluido un niño, dijo el Gobernador regional, Oleh Kiper.
Washington está flexibilizando los límites sobre lo que Ucrania puede atacar con armamento estadounidense, informaron funcionarios estadounidenses a The Associated Press el domingo, después de meses de descartarlo por temor a escalar el conflicto y provocar un enfrentamiento directo entre Rusia y la OTAN.
El alcance de las nuevas directrices no está claro. Pero el cambio se produjo después de que Estados Unidos, Corea del Sur y la OTAN dijeran recientemente que hay tropas norcoreanas en Rusia, aparentemente desplegadas para ayudar al ejército ruso a expulsar a las tropas ucranianas de la región fronteriza rusa de Kursk.
Rusia también ha hecho retroceder poco a poco al ejército ucraniano, en inferioridad numérica, en la región oriental de Donetsk. También ha llevado a cabo una campaña aérea devastadora y mortal contra áreas civiles en Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, remitió este lunes a los periodistas a una declaración del Presidente ruso, Vladímir Putin, en septiembre, en la que dijo que permitir a Ucrania apuntar a Rusia elevaría significativamente las apuestas en el conflicto.
Esto cambiaría “la naturaleza misma del conflicto de manera dramática”, dijo Putin en ese momento. “Esto significaría que los países de la OTAN —Estados Unidos y los países europeos— están en guerra con Rusia”.