Los candidatos presidenciales y sus partidos políticos han colocado a los programas sociales como uno de los ejes de su campaña, incluso el PAN, que en 2020 la mayoría de sus diputados votó en contra de elevarlos a rango constitucional.
Ciudad de México, 18 de marzo (SinEmbargo).- Los programas sociales de este sexenio, señalados por la oposición y sus expresidentes de ser instrumentos de clientelismo, se han colocado en la agenda de los candidatos presidenciales, especialmente de Xóchitl Gálvez Ruiz, quien ahora busca junto con su partido (PAN) capitalizar los apoyos y adjudicarse la creación de algunos de ellos, como la pensión para adultos mayores, que ya funcionaba desde 2001 en la Ciudad de México cuando la entidad era gobernada por Andrés Manuel López Obrador.
“Por mis hijos y el recuerdo de mis ancestros, hago este juramento ante las leyes de mi país, doy fe pública de este compromiso ante ustedes ciudadanos y ciudadanas y los beneficiarios de programas sociales, yo, Xóchitl Gálvez, cuando asuma el cargo de Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos no se eliminarán los programas sociales que son un derecho de las mexicanas y los mexicanos”, prometió la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México en su primer día de campaña al firmar con sangre su compromiso.
Morena se va y los programas sociales se quedan.#MxSinMiedo pic.twitter.com/7hU53ALAwy
— Xóchitl Gálvez Ruiz (@XochitlGalvez) March 5, 2024
El PAN, que junto con el PRD y PRI forman parte de la alianza opositora, lanzó en esta campaña presidencial un spot en donde se ve al presidente del blanquiazul, Marko Cortés, afirmando que los programas de adultos mayores iniciaron en el Gobierno de Vicente Fox Quesada (2000-2006).
No obstante, desde 2001 se implementó en la capital del país el “Programa de Apoyo Alimentario, Atención Médica y Medicamentos Gratuitos para Adultos Mayores de 70 años, residentes en el Distrito Federal”, según lo publicado en la entonces Gaceta Oficial del Distrito Federal.
A nivel federal, este apoyo se implementó dos años después, en 2003, pero se focalizaba en las personas mayores de 60 años de zonas rurales y de alta marginación que no fueran beneficiarios del IMSS o ISSSTE, es decir, no era universal como ahora.
Incluso los dos expresidentes de México que llegaron al poder abanderados por el PAN, Vicente Fox y Felipe Calderón, criticaron en su momento la pensión para adultos mayores.
“Prometer pensiones o apoyos a la gente de la tercera edad, o prometer pensiones y jubilaciones a funcionarios o a trabajadores del sector público, sin fundamentos en materia de ingresos, es llevar a nuestro país y a la economía a la quiebra”, declaró Fox Quesada el 15 de marzo de 2005.
Calderón Hinojosa, por su parte, criticó por primera vez este apoyo social en febrero de 2006. “Es irresponsable prometer que se van a dar pensiones a todos los adultos mayores cuando la economía no aguanta una medida así”, dijo refiriéndose a la propuesta de su contrincante Andrés Manuel López Obrador, quien entonces competía junto con él por la Presidencia de México.
De acuerdo con especialistas en política económica-social, los programas sociales federales han sido clave en este sexenio y, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHCP), se han invertido hasta el momento 2.73 billones de pesos.
“Los programas sociales tienen mucho apoyo y aceptación social, la población se ha beneficiado claramente de las transferencias directas a los diferentes grupos sociales y por eso todos los candidatos lo consideran como parte de su oferta política”, consideró el profesor Enrique Provencio Durazo, director e investigador del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED) de la UNAM.
Este 2024, año en que se llevarán a cabo las elecciones más grandes de México, con 20 mil 708 cargos en juego, incluyendo el de Presidente, alrededor de 27 millones 970 mil 133 personas accederán a los apoyos federales a partir de un financiamiento histórico de 745 mil 813 millones de pesos, 27 por ciento más respecto a la inversión del 2023.
Carlos Torres Rosas, secretario técnico del Gabinete de la Presidencia y coordinador general de Programas para el Bienestar, aseguró en enero pasado que de los 35 millones de hogares que hay en el país, el 79 por ciento recibirá al menos un programa.
A nivel de Gobierno federal hay 121 programas sociales y, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Pública de Desarrollo Social (Coneval), todos fueron un factor que influyó en la reducción de la población en situación de pobreza que se vio entre 2020 y 2022.
De acuerdo con datos del organismo, entre 2018 y 2022 la población en situación de pobreza multidimensional a nivel nacional pasó de 41.9 por ciento (51.9 millones) a 36.3 por ciento (46.8 millones), mientras que el porcentaje de la población en situación de pobreza extrema permaneció en niveles similares entre 2018 y 2022: 7.0 por ciento (8.7 millones) en 2018 y 7.1 por ciento (9.1 millones) en 2022.
Otra cifra que ejemplifica la importancia que le ha dado esta administración a los programas sociales son las de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2022 del Inegi, la cual arrojó que a nivel nacional los hogares beneficiarios de programas sociales ascendieron al 34 por ciento.
Estos datos se suman a los reportados en septiembre de 2023 por Pablo Cotler Ávalos, académico y economista a cargo del Nuevo Estudio de la Industria Prendaria. En una entrevista que dio en exclusiva al diario El Financiero reveló una caída en el consumo de servicios prendarios originado principalmente por el reparto de los programas sociales del Gobierno federal.
Es decir, los programas sociales de la llamada Cuarta Transformación se han convertido en un tema relevante, que no sólo han coadyuvado en la popularidad del Presidente Andrés Manuel López Obrador, como lo muestra la encuesta de El Financiero publicada en febrero (55 por ciento de los mexicanos tiene una opinión favorable de los apoyos sociales frente al 29 por ciento que no), también algunos serán inamovibles, como las pensiones a adultos mayores y las becas, que en 2020 se elevaron a rango constitucional.
Así lo reconoció en diciembre pasado Enrique de la Madrid, responsable de las mesas para construir el Proyecto de Gobierno de la candidata Xóchitl Gálvez. En una entrevista para el diario El País lamentó que estos apoyos a distintos sectores de la población sean intocables debido a que los ciudadanos se han vuelto dependientes de estos recursos.
“Está claro que la población se beneficia de esas transferencias e incluso en algunos casos los programas sociales jugaron un rol importante en la reducción de la pobreza, aunque ésta principalmente se redujo por el aumento de los salarios”, destacó el profesor Enrique Provencio, de la UNAM, pero advirtió que los candidatos deben revisar la efectividad de estos programas.
XÓCHITL GÁLVEZ
Como en cada elección presidencial, los distintos candidatos se decantan en promesas hacia los ciudadanos y este 2024 no es la excepción. Por ejemplo, la candidata Xóchitl Gálvez ha actuado a contracorriente de Vicente Fox Quesada, quien en su sexenio la nombró directora general de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, actualmente INPI.
En una entrevista que el expresidente dio en julio pasado al periodista Fernando del Collado para el programa “Tragaluz”, del canal de YouTube de Latinus, llamó a la candidata de los partidos PAN, PRI y PRD a quitar los programas sociales, la mayoría de ellos impulsados por la actual administración de Andrés Manuel López Obrador.
“Ojalá y Xóchitl [Gálvez] nos cumpla de que los huevones no caben en el Gobierno y tampoco en el país. Ya se acabó de que estén recibiendo programas sociales: ‘¡A trabajar cabrones!’, como dice Xóchitl”, pidió Fox Quesada.
La petición no sólo fue rechazada por la abanderada de la coalición Fuerza y Corazón por México, sino que desde que inició su campaña selló con sangre su promesa de no eliminar los programas sociales y ha reiterado en distintas ocasiones que ella, a diferencia de la mayoría de sus compañeros de partido, votó a favor de elevarlos a rango constitucional cuando era Senadora.
Efectivamente, Xóchitl Gálvez sí votó a favor de la reforma al artículo cuarto constitucional en marzo de 2020, pero propuso una reserva –la cual fue rechazada– que incluía que en cada Presupuesto de Egresos se destinara una partida especial para la generación y desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas, así como para la consolidación de un sistema nacional de apoyo a emprendedores.
Reservas_Sen_Xochitl_Galvez_Art4o_ConstitucionalCuando se votó la reforma en la Cámara de Diputados, la mayoría de los legisladores del PAN, su partido, votó en contra de elevar a rango constitucional las pensiones para adultos mayores, las becas para estudiantes y los apoyos para personas con discapacidad; mientras que en el Senado hubo 91 votos a favor, uno en contra (Marco Antonio Gama Basarte, PAN) y una abstención (Emilio Álvarez Icaza).
Ahora la candidata Gálvez Ruiz y los partidos que conforman su coalición (PAN-PRI-PRD) intentan capitalizar la popularidad de los programa sociales y han incluido entre sus promesas de campaña los apoyos para estudiantes, madres solteras y adultos mayores.
A continuación algunas de sus propuestas:
–Reducir a 60 años la edad para recibir la pensión universal de los adultos mayores; actualmente es a partir de los 65 años.
–Conservar el programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”, pero este cambiará el nombre a “SISI”, sí estudio y sí trabajo. En este programa los jóvenes de 18 a 29 años no sólo recibirán los cursos y se capacitarán laboralmente, también tendrán acceso a las “Aldeas del Saber”.
–Un apoyo de 5 mil pesos mensuales a las mujeres que “viven en situación complicada y difícil” a través de una “tarjeta mexicana”.
–Crear la “Beca Libertad” para que los jóvenes concluyan sus estudios, especialmente niñas indígenas y en zonas rurales. Actualmente existe la Beca Benito Juárez que da apoyos a estudiantes de Educación Básica, Media Superior y Superior.
–Escuelas de Tiempo Completo transformadas en centros de aprendizaje y convivencia, enfocadas en las necesidades de la nueva economía digital.
CLAUDIA SHEINBAUM
Claudia Sheinbaum Pardo, candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia (Morena-PT-PVEM), busca dar continuidad a la política social de la actual administración y mejorar algunos de esos programas, una de las peticiones que han hecho diversos especialistas a los candidatos.
“Desde el punto de vista del electorado necesitamos exigirles más a los candidatos, la fundamentación de cómo se van a financiar esos programas; necesitamos que transparenten ese gasto social porque muchos de los programas sociales no tienen claro su padrón”, detalló Enrique Provencio Durazo, investigador de la UNAM.
A continuación se enlistan algunas de las propuestas de la candidata Sheinbaum Pardo:
–Continuar con la Pensión para Adultos Mayos de 65 años y aumentar el monto cada año.
–Una nueva pensión para mujeres de 60 a 64 años, equivalente a la mitad del apoyo para adultos mayores, que hoy es de 6 mil pesos bimestrales.
Las mujeres de 60 a 64 años recibirán un apoyo bimestral equivalente a la mitad de la pensión de 65 y más. pic.twitter.com/E5wgUtkJmo
— Dra. Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) March 2, 2024
–Beca universal para estudiantes de Educación Básica (preescolar, primaria y secundaria) en escuelas públicas, replicando el programa “Mi beca para Empezar” de la Ciudad de México.
–Salarios justos para los maestros del país.
–Apoyo a las ciencias básicas, naturales, sociales y humanidades, vinculándolas con áreas y sectores prioritarios del país.
–Programa 40 semanas y 1000 días para la prevención de la salud de mujeres embarazadas y los primeros 1000 días de vida de la primera infancia.
–Crear un Sistema Nacional de Cuidados en el DIF.
–Abrir Centros de Educación Inicial para mujeres jornaleras y mujeres de la maquila; los primeros se construirán en Ciudad Juarez.
JORGE ÁLVAREZ MÁYNEZ
Jorge Álvarez Máynez, candidato del partido Movimiento Ciudadano, también ha presentado diversas propuestas de política social, aunque en algunas no ha detallado cómo se llevarán a cabo:
–Modelo educativo basado en valores democráticos desarrollado con la participación de profesores, padres de familia, especialistas y pedagogos.
–Incremento de becas para posgrados y promoción de intercambios internacionales.
¿Cómo lograremos que un millón de jóvenes entren a la universidad en un solo sexenio por primera vez en la historia? pic.twitter.com/VVne2ddnRx
— Jorge Álvarez Máynez (@AlvarezMaynez) March 14, 2024
–Transformar el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONACyT) en un órgano autónomo con gobierno colegiado, libre de interferencias políticas.
–Continuidad al aumento de salario mínimo.
–Vivienda accesible para los millenials.