El equipo de transición del Gobernador electo de Chihuahua, Javier Corral Jurado, ha iniciado los primeros trabajos de acercamiento para tomar la batuta del Gobierno estatal, aún en manos del priista César Duarte Jáquez. El reto no será fácil, la entidad atraviesa por una serie de crisis que abarcan desde lo económico hasta la seguridad. ¿Cómo es que se realiza esta transición?
Ciudad de México, 17 de julio (SinEmbargo).– Francisco Barrio Terrazas es el coordinador del equipo de transición del Gobernador electo Javier Corral Jurado. Acepta que hasta el momento los acercamientos con los funcionarios del Gobierno de César Duarte Jáquez se han hecho en un ambiente de cordialidad, pese a que existen rumores de que se están eliminando registros que después podrían ser claves para la auditar a la administración saliente. Nada de eso le consta, asegura, pero de ser el caso tomarían las acciones correspondientes.
El ex Gobernador de Chihuahua por el Partido Acción Nacional (PAN) aseguró que desde que culminó su administración en 1998 las cosas han cambiado en el estado. La gestión de la deuda marcará el periodo que ahora inicia Corral, y seguramente, advirtió, a varias de las administraciones siguientes.
Duarte Jáquez no terminará su periodo de Gobierno con la tranquilidad de quien va de salida. Aunque él mismo rehusó que intentaría nombrar al siguiente Fiscal Anticorrupción de la entidad antes de dejar el cargo, el Presidente Enrique Peña Nieto mandó a vetar esta posibilidad contemplada dentro de las leyes estatales aprobadas. A través de la Procuraduría General de la República (PGR) esto quedó la inconstitucionalidad de esa legislación fue solicitada a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Asimismo, Duarte sale en medio de una impugnación de las elecciones interpuesta por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y hay quienes aseguran que el partido no hubiera emprendido tal decisión sin el consentimiento del aún Gobernador.
Pero el proceso no tiene más marcha atrás. El pasado 12 de julio, Barrio Terrazas se reunió con Raúl Chávez, Secretario de la Contraloría, entidad encargada de la transición.
En una breve entrevista con SinEmbargo Francisco Barrio Terrazas habla de la situación en la que reciben el estado.
—¿A diferencia de cuándo usted fue Gobernador, qué retos encontrará la futura administración panista cuando asuma el cargo?
—Yo creo que ahorita el reto más grande que enfrentará la nueva administración es la situación de desastre financiero que enfrenta el Gobierno de Chihuahua. La deuda por lo que sabemos supera los 50 mil millones de pesos. El puro servicio de la deuda ya es un hoyo grandísimo. El Gobierno estatal por lo que vemos iniciará en unas condiciones muy complicadas en lo financiero.
—¿Cómo marcará esta realidad a la nueva gestión?
—Sin recursos, con un montón de compromisos que tiene que cumplir, con ingresos futuros ya comprometidos. Yo creo que se va ver muy limitado en sus posibilidades de maniobra. Y me temo que es algo que no se va limitar a esta administración sino a varias, en donde lo que se va a poder hacer a favor de los chihuahuenses se va ver limitado por los actos en los que incurrió esta administración y la anterior.
—Además de la situación económica, ¿qué otros rezagos deberán ser subsanados con mayor énfasis?
—Hay otras cuestiones. Esta el tema de seguridad, que se ha pretendido manejar como que ya es algo muy resuelto y consolidado. La verdad es que no lo es tanto. Hay todavía grandes porciones del territorio nacional que viven una situación de inseguridad bastante crítica. Ese es otro reto fuerte que va tener que enfrentar el nuevo Gobierno. Hoy en día este problema es más severo en la sierra, y en general, en la parte oeste del Estado.
—¿Cómo interpretan ustedes la impugnación de Duarte a los resultados de las elecciones?
—Bueno, técnicamente, quién impugnó fue el PRI. Podría presumirse que esta impugnación no se hace sin la anuencia del Gobernador. Yo le digo que lo que nosotros percibimos de las primeras reuniones es ya un ánimo de ellos de que esto tiene que seguir adelante, porque va haber un cambio de gobierno. Percibo que ellos ya se han ido haciendo a la idea de que esto no tiene vuelta de hoja.
—En otros estados, como Quintana Roo, se rumora la eliminación de registros por la administración saliente para entorpecer a quienes recién tomarán sus cargos. ¿Algo de esto ha sucedido en Chihuahua?
—Acá hemos escuchado hablar mucho de eso. Destrucción de archivos, sustitución de documentos, etcétera. Pero bueno, todo eso no tiene más valor que el de rumorología. No tenemos ahorita una evidencia tangible de que realmente esté ocurriendo. Yo creo que en una organización tan grande es prácticamente imposible rehacer toda la documentación. Y hay cosas que ya no son susceptibles de modificar. Es el caso de las facturas, que hoy cualquier contribuyente de México las encontramos en una base de datos, ahí están y son las mismas que hace un año, dos o tres.
—¿Qué trabajos de la transición han empezado a realizar ustedes?
—El proceso de entrega recepción está apenas iniciando. Hemos tenido hasta este momento sólo dos reuniones: una con el Secretario de Gobierno [Mario Trevizo], simplemente para reiterar ambas partes la voluntad de proceder con este proceso. Ahí mismo a través de él se concertó una segunda reunión que se tuvo con el Secretario de la Contraloría, que es –de acuerdo con la Ley de entrega y recepción– la dependencia responsable de conducir este proceso. Entonces, tuvimos esta reunión repasamos a detalle todo el proceso. Los lineamientos de la Ley, los formatos, cuestiones de metodología básicamente. Se nos hizo entrega un paquete de información que tiene que ver específicamente con eso. Nos entregaron organigramas, cosas así, pero yo le diría que estamos una etapa sumamente preliminar. Sería prematuro decir cómo va el proceso, porque estrictamente hablando todavía no arranca.
—Pero seguro existe una estrategia de cómo van a realizar la transición. ¿Qué tienen pensado?
—Se han integrado varios gabinetes y varias coordinaciones. Estos son un gabinete Político y de Seguridad Social; Desarrollo Social; Desarrollo Económico; Infraestructura; y otro de Finanzas y Administración. Cada uno de estos gabinetes va incorporar o hacerse responsable de un determinado número de áreas del Gobierno. Se les está pidiendo que los responsables de las áreas que trabajen en varias vertientes. Y es la de ir elaborando un diagnóstico, que tiene que considerar elementos internos y externos. Tienen que ir hablando con las dependencias. Revisar documentos. Pero luego, también hay que hablar con los usuarios de ciertos servicios del Gobierno.
—¿Qué pasará una vez ya hechos los diagnósticos?
—Se ha pedido a estos equipos que dediquen parte de su esfuerzo a hacer una búsqueda de identificación de mejores prácticas. Puede haber algunas de nuestro estado, del momento actual o de algún otro momento. Si encontramos algo que valga la pena lo rescataremos. También se puede tratar de buenas prácticas de otra parte del país o del mundo. Un tercer elemento del plan de este equipo de transición es la interacción con actores relevantes de la sociedad, actores políticos, sociales y económicos, que requieren una atención. Vamos a tener una gran demanda de reuniones.
—En esta conformación de los cinco gabinetes me dice que ya hay puestos designados. ¿Cuántas designaciones ya han sido concretadas?
—No podría comentarle sobre los responsables de los gabinetes, pero el Gobernador electo tiene mucho interés en cuidar una serie de equilibrios. Él hizo un ofrecimiento de trabajar con un equipo paritario de hombres y mujeres. Tenemos que cuidar que haya una pluralidad política y social. Tenemos también que cuidar los equilibrios del Estado. Eso nos lleva a que unos nombramientos después de puedan modificar, por lo que aún no podemos adelantar nombres.
