El anuncio de la muerte fue hecha en primer lugar por el secretario personal de García a los medios que esperaban en los exteriores del hospital y casi de inmediato fue confirmado por el presidenteMartín Vizcarra, en su cuenta oficial en Twitter.
Alan García era investigado por lavado de activos por el Caso Odebrecht. Sobre él pesaba, desde noviembre del año pasado, una orden de impedimento de salida del país por 18 meses.
Lima, 17 abr (EFE).- El ex Presidente peruano Alan García murió durante la mañana de este miércoles en un hospital de Lima mientras era operado de un disparo en la cabeza que se dio cuando iba a ser detenido por orden judicial por supuestos delitos de corrupción vinculados al caso Odebrecht.
Fuentes del partido Aprista y el Presidente de Perú, Martín Vizcarra, confirmaron que el dos veces gobernante peruano (1985-1990 y 2006-2011) murió mientras era operado en el hospital Casimiro Ulloa de Lima, a donde fue trasladado de urgencia por agentes de la Policía que habían llegado a su casa para detenerlo.
El anuncio de la muerte fue hecha en primer lugar por el secretario personal de García, Ricardo Pinedo, a los medios que esperaban en los exteriores del hospital.
Casi de inmediato fue confirmado por el presidente Vizcarra, en su cuenta oficial en Twitter.
“Consternado por el fallecimiento del ex Presidente Alan García. Envío mis condolencias a su familia y seres queridos”, señaló Vizcarra.
Alan García murió a los 69 años de edad tras haberse disparado en la cabeza cuando iba a ser detenido por orden judicial y luego de haber sufrido tres paros cardiorrespiratorios.
El director del hospital, Enrique Gutiérrez, señaló que el ex gobernante presentaba un disparo de arma de fuego en el cráneo “con orificio de entrada y salida” y que todos los médicos del Casimiro Ulloa, en el distrito limeño de Miraflores, participaron en la operación para intentar salvarle la vida.
Alan García fue ingresado en medio de gran confusión en el hospital, a donde fue trasladado por la Policía que fue a detenerlo a su casa.
Según testigos consultados por la televisión peruana, García estaba cubierto por una manta roja y poco después llegó al lugar uno de sus hijos y representantes del Partido Aprista Peruano (PAP).
El suceso se produjo cuando agentes de la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad acudieron a la casa del político, sobre el que pesa desde finales del año pasado una orden de impedimento de salida del país, para someterlo a una detención provisional por diez días ordenada por el Poder Judicial.
Junto a García, también se ordenó la detención de Luis Nava, secretario presidencial bajo el Gobierno del líder del partido aprista, y Miguel Atala, ambos estrechos colaboradores del expresidente y señalados como sus testaferros.
Además, del exministro de Transportes y Comunicaciones y de Vivienda y Construcción, Enrique Cornejo, quien horas después se entregó a la Justicia, y de otros cinco exfuncionarios de su segundo gobierno.
Apenas ayer, el ex Presidente peruano dio una entrevista a RRP y consideró que no había elementos para que el Ministerio Público solicite una orden de detención o prisión preventiva en su contra.
“Todo es especulación. Con especulaciones no se priva a una persona de la libertad, ni siquiera de manera preliminar. […] A mí me parece que eso sería una gran injusticia”, expresó el ex Jefe del Estado en diálogo con RPP.
También había descartado la posibilidad de solicitar asilo, tal como hizo en noviembre pasado.
García era investigado por lavado de activos por el Caso Odebrecht. Sobre él pesaba, desde noviembre del año pasado, una orden de impedimento de salida del país por 18 meses.
“Estoy impedido de salir del país, es una forma de prisión. Estoy de alguna manera atado, tampoco me ofende”, dijo al respecto.
La fiscalía incluyó a Luis Nava, ex secretario de la Presidencia en el segundo gobierno de García, en la investigación por el Caso Odebrecht. Según su hipótesis, este habría recibido más de 4 millones de dólares de la constructora. Según el portal IDL-Reporteros, el dinero fue transferido a Miguel Atala, quien fue vicepresidente de Petro-Perú durante el mandato de García.
El ex mandatario se defendió así de los recientes hallazgos hechos por la Fiscalía, al encontrar que Odebrecht consignó más de cuatro millones de dólares en cuentas de Luis Nava, quien fue secretario de Presidencia en el segundo mandato de García (2006-2011), y de su hijo José Antonio Nava.
EX MINISTRO DE GARCÍA SE ENTREGA
Este mismo miércoles, el ex Ministro peruano Enrique Cornejo se entregó este miércoles a la Justicia tras ser incluido en una orden de detención preliminar durante 10 días que también se dictó contra el ex Presidente Alan García.
Cornejo acudió a una emisora local y, tras enterarse de que agentes de la Policía lo esperaban a las afueras, informó que se iba a entregar sin oponer resistencia.
“Estoy aquí tranquilo, seguro de decir la verdad y para colaborar con la policía”, señaló a periodistas que lo esperaban junto a los agentes.
El exministro de Vivienda y Construcción y de Transportes y Comunicaciones del régimen de García señaló que se presentó ante las autoridades “con el ánimo de explicar” las acusaciones de presunta corrupción que se le hacen.
“Soy inocente”, enfatizó antes de agregar que es “muy lamentable” la decisión de García de dispararse un tiro en la cabeza, cuando los agentes policiales iban a detenerlo en su casa.
“Lo lamento, y mi solidaridad con su familia”, señaló de manera escueta.