Ciudad de México, 17 de marzo (SinEmbargo).-Algunas familias eligen adoptar a algún cachorro, otras prefieren un gato y unas más se inclinan por los peces, por ejemplo. Pero esta familia en particular, que vive en Sidney, rescató a una urraca desde las primeras semanas de nacida. La nombraron “Penguin”, palabra en inglés que significa “pingüino” en español, por la apariencia tan parecida que tiene con este animal del Antártico.
La familia que vive en Newport encontró al animal en 2013, uno de los hijos la vio abandonada en el suelo con apenas algunas semanas de haber nacido y la llevaron a casa para que se recuperara de manera segura.
Acudieron con un veterinario que les aconsejó que el ave siguiera una dieta y posteriormente ya nunca se despegó de los Bloom. Los hijos adoran a la urraca y la tratan como si fuera una mascota normal, como si se tratara de un pirata con su perico.
La familia decidió capturar en imágenes cómo es vivir con Penguin ya que el ave gusta de la pasta de dientes, de cantar, comer carne de spaguetti y dormir junto a ellos.
El señor Bloom es un fotógrafo profesional, por lo que sobra añadir que las fotografías son un deleite entre belleza y curiosidad. Las imágenes con esta exótica mascota les dio popularidad en las redes sociales cuando abrieron su cuenta en la red social Instagram donde comparten casi cada momento que viven con Penguin y aseguran que representan una gran alegría en la familia.
“Penguin Bloom, rescatada por Noah de bebé y criada por nosotros. Libre de volar, pero ama el hogar tanto como nosotros. Se dice que ocasionalmente se mete a casa durante las noches”, dice la descripción de la cuenta de Instagram del ave.
Los Bloom creen que Penguin cayó de un árbol cerca de donde fue encontrado y probablemente fue atacada por otras aves, ya que tenía sangre. El amigo veterinario de la familia les dijo que sería muy difícil reintroducir al ave a su hábitat natural, ya que las demás aves son muy territoriales.
Aún así se encargaron de enseñarle a volar lo cual encontraron muy divertido, aunque también gusta de posarse en los hombros de los integrantes de la familia, jugar y recoger cosas. Incluso explican que cuando los niños juegan con la pelota, Penguin vuela con ellos como si también estuviera jugando.
Por otro lado, las urracas también son conocidas por tener su lado afectivo, por lo que no sorprende que actúe como un animal completamente domesticado con los Bloom.
