No sólo las reformas propuestas por el gobierno federal en manos de Enrique Peña Nieto son “de gran calado” también hay noticias de “gran calado” como las que acontecieron del sábado pasado en las primeras horas del domingo, en dos puntos diferentes del mundo pero que sin duda alguna han roto todos los récords imaginables, uno de ellos se gestaba en la capital de España en Madrid y el otro en el Centro de Readaptación de El Altiplano en el Estado de México.
En México el capo más grande de la droga ha vuelto recargado, ha puesto en evidencia la fragilidad del gobierno de Enrique Peña Nieto y los discursos triunfalistas y de control contra la delincuencia, drogas y en general contra la violencia en México, que son operados desde Bucareli en voz de Osorio Chong y que se rompen cual frágil cristal “ mal templado”, el discurso desde el gobierno es tirado por la sagacidad y poderío de Guzmán Loera “El Chapo”, este personaje que había sido recluido en Puente Grande cuando lo detuvieron en Guatemala y que se fugara en un carrito de lavandería en Jalisco en enero de 2001, y que lo ha hecho de nuevo, pero ahora de la “Cárcel de Máxima Seguridad en México”.
Una nueva hazaña se ha realizado en México en manos del capo de capos, “El Chapo” Guzmán, se ha fugado mediante un túnel construido bajo encomienda, con tanques de oxígeno, escaleras, pvc, los topos del narco han realizado un trabajo fastuoso y el gobierno mexicano una vez más ha quedado en ridículo frente al mundo, lo grave de esta fuga no es en sí “El Chapo”, sino las consecuencias inmediatas que desatará su salida, con él fuera, la organización que comanda a quien llaman “El General” viene a cobrar las que le deben, el gobierno y las células desertoras del Cártel de Sinaloa, los cárteles que han aprovechado los meses en que estuviera en prisión tendrán que andar con pies de plomo y sin duda la violencia en México al igual que el dólar van a la alza.
A manera de concatenar dos historia que no tienen nada que ver una con la otra, pero que no quiero dejar pasar por la importancia, la similitud en grandeza de sus hazañas y sin duda porque son las principales columnas de este fin de semana pasado en el mundo, es por ello que me he dado la licencia de denominar esta columna “Ojalá el Chapo no sea Madridista”, pues la casualidad de su fuga se da justo unas horas antes de que se hiciera oficial el traspaso del gran “Iker Casillas” del Real Madrid al Club Oporto, seguramente “El Chapo” Guzmán estaría viendo en un televisor las emotivas palabras y una de las más sentidas despedidas de él que quizá sea hasta hoy el “ mejor portero del mundo”.
En este lado del mundo los españoles, los madridistas y el mundo entero del fútbol se encuentran consternados por la repentina marcha del que fuera el capitán blanco por más de 5 años y que perteneciera al club por más de 25 años, Iker Casillas comenzaba a jugar en el club merengue en la temporada 90 – 91 y para 1993 “El Chapo” Guzmán era detenido en Guatemala y extraditado a México donde sería puesto en prisión en Puente Grande, Jalisco, seguramente el capo vería las hazañas y proezas de Casillas desde el penal.
En España las dos noticias han caído como balde de agua helada, por un lado, la marcha del capitán blanco y por el otro la fuga de “El Chapo” pues en España se ha dado puntual seguimiento a células de los cárteles mexicanos que intentan e intentarán tomar España como uno de sus principales centros para distribución de droga en el viejo continente, basta recordar la detención del integrante del Cártel de Sinaloa Jaime Antonio Mandujano Eudave en agosto de 2014 con 148 mil kilos de cocaína en el aeropuerto Adolfo Suárez, también como parte de la Operación Guadaña, el 3 de septiembre de 2010, la policía detuvo en Madrid a “El Viejo”, mexicano de 50 años que disfrutaba de un impresionante nivel de vida, tenía cinco mansiones en España y disponía de una flotilla de autos exclusivos, el narcotraficante era la cabeza de un complejo entramado de tráfico de cocaína transportada en contenedores procedentes de Argentina, en el que estaban implicadas células de colombianos, españoles y un grupo de transportistas gallegos.
También no debemos olvidar la detención del primo del Chapo en Madrid, Jesús Gutiérrez Guzmán y de Rafael Humberto Celaya Valenzuela, Samuel Zazueta Valenzuela y Jesús Gonzalo Palazuelos Soto, que fueron arrestados en las inmediaciones de los hoteles madrileños en los que se hospedaban. Los responsables policiales de la investigación precisaron que habían interceptado en el puerto de Algeciras (Cádiz, sur de España) un contenedor que transportaba 373 kilos de cocaína de “gran pureza”, que partió de un puerto de Brasil para su distribución en diferentes puntos de Europa operado por el Cartel de Sinaloa.
Justamente cuando se daba la primera fuga del capo de capos del penal de Puente Grande en un carrito de lavandería, Guzmán Loera ganaba su libertad tras la fuga, y Casillas perdía la titularidad de la portería en manos de César Sánchez, pero ese año “El Chapo” Guzmán seguramente vería aquel partido de Liga de Campeones disputada en Glasgow en donde tras la lesión del cancerbero Cesar Sánchez, Iker tomaría la portería del club blanco para nunca más dejarla.
En el año de 2014 ambos personajes en polos opuestos, en la dualidad del bien y del mal coincidirían una vez más en la historia moderna del mundo, Iker Casillas “El Santo” perdería la titularidad de la portería para los partidos de la Liga LFP y Guzmán Loera “El Chapo” Guzmán perdería su libertad tras ser detenido en Sinaloa.
El pasado fin de semana se daría la última coincidencia entre el lado bueno y el malo, Iker Casillas se despedía de la afición madridista con la voz entrecortada, con lágrimas en los ojos y con un visible y profundo dolor en el alma, se iba del Real Madrid uno de los más grandes iconos madridistas, el arquero más grande de la historia de la casa blanca, “El Santo”, “el bueno” ha marchado en busca de nuevos retos, en el otro polo el “malo” Joaquín Guzmán Loera alias “El Chapo” se ha marchado también, pero del penal de máxima seguridad en México, la otra “casa blanca” también lamentará esta fuga y sin duda tendrá repercusiones en la vida política de México y del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Desde este humilde espacio, mi más sentido agradecimiento por tantos años de pasión, de grandes atajadas, de lecciones de humildad, de grandeza y sobre todo por permitirnos a los amantes del futbol, disfrutar cada uno de esos momentos etéreos debajo de la portería del club merengue, la historia sin duda te recordará “por ser una buena persona” como lo has pedido, pero más allá de eso, se te recordará por ser el más grande, por ser “El Santo”, por ser el portero del Mejor Club del Mundo. Gracias Capitán Iker Casillas, ejemplo de muchas generaciones.
Del lado opuesto, “El General”, Guzmán seguirás haciendo historia, demostrando la fragilidad institucional y sin duda también se le recordará como el capo ha puesto en jaque al gobierno mexicano y al mundo.
Nos vemos la próxima semana.
@nexoestudios