Vecinos de la colonia Reforma, en Tijuana, detectaron grietas en sus casas desde hace dos semanas. Entre viernes y sábado 23 viviendas de la zona fueron desalojadas por personal de Protección Civil de Baja California por el riesgo de que colapsaran ya que están asentadas en una zona de alto riesgo.

La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California (CEDH) solicitó al alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum Buenrostro, que aplique medidas cautelares para los vecinos afectados por el derrumbe, pues aunque no hubo personas lesionadas se estima que en total hay 42 adultos afectados y 31 menores de edad.

Tijuana, 15 de julio (EFE/Zeta/SinEmbargo).– Un total de 23 viviendas fueron desalojadas el viernes y el sábado, y cuatro colapsaron en la ladera de un cerro en  Tijuana, Baja California, debido a varios deslizamientos de tierra reportados, sin que hasta el momento se reporten lesionados.

De acuerdo al director de Protección Civil de este municipio, José Rito Portugal, las condiciones inestables del terreno pueden ser la causa de los derrumbes.

“Vemos un talud de 20 metros, hay muchos factores que pudieron detonar esto, preliminarmente y de manera ocular, lo que estamos observando es algo natural”, declaró, agregando que esperarán los resultados de las pruebas periciales.

De acuerdo al funcionario, los vecinos de la colonia Reforma detectaron grietas en sus casas desde hace dos semanas, pero no lo notificaron a las autoridades hasta el viernes 13 de julio, cuando las fisuras comenzaron a hacerse más grandes.

Como acción preventiva, inspectores de la Dirección de Protección Civil acudieron y colocaron etiquetas de color rojo en 11 hogares que estaban en peligro de colapsar, y advirtiendo a sus moradores del riesgo que corrían si decidían quedarse.

Al día siguiente, colocaron señales de advertencia en otras nueve casas y desalojaron a sus habitantes.Durante ese día, el Gobierno Municipal instaló un Centro de Operaciones de Emergencia Móvil.

Pocas horas después se produjo el derrumbe de las primeras cuatro casas, a las que se sumaron otras 18 viviendas durante el resto de la tarde y la noche del sábado. La mañana de este domingo, otra casa colapsó.

Ninguna persona resultó lesionado, aunque algunos de los pobladores solicitaron la presencia policial porque aseguran que han comenzado a darse actos de rapiña.

Uno de los vecinos relató a Efe que por la noche de este sábado “gente extraña rondó por los restos de la propiedad y tuve el temor de ser asaltado cuando trasladaba mis pertenencias a casa de un familiar”.

Ante esto, Rito Portugal aseguró hoy que la Policía Municipal ya se encuentra en el lugar, mientras que la dependencia a su cargo vigila la zona del desastre.

Asimismo, personal del Ejército Mexicano acudió a la demarcación para aplicar el Plan DN-III-E, que consiste en prestar labores de auxilio a los habitantes afectados por el derrumbe.

Mientras, las cuadrillas de trabajadores de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) arribaron para reinstalar el servicio de agua y electricidad que fueron suspendidos.

Por su parte, autoridades de la delegación municipal informaron que ya se encuentra habilitado un refugio temporal para 25 personas, instalado en un centro comunitario cercano, aunque por el momento no ha habido solicitantes.

CEDH EXIGE PROTECCIÓN A VECINOS

La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California (CEDH) solicitó al alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum Buenrostro, que aplique medidas cautelares para los vecinos afectados por el derrumbe de las cuatro casas en la calle Literatos.

En un comunicado la institución informó que desde el día del suceso, el viernes 13 de julio, se abrió el expediente 702/18, en el que se le exige al alcalde que “gire instrucciones a fin de que se implementen las acciones necesarias para salvaguardar la vida, integridad y seguridad personal de los afectados, la propiedad privada, la infraestructura, el equipamiento urbano, ante la posibilidad de un desastre producido por causas de origen natural o humano”.

Aunado a ello se exige también que “dicte sus amables instrucciones para que se revisen, inspeccionen y valores los riesgos y daños, a fin de que se aprueben todas las medidas necesarias, para disminuir el impacto, incluida la reubicación de personas y el retorno de las condiciones de seguridad”.

De acuerdo con Protección Civil Municipal, al momento se tienen 23 casas etiquetadas en rojo, por el suceso no se presentó ningún lesionado y en total de afectados 42 son adultos y 31 menores de edad.

–Con información de EFE y Zeta