La propuesta inició en septiembre de 2017 con 24 murales y para agosto de este año se entregarán 63 murales en total con distintos tipos de expresión de arte. “Lo que queremos brindar a la Central de Abasto y a todos los visitantes y personas que trabajan aquí es que puedan conocer todo lo que el arte tiene que ofrecerles que puedan seleccionar y tener la oportunidad de decir cuál es su favorito y cuál no y que se vuelvan críticos de arte”, dijo Itze González, curadora del proyecto.
Ciudad de México, 15 de julio (SinEmbargo).- La Central de Abasto ya no es sólo un lugar de intercambio comercial sino un espacio de arte al aire libre que llena de motivos para reflexionar y de mucho color a diversos de sus muros, esto en busca de rescatar ese espacio, tener otra percepción de este icónico lugar y ayudar a generar un cambio social.
“Central de muros” reunió a más de 50 artistas nacionales e internacionales que al final de la segunda etapa entregarán 63 murales, que representan el total de ambas fases, con una extensión promedio de los murales de 20 a 26 metros de largo por 6.60 de alto que sumarán aproximadamente 9 mil metros cuadrados cubiertos con murales de diferentes técnicas.
“Justo lo que queremos brindar a la Central de Abasto y a todos los visitantes y personas que trabajan aquí es que puedan conocer todo lo que el arte tiene que ofrecerles que puedan seleccionar y tener la oportunidad de decir cuál es su favorito y cuál no y que se vuelvan críticos de arte, queremos generar ese cambio en las personas en donde se empiecen a autoeducar”, explicó Itze González, curadora del proyecto.
“La educación no pertenece al sistema, pertenece a los individuos y tenemos que empezar cada uno por lograr esa educación que queremos lejos de toda esa situación que esta viviendo el mundo con Estados unidos, con lo que está pasando en Europa y en distintos lugares”, agregó.
De acuerdo con González, México tiene la oportunidad de demostrar que posee una cultura muy rica y que sus habitantes siempre han sido muy humanos, además de crear una corriente nueva y una propuesta “en donde podamos decir que el mundo y la sociedad cambia gracias nosotros”.
ARTE COMO AGENTE DE CAMBIO
En la primera fase se entregaron 24 murales como parte del 35 aniversario de la Central de Abasto, de acuerdo con sus organizadores, el cambio en el lugar fue “impactante”. Recorridos realizados por académicos de la UAM y diversas personas a tan sólo dos meses de la entrega revelaron una reducción de basura en las zonas donde se encuentran las paredes intervenidas por artistas, además de la participación y cuidado de las personas que conviven diariamente en el lugar.
“Comprobamos que el arte es un agente de cambio y una herramienta para la transformación social”, afirmó la curadora del proyecto.
Itze González compartió que los niños se involucraron en el proyecto lo que cambió su percepción y los acercó al arte a través de los talleres que les brindan y algunos muy emocionados mencionan que de grandes serán artistas. Para Gonzalez esto “significa que el futuro de México tiene esperanza y estamos tratando de trabajar para eso”.
“Es sumamente importante para nosotros que se den cuenta que el arte es un transformador y que a través de esto la educación se está acercando a ellos, que tienen un espacio mucho más cuidado y más bonito y les da una visión diferente acerca de lo que puede ser una calidad de vida”.
“El arte es un medio de transformación y se puede llevar a lo magno, queremos transformar no sólo la central de Abasto sino queremos transformar México”, aseguró Itze.
Santiago Espinoza de los Monteros, curador, destaca que las obras también cumplen una función comunicativa en la que se cuenta una historia y se transmiten ideas.
“El asunto de los murales en la Central de Abasto a sido realmente un detonador de muchísimas cosas muy positivas, desde una suerte de un nuevo tipo de comunicación colectiva que se adopta por parte de quienes integran todo esta gran comunidad, es decir, tenemos en México una gran tradición de muralismo… y son intentos muy contundentes de comunicar y de contar una historia”, refirió Espinoza de los Monteros.
LA ONU EN LA CENTRAL
El proyecto llamó la atención de la Organización de Naciones Unidas (ONU) debido a que esta iniciativa, que de acuerdo con Katina Argueta, directora de País del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), “conjuga dos propuestas el desarrollo sostenible como política que lucha contra la pobreza y desigualdad y promoviendo la sostenibilidad, que por tanto coloca en el centro de la agenda política la vigencia de los derechos humanos y el arte como una política estratégica difusora de elementos comunes que resulta esencial para el avance de la sociedad”.
La propuesta pone en contacto el arte y el desarrollo para concientizar a la ciudadanía, Argueta habló de “arte urbano como herramienta de sensibilización y de cambio”.
“El arte es, entre otras cosas, una bella excusa para soñar con un mundo mejor”, afirmó Katina Argueta.
Giancarlo Summa, representante del Centro de Información de las Naciones Unidas para México, Cuba y República Dominicana (CINU), contó que la colaboración nació de manera “casual pero con mucho entusiasmo” debido a que tras escuchar que en la Central de Abasto había comenzado un programa de murales se acercó a Sergio Palacios, Administrador general del fideicomiso para la construcción y operación de la Central de Abasto, para participar.”Nosotros como ONU siempre estamos buscando formas de hablar y popularizar los objetivos de desarrollo sostenible”, expresó.
Así el arte se convirtió en una manera innovadora de poder hablar de los temas de la agenda de la ONU, en la que se tocan los retos y problemas del planeta como alimentación, reducción de desigualdades, educación de calidad y medio ambiente, por mencionar algunos.
Itze González destacó la importancia de que “una organización internacional tan importante volteara a ver el tema del trabajo de los artistas y de los gestores culturales que estamos en esto”.
Además, hace unos días, Giancarlo Summa, otorgó un reconocimiento al proyecto, a la Central de Abasto y a los artistas que colaboraron y plasmaron uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU en sus murales. Summa destacó que esta propuesta es “extraordinaria y que nunca se había hecho algo así en el mundo”.
LOS ARTISTAS
Chula Records participó en la primera fase de este proyecto con un mural titulado “Diablera” y para la segunda etapa participa con una pieza titulada de “La Luchadora” inspirado en el cuarto paso de la ONU que trata sobre la educación de calidad. “El mural es especial porque también incluye un taller para los niños de la central de abasto sobre arte comunitario… y se van a agregar los resultados al mural” contó el joven.
“Yo siempre he pensado que una de las funciones del arte es romper pero romper para construir ya sea ideologías o sistemas, entonces que traigas esto a la central de abasto vienes a irrumpir en el sistema en el que se maneja la central de abasto y puedes generar cambios positivos, eso creo que es la principal consecuencia buena que puede tener este proyecto en la central de abasto”, dijo a Magazine.
Edgar Solorzano participó con la pieza abstracta titulada “Gente” que en sus palabras “habla de este sentimiento de anonimidad que hay en la ciudad y cómo hasta que no te acercas a las personas no las identificas como que son iguales a ti y no planteas un nivel de comunicación horizontal”.
Para Solorzano esta propuesta de arte ayuda a hacer más dignos los espacios y “darle arte a la gente y que no se quede sólo en las galerías”.
Otro de los creadores de estas piezas de arte que cubren los muros de la Central de Abasto es Leonardo Monsoi quien frente a su mural explicó que su pieza “tiene que ver con esta cuestión de devolverle a la tierra lo que hemos tomado de ella y responde un poco a esta cuestión de recordar como éramos antes y cómo tratábamos a la tierra, cómo convivíamos en armonía con la naturaleza”.
Monsoi explicó que la percepción de la gente del lugar ha cambiado debido a que la gente pasa por el lugar y puede observar piezas de distintos artistas y de interpretarlas de distinta forma; agregó que no sólo las personas del lugar han cambiado su percepción sino que él ha podido conocer la labor de la gente que convive a diario en esa zona.
“El hecho de ver este estilo de vida cómo llega la gente temprano y trabaja de sol a sombra, uno hace lo mismo pero desde otra perspectiva, me parece bastante interesante conocer los diferentes rubros y las diferentes labores que se generan en la sociedad más en un lugar como este tan grande donde hay tanta gente”, contó.
CENTRAL DE ABASTO COMO PUNTO TURÍSTICO
Sergio Palacios Trejo, Administrador general del fideicomiso para la construcción y operación de la Central de Abasto,, señaló que los murales serán un punto de atracción importante para la gente que acude a la central para realizar compras o vender sus productos pero también para aquellos que quieran acudir solamente a observar el arte lo que ayudará a la economía del lugar.
“Este proyecto va a ser un detonante económico de la Central porque yo te garantizo que toda la gente que venga a ver los murales se va a meter a los pasillos y por lo menos va a comprar una botella de agua; todo eso es economía”, aseguró.
Respecto a la seguridad de la zona Palacios dijo que los murales ayudan a mejorar el ambiente y a cambiar la percepción, además dijo que al comparar la población flotante de la Central de Abasto de 500 mil personas más 90 mil que trabajan allí, con los delitos cometidos (133 en un año) se comete menos de uno al día. “La central de abasto no es tan insegura como la pintan sino que más bien es un tema de percepción que se ha generado a lo largo de los años”, afirmó.
“Precisamente en el tema de seguridad los murales ayudan mucho a que cambie el entorno y la opinión que hay sobre la seguridad en la central de Abasto , es fundamental la participación del arte en este tipo de cambio de conductas y que venga más publico va a generar esa situación”.