VIVEN 57% DE LOS MUNICIPIOS SIN BANCOS

13/12/2011 - 12:00 am

¿Qué le parecería tener que viajar tres horas de ida y tres de vuelta para sacar dinero de su tarjeta de débito en un cajero?¿Se imagina lejos de un banco donde pueda depositar o disponer de su dinero? ¿Se imagina vivir sin tarjeta de crédito?

O también, ¿imagine que para recibir dinero de algún programa social, como Oportunidades, o envíos de remesas de sus familiares, tuviera que trasladarse por horas para recibir el pago y que luego de recibir el dinero se lo tenga que gastar ahí, en el poblado al que acudió y no en su propia comunidad; porque ante la falta de servicios financieros, donde usted reside no puede comprar casi nada? ¿Se imagina vivir excluido de servicios financieros?

Pues en estas condiciones viven más de 7 millones de mexicanos, ubicados en mil 404 municipios en toda la República.

Una de las consecuencias de la falta de instrumentos de ahorro por la exclusión financiera es el mega fraude cometido en contra de 35 mil personas en Oaxaca. Ciudadanos que, al no tener un banco a la mano, depositaron su dinero en cajas de ahorro sin regulación; el resultado es que esas entidades resultaron ser defraudadoras y se quedaron con 3 mil 515 millones de pesos de saldo.

“Estos afectados están ahí porque no tienen institución bancaria cerca. Es responsabilidad de la Comisión Nacional Bancaria, por no incentivar a los bancos que, además, no ven ahí un nicho de mercado importante”, dice a SinEmbargo.mx la diputada federal Sofía Castro, autora de la iniciativa  para modificar el artículo cuarto transitorio de la Ley Federal de Telecomunicaciones, para que Telecomunicaciones de México (Telecomm) opere como red pública y con ello pueda llevar los servicios financieros a más zonas marginadas.

“El acceso a servicios financieros formales incentiva el desarrollo económico y social. La inclusión financiera siempre ha estado en lo más alto de la agenda de desarrollo de México.

Sin embargo, la escasa educación financiera, insuficiente confianza en instituciones de crédito y ahorro, así como su  limitado acceso y la falta de diversificación de productos y servicios constituyen obstáculos a superar”, consideró Gloria M. Grandolini, directora del Banco Mundial (BM) para México y Colombia, en un comunicado publicado el 1 de diciembre por el organismo.

“El uso de productos financieros formales (transacciones, depósitos, créditos, transferencias, etcétera), sustituirá el uso de aquellos servicios informales que tienden a ser más caros (como casas de empeños, préstamos entre particulares, entre otros)”, afirmó el BM.

Al referirse a la inclusión financiera, el presidente de México resaltó su importancia durante la clausura del Foro Global de Inclusión Financiera y Primer Foro de la Inclusión Financiera del G-20.

“La inclusión financiera es una vía para alcanzar mayor justicia social”, expresó.

Este año el presidente anunció dos nuevas herramientas: pago de transacciones por celular y la tarjeta de banco para los beneficiarios del programa social Oportunidades.

Pendiente está darle servicios financieros a quienes carecen de ellos o que no van a ser incluidos en las tarjetas de oportunidades.

Telecomm ya comenzó a trabajar en ello, con un proyecto piloto. El problema es que el tipo de localidad donde va a trabajar es sólo una de las más de 29 mil que hay en el país.

 

Sin bancos, más de la mitad de los mexicanos

Sólo 43% de los municipios de México, mil 052, están cubiertos por una sucursal bancaria, banca de desarrollo, cooperativas o microfinancieras. Las demás, mil 404, más de la mitad del país, carecen de cualquiera. Esa cifra equivale al 57% de los municipios.

La región Sur-Sureste, compuesta por Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Campeche, Veracruz, Yucatán y Quintana Roo, es la que cuenta con menos sucursales de instituciones financieras y está, con 1.31 por cada 10 mil adultos, por debajo del promedio nacional, que es de 1.77 sucursales.

Aunque son los municipios rurales los más castigados por la falta de servicios financieros autorizados, hasta el cierre del año pasado aún se registraban 11 municipios urbanos –catalogados así a partir de tener más de 50 mil habitantes– sin sucursales. Dicha situación predomina en cuatro municipios urbanos chiapanecos, el resto están distribuidos en el Estado de México, Chihuahua, Morelos, Sonora, Veracruz, Yucatán y Puebla.

“En México existen 76.7 millones de adultos, un 10% de ellos no tienen posibilidad de tener acceso a servicios financieros. En los municipios rurales se observa que sólo el 11 por ciento de los adultos tiene posibilidad de acudir a una sucursal”, dice el Reporte de Inclusión Financiera 2.

 

Un decreto que excluye a Telecomm

Al concluir el Foro Global de Inclusión Financiera y el Primer Foro de la Inclusión financiera del G-20, realizado en Cancún, el presidente Calderón anunció la creación del Consejo Nacional de Inclusión Financiera.

El 3 de octubre apareció publicado en el Diario Oficial de la Federación que se había creado “como una instancia de consulta, asesoría y coordinación, cuyo objeto será proponer medidas para la planeación, formulación, instrumentación, ejecución y seguimiento de una Política Nacional de Inclusión Financiera”.

De él forman parte el secretario de Hacienda y Crédito Público; el presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros; el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores; el presidente de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas; el presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro; el secretario Ejecutivo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario; el tesorero de la Federación, y el gobernador del Banco de México.

Curiosamente, en el decreto no aparece Telecomm. La Comisión Nacional Bancaria y de Valores ya los invitó para recibir su punto de vista, dice Garza.

 

El sueño…

Aníbal Bustillo tiene un sueño: que con las nuevas tecnologías móviles los servicios financieros lleguen a las poblaciones más lejanas.

En enero de 2010 nació el proyecto “Diseño de un Modelo de Negocio para la Transferencia de Dinero Electrónico para la Población no Bancarizada en México”, después de hablar Bustillo con el director de Telégrafos, Javier Lizárraga Galindo, e intercambiar puntos de vista sobre movilidad y nomadismo.

Bustillo ha presentado en diversos foros su proyecto de telefonía móvil para recibir y hacer pagos, usarlo como sistema de monedero electrónico, mediante el aprovechamiento de las antenas de Telecomm.

“La cobertura poblacional de Telecomm tiene las siguientes características: 1) el 28% de sus oficinas telegráficas se localizan en poblaciones que no tienen sucursales bancarias; 2) el 100% de sus puntos remotos temporales se concentran en zonas rurales sin presencia bancaria; 3) el 58% de sus oficinas se encuentran en poblaciones con menos de 20 mil habitantes. En otros términos, a pesar que Telecomm cubre amplias zonas semiurbanas y rurales, aún carece de presencia en aproximadamente 56% de los municipios que no tienen sucursales bancarias. Es decir, existe un claro déficit de cobertura en comunidades rurales”, expone en el estudio del mismo nombre que el proyecto, elaborado por Bustillo, Armando Maldonado y Alejandro Arranz.

“Por otro lado, los datos relacionados con los servicios financieros indican lo siguiente: 1) El 64% de los municipios del país no cuenta con sucursales bancarias; 2) El 96% de los municipios rurales no tienen sucursales bancarias; 3) El 70% de la población económicamente activa no está bancarizada; 4) El 36% de la población es pobre, se concentra principalmente en zonas rurales, posee pocos activos, su nivel de escolaridad es bajo, y enfrenta severas dificultades para ingresar a la economía formal. Dicho en forma breve: hay un problema severo de exclusión financiera”, se lee en el mismo estudio.

En 817 de ellos no hay sucursales bancarias ni presencia de oficinas Telecomm, pero milagrosamente sí cuentan con cobertura de telefonía celular, elemento imprescindible para instrumentar una estrategia tecnológica de dinero móvil. Por tanto, las personas con las características socioeconómicas indicadas anteriormente y que habitan en estos 817 municipios son el segmento meta de este proyecto.

Para llevar servicios sin hacer oficinas, una manera costosa e ineficiente, detalla el estudio, se instalaría una red de alianzas con agentes minoristas: las misceláneas, tiendas de víveres, estanquillos de lotería, gasolineras y farmacias, y para no tratar individualmente con cada agente minorista, Telecomm podría establecer convenios con administradores de agentes minoristas.

“Mientras más redes de comisionistas se vayan incorporando al esquema, más cobertura de nuestro segmento meta se alcanzará”.

Un proyecto similar ya está en marcha, pero sin la participación de los autores de este proyecto.

Es un proyecto surgido de la iniciativa de la diputada Sofía Castro y en el cual ya trabaja Hernán Garza, director de Comercialización de Telecomm.

El funcionario explica que la dinámica de cobertura de las oficinas de Telecomm es abrir en lugares remotos, llegar donde no llegan los bancos. “El rol de Telecomm es cubrir zonas apartadas y es un reto”, dice Garza.

“No podemos poner en todos lados, es incosteable, es de locos”, añade.

“Es apalancarnos en tecnología, es donde entra pago móvil”, esa la opción, agrega.

Desde abril Telecomm puede operar redes de telecomunicaciones. Servicios bancarios en comunidades, servicios financieros básicos, gracias a un decreto.

Antes de determinar cómo acercar vía móvil los servicios financieros a comunidades marginadas, se hicieron cinco propuestas. Se escogió Santiago Nuyoo, en Oaxaca.

De acuerdo con el Reporte de Inclusión Financiera, el municipio tiene una población adulta de mil 486 personas. Es ideal para ser piloto: Carece de sucursales, cajeros bancarios, tarjetas de crédito o débito y terminales punto de venta.

Una de las razones para empezar a trabajar en el municipio oaxaqueño es que el anterior presidente municipal se los pidió y construyó una oficina para Telecomm, dice Garza.

El funcionario dice que son siete poblaciones dispersas con diferentes cantidades de habitantes, desde 400 hasta 150.

Por ello no habrá servicio de celular en todas. “Sería inviable”.

Será un piloto y se busca que sea oficina sustentable, aunque carezca del número de habitantes necesarios, 10 mil.

Lo que podría hacerla autosustentable son mil 500 transacciones al mes. Sería meterse ya al comercio entre particulares, los teléfonos se convertirían en monederos electrónicos gracias a la infraestructura de telecomunicaciones de Telecomm. Actualmente sus oficinas son para recibir remesas, ser corresponsales de los siete bancos más importantes que operan en México o receptoras del programa social Oportunidades. “Es meterse en el tejido de la economía”, dice.

Un problema que enfrentarán en Santiago Nuyoo es que hay jóvenes de menos de 18 años que ya trabajan y usan el celular, pero no pueden acceder a una cuenta en el banco y no podrían usar el monedero electrónico.

Otro de los factores a revisar es el cobro de comisión por pago móvil y hasta de cuánto pueden ser las transacciones autorizadas.

Con un permiso experimental trabajarían así de tres a seis meses. Se usarían 400 teléfonos GSM tanto para comerciantes como para población económicamente activa. La idea es usar teléfonos baratos para que los aparatos, en el futuro, no sean inhibidores de habilitación de pago móvil.

El objetivo es que les convenga pagar por el servicio y les resulte más barato pagar una comisión, pero evitarse los largos desplazamientos.

El siguiente paso es probar el uso de monedero electrónico donde sí haya señal telefónica, pero carezcan de servicios financieros.

El proyecto, de avanzar como se desea, significaría que esas localidades abandonadas de servicios financieros y bancos, 29 mil 797, tendrían más oportunidades de servicio. Porque Garza lo reconoce, no todas alcanzarían con Telecomm, aunque es posible usar equipo de Rural Sat para pagos móviles con celular.

Ya existe otro proyecto de celular para pagar. Lo anunció el presidente Felipe Calderón el 1 de octubre pasado.

Es para 3.5 millones de usuarios de Oportunidades, de los seis millones y medio totales del programa, quienes a través del teléfono celular pueden hacer sus compras.

“Si tienen que ir al súper, desde su teléfono a la hora de ir al cajero, ustedes mismos con el cajero van a poder poner un programita que dice ‘páguese al Oxxo o a la Comercial Mexicana’, etcétera, 350 pesos ó 400, para pagar el súper, en fin”.

 

Diconsa y Oportunidades

El 30 de noviembre el presidente Felipe Calderón visitó el municipio de Guachochi, en Chihuahua. Ahí presentó un nuevo servicio financiero, la tarjeta bancaria, para los usuarios de Oportunidades, 6.5 millones de familias.

“Con esta tarjeta, que va a tener cada señora de Oportunidades, esta tarjeta dice que ustedes tienen una cuenta en un banco y cuando necesiten retirar dinero pueden ir al banco pueden ir a la tienda Conasupo pueden ir a la oficina de Telégrafos, ahora Telecomm, y pueden retirar el dinero que tengan en su tarjeta”.

Un avance presentado en un municipio que aunque fue destacado por ser el segundo más pobre en el Informe Financiero de la CNBV aparece como semiurbano, con una sucursal bancaria, dos cajeros, 31 terminales de pago por ventanilla, 591 tarjetas de crédito y 1991 de débito.

Existen 23 mil 572 tiendas comunitarias, de 200 a 2 mil 500 habitantes, con alta y muy alta marginación; 12 están en Guachochi, Chihuahua, en tanto que Santiago Nuyoo tiene cuatro.

El proyecto de usar las oficinas de Telecomm ya existe. El de usar las tiendas Diconsa forma parte de un proyecto financiado desde finales de 2008 por la fundación Bill y Melinda Gates.

Diconsa tiene 22 mil tiendas ubicadas en comunidades donde viven poblaciones con escasos recursos.

De acuerdo con la página de la Fundación, “Diconsa cree que las tiendas también podría servir como una poderosa plataforma para ofrecer prestaciones de asistencia social y las cuentas de ahorro para la población rural pobre”.

En 2008, esa Fundación a través de su iniciativa “Servicios Financieros para los Pobres” puso en marcha un programa piloto para ofrecer beneficios en efectivo, principalmente del programa social de Oportunidades, a través de las tiendas.

El programa llega a 5 millones de mexicanos, 60% de los cuales se estima viven en zonas rurales mientras en su mayoría los centros de distribución son urbanos. Para quienes no viven en las ciudades deben viajar horas para recibirlo, dice.

“Para muchos, es un viaje costoso que dura un día completo. El programa piloto, que comenzó con seis sitios de prueba, ha demostrado beneficios inmediatos para los beneficiarios y propietarios de tiendas Diconsa. En lugar de viajar muchos kilómetros para recoger sus pagos en un día fijo, los beneficiarios tienen ahora la conveniencia de recogerlos a minutos de la casa en cualquiera de los cinco días durante la semana de distribución designados”.

De acuerdo con datos recogidos por la Fundación Bill y Melinda Gates entre los beneficiarios, en su mayoría mujeres, el nuevo sistema de pago les ahorró entre tres a seis horas de viaje y más de 30 pesos por viaje realizado.

Además, los dueños de las tiendas Diconsa salieron ganando al vender a quienes cobraron mediante el programa.

“Para lanzar el programa en todas las zonas rurales, ahora Diconsa necesita instalar servicios de Internet y los teléfonos de muchas de sus tiendas para apoyar dispositivos de punto de venta, que administran distribución de pagos y permitir a los comerciantes para confirmar la identidad de los beneficiarios con el pulgar y el análisis biométricos, tarjetas inteligentes codificados.

El proyecto forma parte de los trabajos del Banco Mundial con el gobierno mexicano para abatir la exclusión financiera. Su costo es de 209 millones de dólares, de los cuales 100 millones son un préstamo del organismo.

“El BM viene trabajando con el gobierno de México en la evolución del sector de las instituciones de crédito y ahorro desde el año 2001”.

 

Los contras

Bustillo lamenta que su proyecto no haya sido tomado para ser usado en Santiago Nuyoo. “Nuestra contribución quedó a nivel de diseño del modelo operativo, aunque se desarrolló un prototipo con estudiantes del ITAM. Por alguna razón desconocida, Telecomm decidió usar una solución de una empresa de India”, dice el ejecutivo de Technomadic.

A pesar de que su proyecto propone usar los celulares como monederos electrónicos, dice que ningún banco o telefónica se le ha acercado.

Cuatro días después del decreto de inclusión financiera, América Móvil, Banamex, Inbursa y Citi anunciaron una alianza comercial para operar una empresa operadora de pagos móviles por celular.

“Mi opinión es que se siguen fortaleciendo los monopolios actuales y las decisiones que se toman a nivel gobierno federal, no ayudan en nada al desarrollo de tecnología propia y a la creación de empresas de base tecnológica”, afirma.

A pesar de que los bancos han comenzado a presumir sus monederos electrónicos en los teléfonos, observa a la exclusión igual.

“Solamente podrán hacer uso de dinero móvil en tiendas como Oxxo o Comercial Mexicana. No hay incremento en la cobertura de servicios financieros. Las personas que tiene que desplazarse varias horas para poder cobrar su dinero, van a seguir igual. La cobertura es para 3.5 millones cuando la población que recibe ayuda del programa oportunidades es mayor”, concluye.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas