Ahora, una serie de funcionarios públicos de carrera prestarán testimonio en las vistas de la Cámara de Representantes en las que se decidirá si corresponde hacerle un juicio político al Presidente, jurando decir la verdad, no lo que quiere oír Donald Trump.
Los demócratas tratan de demostrar que el mandatario estadounidense procuró extorsionar a otro país, Ucrania, para forzarlo a investigar supuestas irregularidades de un rival suyo, Joe Biden. Pero incluso si la Cámara Baja hace de Trump el tercer Presidente que enfrente un juicio político en Estados Unidos, pocos esperan que el Senado, controlado por los republicanos, lo destituya.
Washington, 13 de noviembre (EFE/AP).– Algunos han pasado por los comités de la Cámara Baja que investigan al Presidente estadounidense, Donald Trump, y otros se resisten a hacerlo, pero todos ellos tienen un papel clave en la pesquisa sobre las presiones a Ucrania que promete derivar en un juicio político contra el mandatario.
Además de Trump y el Presidente ucraniano Vladímir Zelenski, ocho funcionarios y ex funcionarios de Estados Unidos han marcado la indagación sobre si el mandatario abusó de su poder al pedir a Ucrania que investigara a uno de sus rivales políticos, el ex Vicepresidente Joe Biden.
Estos son los protagonistas del caso de Ucrania, que hoy entra en una fase pública con la primera audiencia abierta de la investigación en la Cámara Baja:
– BILL TAYLOR Y GEORGE KENT, LA VOZ DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO
Dos diplomáticos que aún siguen en el Departamento de Estado son hoy los primeros en testificar ante las cámaras en la pesquisa sobre Ucrania, semanas después de comparecer en privado en la Cámara Baja.
Taylor es el Embajador interino de EU en Ucrania, y su testimonio en octubre fue uno de los más reveladores de la pesquisa hasta ahora. Aseguró que cuando asumió su cargo el pasado junio, se dio cuenta de que en Washington había un canal paralelo e “informal” para manejar la relación con Kiev.
También fue uno de los primeros en asegurar que EU condicionó dos cosas -la entrega a Ucrania de 400 millones de dólares en ayuda militar y la programación de una reunión en la Casa Blanca entre Trump y Zelenski- a un compromiso de Kiev de investigar a Biden y los demócratas, algo que luego confirmaron media docena de testigos.
Kent, por su parte, es un Subsecretario de Estado adjunto de EU encargado de la política hacia Ucrania, y en su testimonio a puerta cerrada afirmó que el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, actuó bajo órdenes de Trump para “congelar toda la ayuda de seguridad a Ucrania” para lograr la investigación a Biden.
– MARIE YOVANOVITCH, LA EMBAJADORA EXPULSADA
La segunda audiencia pública la protagonizará este viernes Yovanovitch, que hasta el pasado mayo fue la embajadora de EU en Ucrania y ha acusado a Trump de presionar para expulsarla del cargo.
En su comparecencia a puerta cerrada en octubre, Yovanovitch describió su despido como fruto de una “campaña coordinada” en su contra e insinuó que pudo tener que ver con los intereses financieros en Ucrania del abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, que “peligraban con la política anticorrupción” que ella lideraba.
Aunque pidió una excedencia tras su expulsión, Yovanovitch sigue formando parte del servicio exterior de EU Su despido generó incomodidad en las filas del Departamento de Estado y tuvo mucho que ver con la renuncia de Michael McKinley, un destacado asesor del titular de Exteriores, Mike Pompeo.
– ALEXANDER VINDMAN, EL TESTIGO PRESENCIAL
La comparecencia en octubre de este teniente coronel del Ejército desbarató el argumento de Trump de que todos los testigos de la investigación tenían información “de segunda o tercera mano” sobre sus presiones a Ucrania.
Vindman, el principal experto en Ucrania del Consejo de Seguridad Nacional (NSC, en inglés) de la Casa Blanca, escuchó personalmente la llamada del pasado 25 de julio en la que Trump pidió a Zelenski que investigara a Biden.
El militar alertó a sus superiores por considerar que esa petición “no era adecuada”, y también escuchó a Sondland decir que no habría reunión con Trump hasta que Ucrania cumpliera con ello.
– GORDON SONDLAND, EL RELATO CAMBIANTE
El testimonio del Embajador ante la UE a mediados de octubre generó mucha expectación porque Sondland formó parte del “canal paralelo” que redefinió este año la política hacia Ucrania.
Junto al Secretario de Energía Rick Perry y el enviado especial para Ucrania, Kurt Volker, Sondland formó un eje conocido como “los tres amigos” que, siguiendo órdenes de Trump, coordinaba la política hacia Kiev con el abogado personal del Presidente, Rudy Giuliani.
El interés por Sondland ha aumentado porque, tras negar cualquier negligencia en su comparecencia inicial, la semana pasada dijo a los investigadores que el resto de testimonios le habían “refrescado la memoria” y reconoció que él mismo comunicó en septiembre a Kiev que no les entregarían la ayuda hasta que investigaran a los demócratas.
– RUDY GIULIANI, EL ARTÍFICE EN LA SOMBRA
Guiado quizá por motivos electorales o intereses financieros, Giuliani empezó este año a instigar la teoría de que el ex Vicepresidente Joe Biden incurrió en corrupción en Ucrania cuando aún estaba en el poder en 2016, y empezó a coordinar en la sombra una política paralela hacia el país, según la investigación.
El abogado personal de Trump y ex Alcalde de Nueva York actuó de forma tan sospechosa que el FBI está investigando si agentes de inteligencia extranjeros pudieron haber explotado los intereses financieros en Ucrania de Giuliani para influir en la Casa Blanca.
– MICK MULVANEY, LA MANO DERECHA DE TRUMP
El jefe de gabinete de Trump cometió un sonado error en octubre al reconocer ante la prensa que la Casa Blanca retuvo la asistencia militar a Ucrania con el objetivo de que Kiev investigara a los demócratas y las elecciones de 2016, aunque después intentó dar marcha atrás y negó que se condicionara la entrega de esa ayuda.
Pero su papel en la trama no se reduce a esa anécdota: Vindman y otros testigos han afirmado que Mulvaney tenía un acuerdo con Sondland para comunicar a los ucranianos que no lograrían una reunión con Trump si no investigaban a los demócratas.
– JOHN BOLTON, EL AS EN LA MANGA
Bolton era el Asesor de Seguridad Nacional de Trump durante los hechos investigados, pero según una de sus ex subordinadas, Fiona Hill, dijo entonces que no tenía nada que ver con “el negocio turbio que estaban cocinando Sondland y Mulvaney”.
Despedido en septiembre por Trump, Bolton está escribiendo un libro y parece dispuesto a criticar a su ex jefe, pero ha pedido a un tribunal que decida por él si debe obedecer a la Casa Blanca, que le prohíbe testificar, o a los congresistas que lo han citado.
Si llega a testificar, los titulares están garantizados: su abogado dijo la semana pasada que Bolton conoce detalles “que no se han mencionado hasta ahora en los testimonios de la investigación”.