Expertos prevén que Donald Trump enfrente batallas legales cuando deje la Presidencia de Estados Unidos y pierda la inmunidad de la que goza.
Washington, Estados Unidos, 12 de noviembre (RT).- Mientras Donald Trump sigue negándose a aceptar la derrota ante Joe Biden en los comicios del 3 de noviembre e insiste en que hubo fraude electoral, varios medios y expertos se preguntan a qué se dedicará el mandatario tras dejar la Casa Blanca y qué batallas legales afrontará una vez que pierda su inmunidad presidencial.
¿SE AVECINAN DISPUTAS LEGALES?
Una serie de demandas e investigaciones le esperan a Trump cuando regrese a la vida privada. En Nueva York, su ciudad natal, el Fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance, ha estado llevando a cabo desde hace más de dos años una investigación criminal sobre el Presidente y los negocios de la organización Trump. La investigación, centrada originalmente en pagos secretos que hizo el exabogado de Trump Michael Cohen antes de las elecciones de 2016 a dos mujeres que afirmaban haber tenido encuentros sexuales con el mandatario, se ha ampliado y podría enfocarse en fraude bancario, fiscal y de seguros, así como en la falsificación de registros comerciales.
Mientras tanto, la procuradora general de Nueva York, Letitia James, está investigando paralelamente si Trump y su empresa cometieron fraude fiscal.
Además, el mandatario afronta varias otras demandas, incluidas dos por difamación, presentadas por mujeres que lo acusaron de agredirlas sexualmente y luego de menospreciarlas al negar las acusaciones.
"Una vez que deje la oficina, su capa de inmunidad, real o implícita (por las pautas del Departamento de Justicia, que estipulan que un Presidente en funciones no puede ser procesado por delitos penales), desaparecerá", comentó David Weinstein, exfiscal federal de Florida, en declaraciones a USA Today.
"Es muy vulnerable a ser procesado", confirmó por su parte Jimmy Gurule, un exfuncionario del Departamento de Justicia en la Administración de George H.W. Bush, refiriéndose a la investigación de Vance, que examina las declaraciones de impuestos de Trump y otros documentos financieros. "Creo que la amenaza es muy real y muy sustancial", concluyó.
¿SE OTORGARÍA UN INDULTO A SÍ MISMO?
No hay una respuesta definitiva a esta pregunta. Ningún Presidente lo ha intentado antes, por lo que la validez legal de este supuesto acto quedaría en última instancia en manos de los tribunales, en caso de que se produjera una demanda.
Los poderes de indulto presidencial son muy amplios y le permiten a Trump amnistiar sin problemas a sus amigos (como ya ha hecho con el conservador Roger Stone) y a su familia. El mandatario no tendría que esperar a que se presenten formalmente cargos en su contra para autoindultarse: podría intentar hacerlo de forma preventiva para cubrir la posibilidad de un enjuiciamiento después de que deje el cargo.
Por otro lado, algunos juristas argumentan que un autoindulto sería inconstitucional, porque violaría el principio básico de que nadie debe actuar como Juez en su propio caso.
Hay que tener en cuenta también que los indultos sólo son aplicables a delitos federales, no a los los cargos presentados por tribunales inferiores.
En lugar de tratar de amnistiarse a sí mismo, Trump podría renunciar en algún momento antes de dejar el cargo, pasando la autoridad para perdonar al Vicepresidente Mike Pence, una opción que ya sugirió un abogado del Departamento de Justicia al Presidente Richard Nixon en 1974.
Sin embargo, no está claro qué ganaría el Vicepresidente si aceptara indultar a Trump, según indica en declaraciones a Reuters Corey Brettschneider, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Brown. "No creo que Pence quiera que eso defina su legado", opinó.
¿TELEVISIÓN, GOLF O CARRERA PRESIDENCIAL?
En cuanto a la futura ocupación de Trump, dos fuentes con supuesto acceso a conversaciones del mandatario con sus consejeros declararon a Axios que el mandatario está considerando volver a postularse para las próximas elecciones presidenciales de 2024.
En ese mismo sentido, el Senador republicano Lindsey Graham opina que el Presidente debería presentarse nuevamente en 2024 si su batalla legal iniciada tras la votación del pasado 3 de noviembre resulta infructuosa. "Lo animaría a que piense en hacerlo", declaró el lunes en Fox News Radio.
Mientras, el exjefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, también espera que Trump se mantenga involucrado en política. "Lo pondría absolutamente en la lista de personas que probablemente se postularán en 2024", afirmó.
Por otro lado, varios medios han sugerido que Trump podría lanzar su propia cadena de televisión, como ya consideró hacer en 2016 si perdía las elecciones. De hecho, The New York Times informa esta semana que las discusiones sobre el lanzamiento de una Trump TV han continuado este año. En este sentido, se especula que el Presidente buscaría competir por los espectadores con Fox News, cadena a la que ha criticado últimamente, llegando a tuitear que tanto los espectadores como él mismo "quieren una alternativa ahora".
Otro posible escenario es que el mandatario se aleje de toda vida pública. En junio, Trump reflexionó en la Casa Blanca sobre la posibilidad de hacer un viaje por carretera en una casa rodante con Melania, mientras que en un mitin de campaña en Pensilvania se preguntó si podría subirse a uno de los camiones estacionados en el lugar, ya que le gustaría "simplemente largarse de esto".
En este sentido, su exesposa, Ivana Trump, afirmó esta semana que el Presidente tendrá que enfrentarse a la realidad y "declarar que perdió" las elecciones, y cree que finalmente "irá a Palm Beach a jugar al golf y a vivir una vida normal", ya que "esa es la mejor opción". Aunque Donald Trump "odia ser un perdedor", tiene "mucho dinero, lugares a donde ir, vivir y disfrutar de la vida", explicó.