Ciudad de México, 15 de noviembre (SinEmbargo).– Los militantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) deben llamar a la disolución de todos los órganos de dirección para recuperar el rumbo, de lo contrario, se le dará “el tiro de gracia” a una fuerza política que ya perdió su perfil opositor, dijo el Senador perredista Alejandro Encinas en entrevista con SinEmbargo.
Encinas reconoció que el Sol Azteca vive la peor crisis de su historia, la cual no será resuelta por la dirigencia actual encabezada por “Los Chuchos” o Nueva Izquierda (NI) la corriente interna liderada por Jesús Ortega Martínez.
“Se requiere una refundación que recupere la vocación de independencia y autonomía del PRD respecto a los poderes políticos y económicos, esta refundación incluiría la disolución de todos los órganos de dirección para replantear de nuevo todos los términos, dejando atrás la vida tribal y el reparto de cuotas en el partido”, expuso el perredista.
El Senador afirmó que la disolución de todo el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido, así como los órganos internos – que se renovaron a través del Consejo Nacional en octubre y donde fue electo Carlos Navarrete Ruiz, miembro de Nueva Izquierda, como presidente nacional y sucesor de Jesús Zambrano Grijalva – debe ser convocada por todos los militantes que deseen salvar al PRD.
“Si no lo hace la militancia, no lo va hacer nadie. Es una exigencia que se debe hacer ya para salvar al PRD. Se puede convocar a un Comité Promotor Organizador para replantear al partido, porque estamos enfrentando la crisis más profunda, porque pasó de un partido que surgió de la lucha contra la represión y la defensa de los derechos humanos, a ser parte de gobiernos que han reprimido a la población. Se requiere una solución de fondo, que esto avance para corregir el rumbo, sino, se le estará dando un tiro de garnica al desarrollo del PRD”, comentó.
Alejandro Encinas contestó que su propuesta es refundar, cuando se le preguntó si estaba en sus planes renunciar a la fuerza política.
“He planteando la necesidad de rescatar este proyecto que fue sin lugar a dudas el que permitió la unificación de las izquierdas y construir una alternativa real y opositora en el país, pero lamentablemente no sólo se ha perdido el perfil opositor, sino también la autonomía de nuestro partido respecto al gobierno federal y económico. Hay en algunas regiones del país un proceso de descomposición como cuando se unen militantes o gobernantes, con el crimen organizado”, dijo.
El legislador lamentó la crisis que vive en el PRD en Guerrero, donde ni siquiera puede sesionar para elegir al nuevo Comité Estatal del partido en la entidad.
El sábado pasado se reunió el Consejo Estatal del PRD Guerrero en el hotel Casa Blanca de la Ciudad de México, en una sesión privada para discutir instalar el Consejo que debe elegir a los nuevos dirigentes, confirmó el coordinador nacional de Foro Nuevo Sol Vladimir Aguilar.
Sin embargo, no se llegó a ningún acuerdo, pues de acuerdo con el número de consejeros, Nueva Izquierda y sus aliados en la entidad podrían retener la dirigencia estatal en manos de “Los Chuchos”.
Lo hicieron en el Distrito Federal, porque en Guerrero no hay condiciones para que se reúnan los perredistas y elegir así a sus nuevos dirigentes. “La sesión se pospuso hasta nuevo aviso”, dijo Vladimir Aguilar.
QUE SE INVESTIGUE A TODOS
Alejandro Encinas planteó que el PRD debe esclarecer con “toda precisión” la red de relaciones que construyó al interior del partido el ex Alcalde de Iguala José Luis Abarca Velázquez, y también hasta dónde penetraron los grupos delictivos en la fuerza política.
“Lo primero es conocer la verdad física e histórica, para que se deslinden las responsabilidades de dirigentes, militantes y representantes populares del PRD”, dijo.
El legislador indicó que en cuanto a la elección de la nueva dirigencia perredista en Guerrero, hay una falta de sensibilidad de Nueva Izquierda fuente a la crisis que vive el país.
“Tendrían que ser sensibles y que no sea Nueva Izquierda, sino que genere consenso dentro del partido y que tenga credibilidad en Guerrero, hay que pensar más hacia afuera que seguirse viendo el ombligo. Hay que asumir la responsabilidad de los que acompañaron y movieron a Abarca y a su esposa en el partido, hay que señalar que hay que contribuir a que la autoridad identifique con toda claridad cómo se construyó la red que contribuyó a que ese grupo delictivo operara con impunidad en Tierra Caliente, Guerrero, Michoacán y Estado de México, ahí la dirección debe contribuir”, detalló.
Encinas acusó a Nueva Izquierda y al gobierno federal de omisión en el caso de José Luis Abarca, luego de que “Los Chuchos” realizaron una conferencia de prensa hace unos días para deslindarse de la responsabilidad de los actos delictivos de un edil abanderado por su corriente.
“Había denuncias expresas de Abarca donde se le vinculaba al homicidio de militantes perredistas, el de Arturo Hernández Cardona y otros dos compañeros, y ni la autoridad federal ni local ni la dirección del partido tomó cartas en el asunto. Nueva Izquierda debe afrontar la responsabilidad y ayudar a esclarecer la situación e identificar el nivel de penetración que tuvo este grupo criminal en las filas del partido en Guerrero y que la autoridad deslinde responsabilidades”, agregó.
Encimas es el primero en plantear una disolución de los órganos de dirección del PRD para refundar a la fuerza política, pero no el único en pedir la renuncia de Carlos Navarrete.
El 27 de octubre diputados miembros de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), liderada por René Bejarano Martínez, pidieron a Navarrete y a Nueva Izquierda reflexionar permanecer en a dirección nacional del Sol Azteca.
“Es grave el daño que (“Los Chuchos”) le han hecho y le siguen haciendo al PRD por sus visiones colaboracionistas con el gobierno de Enrique Peña Nieto, por la firma del Pacto por México, por la promoción y protección de delincuentes y por empeñar la independencia y la credibilidad del PRD”, afirmaron.
La madrugada del 4 de octubre, una semana después de los hechos de Iguala y con el aval sólo de dos de las corrientes más fuertes, “Los Chuchos” y Alternativa Democrática Nacional (ADN), el Primer Pleno ordinario lX Consejo Nacional electo el 7 de septiembre pasado, erigió como nuevo presidente nacional a Carlos Navarrete y como secretario general a Héctor Bautista López, de NI y ADN respectivamente, en medio del descontento generalizado del resto de las “tribus” pequeñas, incluyendo a IDN de Bejarano.
La “tribu” de Jesús Ortega Martínez, “Los Chuchos” no sólo se quedaron con la presidencia del partido, sino que el grupo que ganó 70 por ciento de los consejeros nacionales en los comicios internos de la fuerza política, se quedó con la mayoría de las secretarías del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y de los órganos internos.
Sin la participación de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el ex Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Casaubón, y con un quórum de 374 consejeros nacionales, se registraron dos fórmulas: la de Navarrete Ruiz y Bautista López y otra encabezada por Carlos Sotelo García y Gilberto Ensástiga Santiago.
La fórmula de Navarrete obtuvo más de 70 por ciento con 259 votos, Carlos Sotelo 26, 11 nulos y 59 abstenciones, con esa elección el partido pertenece en su totalidad a la fórmula que apoyó a “Los Chuchos”, pues no quisieron ceder posiciones importantes en las negociaciones.
Camilo Valenzuela, del Frente Amplio de Izquierdas (FAI), dio un posicionamiento donde aseguró que la nueva dirigencia del partido, le servirá a la derecha para mantener bajo control a la izquierda mexicana.
“En esa lógica operó junto con el bloque de la continuidad del PRD, para cerrarle el paso a una visión distinta y alternativa. La Presidencia, la Secretaria General y la mayoría del nuevo Comité Ejecutivo Nacional, así como múltiples dirigencias estatales, obedecerán a la política de oposición dócil al gobierno federal y sus políticas neoliberales,depredadoras y autoritarias”, dijo.
La Coalición de Izquierda que impulsó la candidatura de unidad de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, no registró candidato para la elección interna y tampoco aceptó ningún puesto al interior del CEN, ni en los órganos internos.
El Senador de la República, Miguel Barbosa Huerta, indicó que el grupo de NI y ADN se quedó con todo el partido y humilló a las expresiones más pequeñas: “Fue una decisión de una mayoría que se formó en un proceso que no puede calificarse del que debió haber sido, se intenta formar órganos que no corresponden a un equilibrio político, ni mucho menos al desempeño de un partido democrático, plural, que sin duda habla de la decisión que toma esta mayoría para ejercer el control. Me preocupa el ánimo de controlar al partido. La posición es no aceptar incorporarnos a los órganos del partido”.
Alejandro Encinas, dijo ese día que el PRD tiene a su “José López Portillo”, “gracias a un proceso de varios años que ha inducido el control del aparato burocrático de los recursos del PRD.
