Maduro llamó a los gobiernos, líderes y movimientos políticos a solidarizarse con Morales, un gran aliado de la llamada revolución bolivariana, que anunció su dimisión después de casi 14 años en el poder en un vídeo desde algún lugar indeterminado, tras haber dimitido en cascada la mayoría de los miembros de su Gobierno.
Caracas, 11 nov (EFE).- El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este domingo que la vida del mandatario boliviano, Evo Morales, corre peligro después de que este renunciara a su cargo en medio de protestas antigubernamentales.
“Está en peligro la vida de Evo Morales, debemos salvar a Evo Morales porque los fascistas son fascistas, con su racismo y su odio creen que llegó la hora de acabar con la vida de Evo“, dijo el mandatario venezolano en conversación telefónica transmitida por el canal estatal VTV.
Maduro llamó a los gobiernos, líderes y movimientos políticos a solidarizarse con Morales, un gran aliado de la llamada revolución bolivariana, que anunció su dimisión después de casi 14 años en el poder en un vídeo desde algún lugar indeterminado, tras haber dimitido en cascada la mayoría de los miembros de su Gobierno.
“Levantemos la bandera de la defensa de la democracia en Bolivia, no aceptemos este golpe de Estado y que cuidemos la vida del compañero Evo Morales que está en peligro“, insistió.
El Presidente venezolano denunció que opositores bolivianos pretenden detener a Morales y por ello consideró necesario realizar una vigilia para proteger la integridad física del “gran líder indio del sur”.
Condenamos categóricamente el golpe de Estado consumado contra el hermano presidente @evoespueblo. Los movimientos sociales y políticos del mundo nos declaramos en movilización para exigir la preservación de la vida de los pueblos originarios bolivianos víctimas del racismo. pic.twitter.com/c6JGrNBFGo
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) November 10, 2019
EVO TEME SER DETENIDO
Evo Morales denunció este domingo, luego de anunciar su renuncia como Presidente de Bolivia, que corre el riesgo de ser detenido ilegalmente y que grupos violentos asaltaron su domicilio.
“Denuncio ante el mundo y pueblo boliviano que un oficial de la policía anunció públicamente que tiene instrucción de ejecutar una orden de aprehensión ilegal en contra de mi persona; asimismo, grupos violentos asaltaron mi domicilio. Los golpistas destruyen el Estado de Derecho”, escribió Evo Morales en Twitter.
https://twitter.com/evoespueblo/status/1193702186024361985
El mensaje fue publicado después de que el líder cívico Luis Fernando Camacho asegura igualmente en redes sociales que existía una orden para detener a Morales.
“Confirmado!! orden de aprehensión para Evo Morales!! La policía y los militares están buscándolo en el Chapare, lugar que se escondió”, dijo Camacho en referencia a la zona del centro de Bolivia donde se supone que puede encontrarse.
“Los militares le quitaron el avión presidencial y está escondido en el Chapare, van por él!”, añadió.
https://twitter.com/LuisFerCamachoV/status/1193696877155356672
La Policía Bolivia no ha informado al respecto, ni tampoco otra fuente oficial del país, en el que se ha generado un vacío de poder tras renunciar también la mayor parte del Gobierno y quienes constitucionalmente podrían suceder al Presidente, como el vicepresidente y los jefes de las cámaras de Diputados y Senadores.
Medios de Cochabamba como los diarios Los Tiempos y Opinión difundieron imágenes del saqueo de una vivienda de Morales en esta ciudad, capital de la región del mismo nombre y a la que pertenece el Chapare, una zona de la que surgió Evo Morales como sindicalista colalero antes de llegar al poder.
Varias de las principales ciudades de Bolivia, como la propia Cochabamba, La Paz y El Alto, registran esta noche hora local una ola de saqueos, incendios y otros disturbios, mientras los ciudadanos piden ayuda a la Policía y a las Fuerzas Armadas.
Muchas unidades de Policía se habían retirado de las calles para amotinarse en las comisarías y las Fuerzas Armadas han reiterado en las últimas horas que cumplirán su papel constitucional sin intervenir en contra del pueblo.
Morales anunció su renuncia tras casi catorce años en el poder después de que se fueran sucediendo las dimisiones de cargos oficialistas como ministros, parlamentarios o gobernadores.
El hasta ahora Presidente había aceptado nuevas elecciones después de que un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) así lo propusiera tras detectar graves irregularidades en los comicios del pasado 20 de octubre, en los que fue proclamado vencedor para un cuarto mandato consecutivo entre denuncias de fraude.
Los líderes opositores y cívicos, los propios mandos de la Policía y de los militares le instaron a renunciar en medio de una creciente tensión en el país, en el que desde los pasados comicios murieron tres personas y más de cuatrocientas resultaron heridas en choques entre afines y detractores de Morales
#Renuncia #EvoMorales alegría para todo el pueblo de #Bolivia pic.twitter.com/1jRyLXwgqj
— Carlos González (@gonzalez_seclen) November 10, 2019
Evo Morales apareció en la televisión para anunciar su renuncia tras lamentar un “golpe cívico” y que la Policía se hubiera replegado a sus cuarteles en los últimos días.
Pidió a los líderes opositores Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho, a los que acusa de instar un golpe de Estado para echarle del poder, que “no maltraten” a los bolivianos y les “dejen de patear”.
“No queremos enfrentamientos”, agregó, a la vez que dijo renunciar para propiciar la pacificación de Bolivia y que vuelva la paz social.
El país andino atraviesa una seria crisis desde las elecciones del 20 de octubre, en las que Morales fue proclamado vencedor pero la oposición denunció fraude y pidió su renuncia.
Los enfrentamientos entre afines y contrarios a Evo Morales dejan desde entonces tres muertos y más de 400 heridos.
Morales renunció en medio de violentas protestas por supuestos fraudes en las elecciones del pasado 20 de octubre, y horas después de haber convocado otros comicios, como recomendó la Organización de Estados Americanos (OEA), que dijo haber detectado irregularidades graves en el cómputo de los resultados.