La escritora explicó que Europa central tiene ahora una crisis con la democracia. “Estamos intentando encontrar nuestro propio camino sobre cómo lidiar con estos problemas […] Tenemos algo profundo que contar al mundo. Por ello esto es muy especial para mí”, expresó la autora.
Tokarczuk también se mostró orgullosa de que, como premiada de 2018, sea la primera escritora galardonada por la nueva Academia Sueca surgida después de la crisis del año pasado.
Madrid, 10 de octubre (EFE).- La polaca Olga Tokarczuk, Nobel de Literatura 2018, está “muy orgullosa” de que este galardón y el de 2019, para el austríaco Peter Handke, sean para escritores de Europa central, donde dijo que hay problemas con la democracia y esperó que, “en cierto modo”, dé “una especie de optimismo“.
La Academia Sueca decidió este jueves el Nobel de Literatura de este año, pero también el de 2018, que quedó en suspenso debido al escándalo por denuncias de abusos sexuales en el entorno de esa institución y la crisis en que se precipitó.
Una vez anunciados los galardones es tradición que los nuevos laureados hagan una breve entrevista para la página web de los Premios Nobel, durante la que se mostró “muy feliz y orgullosa” de haber sido premiada con Hanke, dos escritores de Europa central, lo que tiene “mucho significado” para ella.
“Such a prize will, in a way, give us a kind of optimism.”
We spoke to Olga Tokarczuk just after she received news of her #NobelPrize – listen to the telephone interview to hear her reaction, and more:https://t.co/6jzREDUWBn
— The Nobel Prize (@NobelPrize) 10 de octubre de 2019
Europa central tiene ahora “problemas con la democracia. Estamos intentando encontrar nuestro propio camino sobre cómo lidiar con estos problemas”.
Por eso, consideró que un premio literario como este, “en cierto modo, nos dará una especie de optimismo, que tenemos algo que decir al mundo y que estamos aún activos y tenemos aún la capacidad de expresarnos y tenemos algo profundo que contar al mundo. Eso espero, por eso es muy especial para mí”.
Tokarczuk también se mostró “muy orgullosa” de que, como premiada de 2018, sea la primera escritora galardonada por la nueva Academia Sueca surgida después de la crisis del año pasado. “Eso también tiene mucho significado para mí”.
La escritora polaca (Sulechów, 1962), de quien la Academia Sueca destacó su “imaginación narrativa que, con pasión enciclopédica, representa el cruce de fronteras como una forma de vida”, estaba viajando en automóvil por Alemania cuando recibió la llamada que le anunciaba el galardón.
“Estaba tan sorprendida. Aún lo estoy -dijo-. No puedo encontrar las palabras justas para expresarlo. Es muy nuevo para mí. Hay cientos de llamadas de teléfono, y mensajes, me gustaría llegar a un lugar tranquilo, un hotel o algo así, para tomarme el tiempo para reaccionar.