Ciudad de México, 10 de octubre (SinEmbargo).– Sunil Gulati, presidente de la Federación de Futbol estadounidense, ha pedido a la FIFA que cambie el sistema de votación para las futuras designaciones. El país norteamericano perdió en duelo directo la sede para el 2022 con Catar. La FIFA anunciaba en diciembre de 2010, en voz de su presidente Joseph Blatter, que Catar 2022 era una realidad para el mundo del futbol mientras un montón de interrogantes en el aire.
Han pasado casi tres años con innumerables argumentos que amenazan para tumbar la designación del primer país de Medio Oriente. Investigaciones periodísticas apuntan a varios miembros del comité ejecutivo acusándolos de recibir sobornos por parte de la realeza catarí. El clima se convirtió en un factor preocupante que el mismo Blatter utilizó con el propósito de intentar cambiar de fecha la justa deportiva. Ha sido dentro de la FIFA de donde han llegado los principales opositores a la sede elegida.
El cambio de fecha era el principal tema de conversación antes de que se destapara el maltrato que trabajadores inmigrantes sufren en las construcciones de las sedes mundialistas. Varias organizaciones mundiales que se encargan de defender los derechos de los empleados, se han pronunciado en contra del máximo organismo del futbol. Hace unos días, en plena reunión de consejo, un grupo con cientos de tarjetas rojas se presentó a las afueras de las instalaciones de la FIFA en Zurich. Blatter tuvo que suspender cualquier decisión.
Ayer, Harold Mayne-Nicholls, ex presidente de la federación chilena de futbol y ex miembro de la FIFA hasta el año pasado, ha lamentado la decisión de la FIFA para 2022 argumentando que la designación de Catar es “un error muy arriesgado”. El sudamericano ha solicitado un nuevo proceso de votación en la que se pueda evitar que los miembros del Comité Ejecutivo puedan “recibir ofertas por su voto”.
EL mandatario recordado en su país por haber contratado a Marcelo Bielsa, defendió el proceso de designación de Catar: “La decisión fue tomada en diciembre de 2010. No hay una manera de probar que se hizo algo ‘antiético’. La familia del futbol, los medios de comunicación, no son capaces de demostrar que las cosas no se han hecho bien. En mi caso, fui allí, escribí el informe y nadie me ofreció nada”, recalcó aclarando que un cambio de fecha, complicaría muchísimo a las ligas europeas.
En medio de la polémica, sin mucho margen de cambio, ya se comienza a vislumbrar las futuras sedes. Decio de María, miembro de la cúpula alta de la Federación Mexicana de Futbol, ha declarado ante un congreso de la FIFA, que México estaría dispuesto a organizar la justa mundialista de 2026 junto a los Estados Unidos. La noticia ha generado un sinfín de comentarios. Con la intención de Uruguay y Argentina para ser anfitriones de la Copa del Mundo de 2030, celebrando 100 años del primer mundial en territorio charrúa, se antoja difícil tener dos mundiales consecutivos en América. Mientras Catar se defiende, el ritmo de la FIFA sigue sin enfocarse en los reclamos sociales por doquier. El futbol burocrático, mancha la pelota.
