Tras una larga lucha, los habitantes de Naucalpan y Atizapán, Edomex, ven un poco de luz: obtuvieron una suspensión provisional contra este desarrollo llamado Terralago que vende lotes desde 3.6 millones de pesos con la frase: “rodéate de naturaleza y tranquilidad”.
Ciudad de México, 9 de agosto (SinEmbargo).- Ciudadanos obtuvieron una suspensión, de momento provisional, contra un desarrollo llamado Terralago, en Naucalpan, en Lomas Verdes, en medio del cerro, la última loma verde que le queda a Lomas Verdes, lo que provocó gran alegría entre los habitantes de esa zona. «Hay una algarabía, hay una fiesta ciudadana, por qué, porque por fin vemos luz en el camino», celebró Miguel Miramontes, abogado de la organización Defendamos el cerrito.
En entrevista con la periodista Dulce Olvera para el programa De Doce a Una, que se transmite por el canal de YouTube SinEmbargo Al Aire, el representante legal reiteró que «la fiesta ciudadana [es] gracias a la suspensión de la Juez cuarto de distrito”, ya que en el cerro, frente a la ya contaminada presa Madín, el Gobierno panista de Naucalpan permitió a Fortem Capital en 2023 la construcción de dos torres de más de mil viviendas con espacios comerciales en una zona con la paradoja de tener escasez de agua e inundaciones.
Miramontes explicó que el amparo lo solicitaron con base en el “Derecho al medio ambiente, derecho a la sostenibilidad, derecho humano al agua y derecho humano de acceso a la justicia y a la información, fue basado en derechos humanos y como es un amparo en materia ambiental, nos basamos en el principio in dubio pro natura, que quiere decir que el Juez debe dar privilegio a la naturaleza, y también en el de no regresión, y en demás principios ambientales, en el de precaución que es muy importante, para que cualquier decisión que se tome sea con base en un criterio científico».
Tras una larga lucha, los habitantes de Naucalpan y Atizapán, Edomex, ven un poco de luz: obtuvieron una suspensión provisional contra este desarrollo llamado Terralago que vende lotes desde 3.6 millones de pesos con la frase: “rodéate de naturaleza y tranquilidad”.
«Una Juez prudente, sabedora del buen derecho, nos da la suspensión, por qué, porque todo el área que existe alrededor hay un problema muy grande de agua, primero, porque los bancos freáticos están abatidos, inclusive desde 1957 se publicó un diario en donde se decretaba la veda de agua en ese momento y ya no se podía dar con pozos, ahorita está el desarrollo, lo están autorizando con un pozo, que supuestamente se lo van a traer de otro lado», añadió.
Con el argumento del derecho humano al medio ambiente, al agua y el principio de precaución, la solicitud de juicio de amparo fue firmada incluso por niños y niñas. El cerrito defendido de 40 hectáreas es la “última loma verde” de Lomas Verdes. El cerro vecino, por ejemplo, alberga el centro comercial La Cúspide.
«Niños firmaron también el amparo, haciendo valer su derecho de los niños y las niñas a vivir en un ambiente sano verdad, todo esto más personas de la tercera edad y la conciencia de todas las personas del problema hídrico, ambiental, de vialidad, de servicios», ahondó el abogado de la organización Defendamos el cerrito.
«Vimos que explotaron los basureros porque son basureros y no se hacen rellenos sanitarios, entonces, toda la zona alrededor del desarrollo está colapsada, los lixiviados de los basureros llegan a la presa Marín, por eso se murieron toneladas de peces, el problema es muy grande, la deforestación en Jilotzingo que continúa, el crecimiento, por eso la comunidad celebra esta suspensión, porque se tiene que poner orden en el desarrollo urbano», agregó.
Sin bosques, como el ubicado en el cerro, no hay suficiente filtración de agua de lluvia a mantos acuíferos. Antes, la zona se abastecía por el sistema Cutzamala, pero ante su sobreexplotación se abrieron pozos, ahora igualmente explotados. Paradójicamente, hace unos días, la cercana avenida Periférico se inundó ante las fuertes lluvias. «Ayer toda la zona se inundó y es precisamente porque no hay dónde se va ahí el agua, el agua se va a las calles y de ahí a Tula», comentó.
«En lugar de infiltrarse aquí en esta zona de Atizapán, Tlalnepantla, Naucalpan, Cuautitlán, Tepozotlán, toda esta zona estaba abastecida de un 75 por ciento a un 85 por ciento por el Cutzamala, se acaba el Cutzamala, que ya no puede dar y, entonces, empiezan a sacar agua del acuífero, ahorita están sacando agua de los pozos y eso abate más aún, estresa más aún los mantos freáticos», alertó.
Y es que Lomas Verdes y Atizapán está tapizado de desarrollos inmobiliarios y comerciales que sobreexplotan el manto freático y contaminan con aguas residuales la presa Madín. En la zona Esmeralda en Atizapán, como sólo un ejemplo, las casas en alto tienen mantas que exigen abastecimiento de agua.
«Podemos ir a la zona Esmeralda de Atizapán y ver los nuevos desarrollos, que tienen mantas afueras de sus casas exigiendo agua, porque no tienen agua, porque las factibilidades se las dieron con Cutzamala, entonces, los mantos freáticos se van a tener que compartir con todos ellos por derecho humano al agua y si todavía metemos más habitantes sin saber exactamente los aforos de agua que existan, vamos a quedarnos sin agua todos y es vital», alertó.
«Entonces, con base a todo esto presentamos, y que los vecinos están muy impactados, ahorita están muy contentos con la resolución de la Juez Cuarto, de la suspensión provisional, y mañana es la audiencia para ver si es definitiva y existe una gran expectativa”, anunció el representante legal.
«Vemos que en satélite construyeron un edificio tremendo en el periférico violando todas las reglas, sin agua, porque la factibilidad era con pozo y de dónde van a sacar un pozo en Satélite, si el manto freático en Satélite está súper estresada y todos los todos los terrenos unifamiliares los están haciendo edificios, o sea, hay un criterio inadecuado, totalmente con falta de seriedad para el crecimiento y eso traía la comunidad muy molesta», sostuvo.