Entre las mujeres afroamericanas el uso de tintes permanentes cada cinco u ocho semanas o más se asoció con un riesgo 60 por ciento mayor de cáncer en comparación con un riesgo 8 por ciento mayor para las mujeres blancas. El equipo de investigación encontró poco o ningún aumento en el riesgo de cáncer de mama por el uso de colorantes semipermanentes o temporales.
Madrid, 9 de diciembre (Europa Press).– Los científicos de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) han comprobado que las mujeres que usan tintes para el cabello permanentes y alisadores químicos tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama que las que no usan estos productos, según publican en el International Journal of Cancer.
Utilizando datos de 46 mil 709 mujeres en el Estudio de Hermanas, los investigadores del Instituto Nacional de Ciencias de Salud Ambiental (NIEHS), descubrieron que las mujeres que usaron regularmente tinte permanente en el año anterior a la inscripción en el estudio tenían un 9 por ciento más de probabilidades de desarrollar cáncer de mama que las mujeres que no usaron tinte para el cabello.
Además, entre las mujeres afroamericanas, el uso de tintes permanentes cada cinco u ocho semanas o más se asoció con un riesgo 60 por ciento mayor de cáncer en comparación con un riesgo 8 por ciento mayor para las mujeres blancas. El equipo de investigación encontró poco o ningún aumento en el riesgo de cáncer de mama por el uso de colorantes semipermanentes o temporales.
“Los investigadores han estado estudiando el posible vínculo entre el tinte para el cabello y el cáncer durante mucho tiempo, pero los resultados han sido inconsistentes –recuerda la autora correspondiente Alexandra White, directora del Grupo de Epidemiología del Medio Ambiente y Cáncer del NIEHS–. En nuestro estudio, vemos un mayor riesgo de cáncer de mama asociado al uso de tintes para el cabello, y el efecto es más fuerte en las mujeres afroamericanas, particularmente en aquellas que son usuarias frecuentes”.
Un hallazgo interesante fue la asociación con el uso de alisadores químicos para el cabello. La doctora White y sus colegas descubrieron que las mujeres que los usaban al menos cada cinco u ocho semanas tenían aproximadamente un 30 por ciento más de probabilidades de desarrollar cáncer de mama. En este caso la asociación fue mucho mayor entre las mujeres afroamericanas que en los tintes.
El coautor Dale Sandler, jefe de la Rama de Epidemiología del NIEHS, advierte de que, aunque existe alguna evidencia previa que respalde la asociación con los alisadores químicos, estos resultados deben replicarse en otros estudios.
Cuando se le preguntó si las mujeres deberían dejar de teñirse o alisarse el cabello, Sandler precisa que “estamos expuestos a muchas cosas que podrían contribuir al cáncer de mama, y es poco probable que algún factor explique el riesgo de una mujer. Si bien es demasiado temprano para hacerlo una recomendación firme sería evitar estas sustancias químicas podría ser una cosa más que las mujeres pueden hacer para reducir su riesgo de cáncer de mama”.