Chicago, 9 Nov (Notimex).- Derrick Smith el demócrata expulsado de la Cámara de Representantes de Illinois en agosto pasado, debido a su arresto por recibir un soborno, recuperó su posición en la elección del 6 de noviembre y tomará juramento en enero próximo.
Smith declaró a la prensa sentirse “un hombre nuevo y emocionado de representar a los habitantes del Distrito 10”, aunque evitó hablar sobre la acusación del soborno por siete mil dólares que supuestamente recibió por facilitar la construcción de una guardería en su vecindario del oeste de Chicago.
La detención se produjo dos semanas antes de las elecciones primarias de marzo pasado, sin embargo, su partido lo defendió en ese tiempo, contendió y ganó el escaño, aunque más tarde una comisión legislativa lo expulsó de la cámara.
Smith se mantuvo en la competencia por la misma posición y triunfó en la elección de este martes.
El nuevo legislador reconoció que a pesar de su victoria tiene a muchos integrantes de su partido en su contra, incluyendo al gobernador Pat Quinn, así como a su ex jefe el Secretario de Estado, Jesse White, quienes trataron de impedir que recuperara su escaño, incluso financiando a su oponente.
“Personas como el gobernador y el secretario de Estado hicieron campaña en mi contra. Le dieron más de 100 mil dólares a mi oponente, e hicieron todo lo posible para que dejara de recaudar dinero. Pero eso ya está en el pasado”, expresó en una declaración a la prensa.
Smith fue acompañado por sus abogados quienes lo disculparon por no contestar sobre el asunto del soborno debido a que está bajo su asesoramiento, “sigue nuestros consejos. Pero todo va a salir, y será toda una historia”, dijo Victor Henderson.
El abogado aseguró que Smith puede ser solo un pez pequeño en una investigación federal que tendría un objetivo mayor, como el Secretario de Estado, Jesse White, “pero el tiempo lo dirá”.
El triunfo de Smith, que significó un fracaso de la intención de los demócratas del estado por evitarlo, pasó desapercibido ante la “súper mayoría” obtenida en Illinois por el partido. Gran parte de sus triunfos se debieron al nuevo mapa distrital que trazaron en su favor, y que colocó en desventaja a los republicanos, quienes incluso protestaron sin éxito en la corte.
