Mejor conocido como “El Fresa” por sus aires de alta sociedad, José Alfredo Hurtado Olascoaga aparece con una camiseta Gucci y un reloj Franck Muller en un video donde habla de la masacre en San Miguel Totolapan. Además parece tener un gusto por el ajedrez.
Ciudad de México, 7 de octubre (SinEmbargo).– El nombre de José Alfredo Hurtado Olascoaga, alias “El Fresa” y uno de los dos líderes de la Familia Michoacana, se colocó en el ojo público esta semana luego de que publico un video en el que reveló que el ataque ocurrido en San Miguel Totolapan, donde hubo al menos 20 muertos, estaba dirigido a él.
Aunque las autoridades dijeron el viernes que seguían investigando la autenticidad del video, este personaje no es desconocido, pues desde hace años es buscado debido a que, junto a su hermano Johnny Hurtado Olascoaga, alias “El Pez”, lidera La Familia Michoacana.
De acuerdo con diversos periodistas especializados en temas del narcotráfico, como Miriam Moreno, ésta es la primera vez que aparece en público José Alfredo Hurtado Olascoaga, lo que permitirá a las autoridades actualizar su fotografía en la ficha de búsqueda, pues tenían una imagen de hace más de 15 años del líder de La Familia Michoacana.
“El atentado era en contra de mi persona”, dijo Hurtado al describir el incidente, en el que pistoleros entraron a la ciudad de San Miguel Totolapan y dispararon contra una reunión del Alcalde con otros funcionarios.
Mejor conocido como “El Fresa” por sus aires de alta sociedad, el hombre en el video lleva una camiseta Gucci y un reloj Franck Muller que, según el sitio web de la compañía, tiene un costo aproximado de 40 mil dólares. Además parece tener un gusto por el ajedrez, pues su casa la decora con grandes piezas de este juego.
“El Fresa” aseguró en la grabación que tiene una casa a una cuadra de la sede de la Presidencia Municipal en San Miguel Totolapan, que todos lo conocen y que tan tranquilo se sentía en ese pueblo que hasta iba a los jaripeos sin escoltas y sin armas. Asimismo, reveló que recibió un regaño de su hermano “El Pez”, por confiarse del ataque que “Los Tequileros” advirtieron días antes en un video. Por último, aseguró que la Familia Michoacana tiene el dinero para pelear contra los otros grupos delictivos de la región.
“El Fresa” y su hermano “El Pez”, son de los más buscados por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), dependencia que en julio de este año aseguró cuatro inmuebles pertenecientes a los hermanos Hurtado Olascoaga ubicados en los municipios de Tlatlaya, Amatepec y Villa Guerrero.
Las fotografías de las propiedades incautadas difundidas por la FGJEM muestran lujosas casas con lagos artificiales, canchas deportivas, acabados en chapa de oro y autos de lujo.
En el video de 10 minutos duración, publicado en su perfil personal de la red social Facebook, “El Fresa”, -quien junto con su hermano Jhonny Hurtado Oloscoaga, “El Pez”, dominan el cobro de piso y narcotráfico en la Tierra Caliente de Guerrero-, añadió que el ataque ocurrió cuando estaba por bajarse de su camioneta blindada, a una reunión con el Alcalde y su padre.
Hurtado Oloscoaga narró que la reunión con estos los dos políticos antes citados, así como una decena de funcionarios públicos y pobladores, era por un video que salió previamente en el que encapuchados, denominados Los Tequileros, aseguró que reaparecía a tres años de la muerte de Raybel Jacobo de Almonte, quien formó parte de la Familia Michoacana, pero luego formó dicho grupo delictivo.
LA FAMILIA MICHOACANA CONTRA LOS TEQUILEROS
La masacre de del miércoles 5 de octubre ocurrida en el municipio de San Miguel Totolapan, Guerrero, evidenció el nivel de violencia que persiste en la región de Tierra Caliente, que comprende también a los estados de México y Michoacán, en donde, principalmente, las organizaciones criminales Los Tequileros y la Familia Michoacana se disputan la zona.
En México, los residentes de pueblos bajo presión de cárteles del narcotráfico a menudo establecen milicias de autodefensa o acuden a otros cárteles para que les ayuden a combatir a los agresores. Los cárteles ganan buena parte de su dinero extorsionando a granjeros y empresarios locales.
Totolapan es un pueblo montañoso extenso, pero escasamente habitado, en un área conocida como Tierra Caliente, una de las más azotadas por conflictos en México.
En otro video que circuló en redes sociales el miércoles, hombres armados que se identificaron como de la pandilla de Los Tequileros se atribuyeron la responsabilidad por la masacre.
El jueves, el Subsecretario de Seguridad Pública federal Ricardo Mejía aseveró que Los Tequileros están peleando con la Familia Michoacana en la región.
“El evento se da en el contexto de la disputa criminal entre grupos delictivos”, señaló. “En esa región imperó durante un tiempo un grupo conocido como Los Tequileros, que era un grupo dedicado fundamentalmente al trasiego y comercialización de amapola, pero también que se dedicaba al secuestro, la extorsión y perpetró diversos homicidios y desapariciones en la región”.
El cártel de la Familia Michoacana, pese a su nombre, fue expulsada del estado vecino de Michoacán hace años por un movimiento de autodefensa. Encabezado por Hurtado y su hermano, el cártel ha sido acusado de secuestros, extorsiones y ataques violentos contra policías y soldados.
Totolapan fue controlado durante años por el pandillero Raybel Jacobo de Almonte, conocido como “El Tequilero”.
En su única presentación pública, De Almonte fue visto en un video bebiendo con Mendoza padre, que era entonces el Alcalde electo de Totolapan, en el 2015. No estaba claro si Mendoza estaba allí voluntariamente o había sido forzado a acudir a la reunión.
En ese video, De Almonte se ve tan ebrio que balbuceaba incoherentemente y tenía que ser sostenido en su silla por uno de sus secuaces.
En el 2016, residentes del pueblo se hastiaron de los secuestros cometidos por Los Tequileros que secuestraron a la madre del líder de la pandilla para forzar la libertad de cautivos.
Aunque Los Tequileros dependieron por mucho tiempo del tráfico de pasta de opio de amapola local, el creciente uso del opioide sintético fentanilo había reducido la demanda de opio y bajado el nivel de violencia en Guerrero.