Halloween Kills es la segunda entrega de una trilogía a cargo de David Gordon Green (“Joe”), responsable del regreso de Jamie Lee Curtis al universo de terror del monstruoso e invencible Mike Myers.
Por Magdalena Tsanis
Venecia (Italia), 8 sep (EFE).- La actriz estadounidense Jamie Lee Curtis cerró hoy un círculo en el Festival de Venecia con la presentación de una nueva entrega de la emblemática y taquillera saga de terror Halloween, con la que debutó en el cine en 1978, y la recepción esta noche del León de Oro honorífico a su carrera.
Descendiente directa de la aristocracia de Hollywood -es hija de hija de Tony Curtis y Janet Leigh- Curtis es considerada una “reina del grito” desde que encarnó por primera vez a Laurie Strode en la película original de John Carpenter, pero hoy confesó que no le gusta el género como espectadora porque lo pasa mal.
“Mi éxito en el género se debe a que me asusto fácilmente, esta conexión natural con el miedo me ha permitido parecer asustada en la pantalla sin la necesidad de actuar”, dijo la actriz, que ha aparecido en la sala de prensa luciendo unas gafas de sol de Peggy Guggenheim.
Halloween Kills es la segunda entrega de una trilogía a cargo de David Gordon Green (“Joe”), responsable del regreso de Jamie Lee Curtis al universo de terror del monstruoso e invencible Mike Myers.
La primera, llamada Halloween al igual que la original, recaudó 255 millones de dólares (216 millones de euros) en todo el mundo. Curtis desveló que leyó el guion de la tercera parte en el avión que le trajo a Venecia y que no pudo pegar ojo en todo el trayecto.
“Si me caigo aquí dormida es por culpa de David”, aseguró, “es una forma extraordinaria de terminar la trilogía”.
Halloween Kills se sitúa minutos después del final del filme anterior. Laurie Strode, su hija Karen y su nieta Allyson han dejado a Michael Myers enjaulado en una casa ardiendo, pero este se las apaña para escapar y volver a sembrar el terror en el pueblo de Haddonfield.
Curtis valora de Gordon Green su capacidad para profundizar en la trama y los personajes y para conectar con la actualidad. Si en “Halloween” ponía el ojo en “la capacidad de las mujeres para entender su trauma y manifestarlo” ahora dibuja un círculo de terror más amplio y apunta al sistema.
“Hemos visto en todo el mundo cómo la gente se alza con rabia contra el sistema y eso está recogido en el guion, hay una frase en que alguien dice que el sistema esta roto y eso es así, el sistema está roto en todo el mundo y hay gente en todo el mundo diciendo que el sistema está roto”.
“Creo que es una película que le habla a nuestro tiempo, somos un mundo dividido, América es un país dividido y el mal parece que gana terreno, pero hemos estado ahí antes, espero que la película sea un espejo para el mundo y también un entretenimiento para los fans de la saga”, subrayó.
En cuanto al éxito de su personaje, la infatigable Laurie Strode, cree que se debe a que cualquiera puede sentirse identificado con ella. “Todos hemos sido magullados y maltratados, todos nos hemos levantado y hemos salido adelante. Es el humanismo de Laurie, te identificas con ella porque también estás herido y luchas contra tus demonios”.
Para Gordon Green, a punto de rodar para HBO una serie basada en otra franquicia de terror, Hellraiser, ver Halloween Kills puede ser una experiencia catártica.
“Con toda la frustración que hay en el mundo y tus propias tragedias, poder entrar en una habitación llena de gente, amigos y desconocidos, y gritar, dejarlo salir, es una oportunidad extraordinaria”, comentó.
En relación al León de Oro honorífico que recibirá esta noche en una gala en el Palacio del Cine del Lido, Jamie Lee Curtis señaló como las tres películas clave de su trayectoria Halloween (1978), A Fish Called Wanda, 1988) y True Lies, 1994).
“También he hecho alguna mierda de la que si queréis podemos hablar”, bromeó. Después añadió a la lista de destacables “Entre pillos anda el juego” (Trading Places, 1983) de John Landis.
A sus 62 años aseguró que sigue adorando su trabajo, no por la faceta pública sino por el trabajo en equipo. “Hay algo en la colaboración que me conmueve profundamente y me encanta”, dijo, “el equipo es lo más importante para mi, es la magia de la películas y lo siento así desde la primera vez que pisé un set de rodaje”.